» CAPITULO ONCE

4.2K 354 35
                                    

» CAPITULO ONCE


Cama. Vodka. Whisky. Cerveza. Amigas. Dolor de estomago, piernas, garganta y cabeza.

Estaba acaba. Juvia habia traído vodka y robamos de la bodega de bebidas que los chicos habían formado con los años.

Juvia vivía ser a de mi. Tampoco era mi vecina, pero vivíamos a solo quince minutos de la otra.

En cambio con Levy, vivíamos a veinticinco minutos en auto y un año caminando.

Por primera vez desde que me mude aquí odie la luz que entraba por mi ventana. Estaba en estado vegetal y estaba segura de que si fuera un vampiro estaría hecha cenizas. Aún que estuviéramos en invierno, el sol estaba a todo lo que daba brindándonos un lindo calor... pero hoy yo no quería ese 'lindo calor'.

— Juvia, Levy... – ronroneé incomoda en la cama — Despierten, me están matando – moví mi pierna izquierda dandole un golpe en la cara a Levy quien me golpeo con su brazo en mi pecho.

— No molestas Lu – murmuro de nuevo en mis piernas.

— Ya cállense las dos – murmuro molesta Juvia quien estaba encima de mi, su cabeza estaba a mitad de mi estomago y sus brazos cerca de la cara de Levy.

— Deben-... – bostece alto mientas me decidía en levantarme o no de la cama — Debemos levantarnos... tal vez.

— Dejémoslo en tal vez, ¿si? – Levy abrió un poco sus ojos para volver a cerrarlos por la luz — Cierra bien las cortinas, quiero seguir durmiendo

— Juvia piensa igual – Juvia se escondió mas en mi estomago sacándome el aire.

— Si me dejan levantarme – me apresure decir para moverlas una vez más.

Sin rechistar esta vez me levante dejando entrar en aire frío a mi cuerpo, lo cual hizo que me arrepintiera. Estaba en bragas y una blusas gigantesca.

Esa era mi pijama en verano, ¿pero en invierno? Debí estar muy tomada para confundirla. Cerré las cortinas de la habitación poniendo ganchos en los espacios y pegue cinta en los costados sin dejar pasar ni una pizca de luz.

Con el cuarto oscuro mis dos amigas se acomodaron dejándome espacio suficiente para volver a dormí cómodamente.

Eso duró poco.

Unos pasos pesados se acercaron a la puerta abriéndola se golpee. — ¿A qué hora se van a levantar? – hablo una chica en la puerta. — ¿Piensan dormir todo el día?

Juvia. Levy y yo abrimos los ojos mirando enojadas a la peliroja en la puerta. No era Natsu, ni Gajeel ni mucho menos Gray.

Sin pensarlo dos veces corrimos a la chica a gritos mientras nos volvíamos a acomodar en la cama.

Tiempo después la puerta se volvió a abrir dejando pasar a tres personas. Una de ellas tomo a Levy entre sus brazos, ella se quejó pero al ver de quien se trataba se dejo cargar de nuevo. La siguiente fue Juvia quien tomo mi mano para no salir mientras pedía que la soltaran, Gray dijo su nombre junto con las palabras »vamos a la cama« y eso fue suficiente para que ella soltara su mano.

Y el siguiente fue él. Toco mi frente con la suya revisando mi temperatura, haciendo una mueca comenzó a regañarme por la cantidad de alcohol que había tomado en una sola noche.

»Tu eres el culpable« tenía ganas de decirle pero las palabras no salieron.  Me acomode mas en la cama tapándome hasta la cabeza dejando a todos atrás.

Trabajo, personas, Natsu... puede que al ultimo no tanto.

— Lucy – toco mi hombro sacudiéndolo un poco, abriendo un ojo lo mire enfadada, mire mi reloj de mesa y vi que eran las tres de la tarde. Había muerto casi todo el día. — Hoy daremos un concierto, pero tenemos que llegar temprano... No se si quieras venir con nosotros.

Amor a un escenario; naluDonde viven las historias. Descúbrelo ahora