La violinista silenciosa

3,2,1

Sarah se miró al espejo por ultima vez, su cabello estaba ondulado y suelto, el vestido que llevaba era negro de manga larga  (le encantaba, ella lo había escogido) pero lo que mas le aterrorizaba eran los tacones.
Su madre los había escogido de 9 cm, Sarah no estaba acostumbrada a caminar con ellos aunque había practicado toda la semana. Tenía miedo de caerse en frente de todo Heidelberg y personas de los otros estados y aun mas por que era una de los principales.

Al bajar vio a sus padres vestidos muy formalmente, por primera vez su padre le dedico una sonrisa.

-Eso es lo busco de ti, que seas la primera.

Subieron a la camioneta directo al palacio del gobernador. Eran las 7 pero el Sr. Molouzki los quería 1 hora antes. Sarah abrazaba el violín viejo que le dio su abuelo, definitivamente usaría ese. Cuando llegaron ella se despidió de sus padres, quería ver a sus abuelos pero no habían llegado aun.

Fue directo a la parte trasera del escenario, todos los hombres estaban vestidos con sacos blancos y grises. Marcello acomodaba su cabello hasta que vio a Sarah, sonrío. La miró de arriba abajo, ella sintió frías sus piernas.

-Te ves hermosa Sarah.- dijo cuando se acercó.

-Tu te ves muy bien.

-Bien tiene muchos significados. Guapo, sexy, hermoso, increíble, asombroso...

-¡Basta!- empezó a reír. Le tocó el pecho y este la beso en la frente.

-Tenemos que estar preparados.- susurró- se que lo harás increíble. Cuando todo esto termine tengo que decirte algo.

-¿No puedes decírmelo ahora?

-Arruinaría la magia.

Iba a replicar pero, el Sr. Molouzki llegó chasqueando los dedos.

-Tenemos que hacerlo perfecto, nada de nerviosismo o esas tonterías, tocaran ahí como si fuera la única forma de seguir vivos. En primera fila esta Andréw Llou, Sandra Leesui y Jessica Keele. Ellos son los que promueven las becas musicales para las mejores universidades, los traje por que quiero que tengan lo único bueno de su vida- los miró con una media sonrisa.- por cierto, espero que conozcan a Andrea Bocelli.

Todos se miraron entre ellos murmurando. Eso era una sorpresa.

-Feliz Navidad, será mejor que se vayan preparando mentalmente.

Sarah respiró hondo. Perfecto era su objetivo.

Tomó su teléfono, Jake cumplía 21 años. Todo el día estaba pensando que hacer así que se armó de valor y desbloqueó su numero.

"Feliz Navidad Jake y feliz cumpleaños, espero que tengas una gran noche."

Para enviarlo tenía que desbloquearlo, al momento llegaron como 20 mensajes de el de las semanas pasadas. No los leyó y no lo haría. El le había hecho algo muy lindo a Sarah en su cumpleaños, pero aún así no lo había perdonado.

Ahora, solo faltaban 5 minutos. Todos tomaron sus instrumentos y se formaron. Sarah estaba junto a Büsher y otra chica llamada Cordelia, ellos serían los tres principales en el violín.
Marcello era el que tenía más presión por que era el único chico del piano, mas el otro que solo le cambiaba la hoja. Lo miró antes de entrar al escenario, tenía tanta seguridad como no la tendría Sarah.

3,2,1...

Salieron sonrieron al escenario. La gente aplaudía, todo el lugar estaba decorado fantásticamente, el viento era frío pero no lo sentían. Estaban nevando unos pequeños copos que le cubrían el cabello a Sarah.

Cuando entró el Sr, Molouzki aplaudieron mas fuerte. Tomó un micrófono y hablo con una sonrisa (muy forzada para Sarah)

-¡Feliz Navidad! Este año nos a tocado a nosotros dirigir esta maravillosa velada navideña, nuestro...

Sarah dejo de prestarle atención por que al fin pudo localizar a sus abuelos. Estaban sentados mirándola con una gran sonrisa, Anna y Jannet estaban a lado suyo, Sarah no pudo evitar soltar una risita al ver la expresión incomoda de Anna cuando Jannet le hablaba.

-Esperamos que los disfruten, gracias.

Se sentaron y comenzó el show.

•••

1 de Enero.

Sarah empacaba sus cosas para su viaje a Inglaterra con sus abuelos. Bajó la maleta arrastrando, sus padres no estaban ellos se había ido temprano al trabajo. Al menos desde que tocó en ese recital le daban un poco mas de libertad.

Marcello la esperaba fuera para llevarla al aeropuerto. Sus abuelos tenían que estar ahí antes por unos pagos, por eso el novio de Sarah se ofreció.

-Te vez muy linda hoy.

La besó en los labios, Sarah todavía no estaba acostumbrada.

Cuando había terminado el recital esa noche de Navidad. Marcello se había acercado a ella con una ramo de rosas y un perfume en caja. Le había confesado todos sentimientos y ahí fue cuando le pregunto si quería estar con el.

Se encontraban de camino al aeropuerto, Marcello besaba su mano provocando pequeñas risitas de Sarah.

-¿Por cuando te iras?

-Cambiaron de planes, esos quieren que vayamos por 3 semanas.

-Regresaras exactamente cuando entremos a clases. Eso esta mal, no tendré tiempo contigo.

-Este es tu ultimo semestre, no debes distraerte.

-La pequeña Sarah siempre preocupándose por los demás.

Cuando llegaron, Marcello la ayudo a llevar su maleta. Sus abuelos estaban esperándola junto al detector de metales.

-¡Sarah!- su abuelo la abrazo.

-Pensábamos que te habías atascado en el tráfico, ¿como viniste?

Sarah señaló a Marcello y la abuela sonrió encantada.

-¡Claro! Marcello gracias, eres un gran chico.

-No hay de que.

-Bueno es hora de que nos vayamos, despidete de tu "amigo"- guiño la abuela.-te esperamos en el tunel.

Los vio pasar por el detector y Sarah lo miro timida.

-Entonces, nos vemos luego.

-Ven aqui pequeña.

La abrazó cubriendo su cara con besos. El la hacia reir mucho, hacia que se sintiera segura y todo eso la enamoraba mas, Sarah le tenia un poco de miedo a la que tal vez era su primera relacion seria.

-Adios tu.

Le dió un pequeño beso y se fue.

Al estar dentro del avion buscaron sus asientos, guardaron el equipaje en su lugar y se sentaron. Sarah miraba por la ventana con sus abuelos a su lado platicando de "los horarios del desayuno, almuerzo y cena" su abuelo era como un  niño cuando se trataba de comer. Ella estaba lista para su viaje. Visitaria el reloj, los palacios, caminaria por donde pasaron los Beatles...

"Pasajeros, favor de tomar sus asientos y abrochar sus cinturones, en 2 minutos inicia el vuelo de destino a Nueva York, Estados Unidos. Disfruten su vuelo y gracias por abordar en aerolineas Deutsche Lufthansa"

Sarah casi escupe el jugo que tomaba, miro a sus abuelos estupefacta.

-¡Sorpresa!-gritó su abuelo feliz- pensaba que cuando dijimos que "cambiaríamos los planes" sospecharías que no iríamos a Londres pero, ¡Que bueno que me equivoque!

Sarah los miró forzando una sonrisa.

Santa mier...

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THIS IS THE NEW AMERICANA!!!!! como me gusta esa canción xD

Si les gusta denle fav y comenten. Adiós you!!!!!