La pelea

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-Hija, tu madre y yo queremos hablarte sobre algo.

La familia Schumacher cenaba tranquilamente pollo, Sarah todavía recuerda cuando pensó seriamente en volverse vegana.

-¿Sobre que, padre?

-Sabemos que tu abuelo, te ofreció un... Estudio en el extranjero, algo que al principio nos exalto por no tomar nuestro consentimiento pero que nos a dejado que pensar.

Sarah los miró mientras masticaba.

-Tal vez, el tenga razón- dijo su madre.

-Ustedes ya saben lo que le respondí. No creo poder cambiar de opinión tan rápido.

-Mira Sarah, tal vez no te dejamos ir a estas escuelas, pero era por tu bien, no queríamos que te arruinaras como esos chicos.

-Papá, ¿te das cuenta que estas insultando a Anna?

-El punto es, que vemos un gran futuro si exploraras algún otro lugar y hablaras otra lengua.

-Yo se ingles, padre. Un perfecto inglés británico.

-¿Y no te gustaría ir a... Londres para practicarlo? - la animó su madre.

-Caroline, Londres no. He escuchado que los ingleses, pueden ser muy rebeldes y locos...

-¿Entonces donde me enviarían?- la interrumpió Sarah.

-Hemos investigado, y encontramos una escuela en Italia, que trata a los genios de todo el mundo. También te dan un beca si eres un prodigio musical.

Sarah los miró sorprendida. Lo ultimo le pareció tentador, pero la indigno que sus padres ya estuvieran formando el futuro de Sarah cuando debería ser ella quien lo hiciera.

-¿No creen que sería peligroso? Ya saben, una adolescente menor yendo a un país desconocido, en donde no conoce a nadie y no se, tal vez podrían violarla o...

-¡Sarah!-le gritó su madre. -¡Por dios, ni siquiera menciones esas atrocidades!

-¡Bien, pues esa es la realidad! ¡Así que si quieren llevarme a otro lugar, tendrán que arrastrarme, por que yo no me quiero ir!

Sarah se levantó de la silla, tomando su plato, y dejándolo en el fregadero. Subió a su cuarto sin volver a mirarlos, no sin antes escuchar a su padre decir:

-¡En cinco minutos nos vamos!

Se tiró en la cama tomando su celular. Tenia que hablar con Anna, ya estaba harta de su soledad.

-¿Que hay linda?

-¿Podríamos ir a algún lado? ¿Al cine tal vez?

-Estoy haciendo tarea. No creo que mis padres me dejen ir por que ya tengo cuatro faltas, y si no entrego esta, me van a suspender.

-Bueno, te ayudo. Solo quiero salir de mi casa. Si mis padres me van a enviar a un internado, tengo que hacer algo loco.

-¿Quien eres y porque secuestraste a mi educada y santa amiga?

-Solo... Esperame, ya voy contigo.

Colgó y en ese instante le llego un dolor en el vientre. Salio corriendo al baño y como temía, ahí estaba "Andrés" saliendo.

Con razón se alteró en la cena con sus padres.

Se cambió, bajó las escaleras, y silenciosamente revisó la sala, el comedor, el estudio y la cocina.

Genial, sus padres ya se habian ido a la iglesia.

Sacó su bicicleta del garage, no le gustaban los autos, contaminaban mucho, aparte sus padres no la dejarian conducir. Pasó volando las tiendas, viendo varios carteles de "Smoke skin". Mañana seria el gran dia. En 10 minutos ya se encontraba al frente de la casa de su mejor amiga. Tocó la puerta y la señora Klüger aparecio.

La violinista silenciosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora