Amor a un escenario; nalu

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Su mirada chocolate miro con atención mis ojos esmeraldas mientras miraba disimuladamente hacia abajo, entrecerró los ojos y levanto su mano derecha hacia la izquierda.

— Este es tu fin, Dragneel – mencionó ansiosa.

— No vallas tan rápido, Lucy – sonreí de lado esperando mi victoria.

Restregando el pedazo de papel en la mesa mire con atención el número que había soltado. Cinco.

— ¡TE GANE! – Deje caer de golpee mi ultima carta en la mesa, seis.

Lucy llevo sus manos a su cabeza melancólicamente esperando a que fuera mentira — Imposible... – susurro con terror. Mientras yo gritaba mi victoria al aire.

— Ustedes dan pena – dijo Gajeel sentado en la mesa con una baraja llena.

— Incluso en un juego tan fácil ustedes no pueden tomarlo con calma – Levy soltó las dos últimas cartas en la mesa rendida.

— Los dos son tan competitivos – Gray rodo los ojos me mientras Juvia reía en su asiento.

— Incluso en un juego de UNO – soltó una carcajada hacia la reacción de todos.

— Bien, Lucy. Tu castigo será...

— No hay peor castigo que vivir contigo, ya rindete – Gray subió los hombros hacia arriba restándole importancia.

— Ya rindete Natsu, no mas apuestas – se paro Gajeel de su asiento seguido de los demás — Es hora de ir al escenario a preparar todo.

Nos encontrábamos en el estadio que estaba en la ciudad, hoy era el segundo concierto en ese lugar. Ayer no había parado de llover, por lo tanto se cancelo y se retomo para hoy.

— Que pesado – hable entre dientes.

Lucy río un poco de algo que había dicho Levy mientras Juvia se unía a la conversación. Parecían muy buenas amigas.

Subiendo al escenario tome el micrófono en mis manos y recordé mi victoria — ¡Esta va por mi victoria contra Lucy! – grite por el mismo llamando la atención de los trabajadores del lugar — Lo siento... – susurre soltando una sonrisa divertida.

El sonido era bueno, el eco que hacia la batería hacia bien conjunto con la guitarra de Gray. Mi voz se escucha por todo el lugar mientras las chicas solo se quedaban viendo hacia nosotros, los ojos chocolates de Lucy me miraron divertidos mientras ataba su cabello en un moño algo revuelto, una sonrisa traviesa paso por sus labios contagiándome.

Comencé a aplaudir al compás de la canción y las chicas siguieron mi juego mientras Gajeel hacia un buen ritmo de batería y Gray un solo con la guitarra.

'Only You' era una de mis canciones favoritas, de las mejores que había escrito Gray para ser sinceros. Aunque el pareciera serio y sin sentimientos, él era el poeta detrás de todas nuestras canciones.

El ultimo acorde retumbo en el aire dejándome sin aliento por primera vez en un ensayó y sonreí hacia mi rubia amiga quien levanto ambos dedos tratando de decir: "Buen trabajo"

Baje del escenario rápidamente y me acerque a ellas, Gray y Gajeel siguieron de mi dirigiéndose cada quien con su pareja.

— ¿Y bien? – pregunté sin aliento.

— Estuvo muy buena, aunque parece que vas morir – se cruzo de brazos.

Lleve mi mano hacia mi cabello jalándolo hacia atrás, note sus pupilas dilatarse a la acción y reí divertido. Parpadeó un par de veces y di un paso hacia adelante.

— Estoy bien, solo un poco cansado.

— Deberías ir a dormir al camerino en ese caso – Gané un pequeño sonrojo de su parte al tocar mi pecho para empujarme hacia atrás y tome una de sus manos con la mía.

— Gracias por preocuparte por mi – dije con sinceridad, para mi sorpresa ella se puso mucho mas roja de lo que pensaba, safando su mano de la mía la llevo hacia su pecho.

— N-nunca me contaste del libro que te presto la cafetería... – susurro tartamudeando y comenzando a caminar directo al camerino.

— Mmh, cierto – pase uno de mis dedos por mi barbilla pensando por donde empezar — Se trata sobre una chica, muy linda por cierto, que llega a Fiore para convertirse en una maga del gremio de sus sueños, Fairy Tail, en el camino se encuentra con un chico que va en busca de su padre que desapareció cuando era apenas un niño. Después ella se topa con otro chico que dice ser mago de Fairy Tail y que si va a su fiesta en un barco ella podría entrar sin problemas, al final ella resulta ser engañada por el mago falso. En su lugar, el chico que se había topado antes era el verdadero mago de Fairy Tail. Después de ese malentendido ella entro al gremio gracias a él, se hacieron muy amigos y...

— No me digas, ellos se enamoran – dijo con ironía.

— Si, pero no tienen un final feliz.

— ¿Como? ¿Que no se supone que siempre terminan felices? – preguntó curiosa.

— No, ella muere para salvarlo a él.

— Eso es terrible – Lucy llevo sus manos a su pecho pensando en el final de la historia. — ¿No reencarnaron? Dime que reencarnaron y se volvieron a encontrar – sus ojos brillaron como una aficionada y recordé lo que había dicho anteriormente «lo hago por el amor a los libros» y su estante lleno de fantasía.

— Cambiando de tema, tengo sueño, vamos al camerino a dormir – un bostezo salió de mi boca y estire mi mano para tocar la perrilla del camerino.

— Si... – susurró pensativa.

— Bien, dormiré en este sofá, tu duerme en el otro – los sofás eran como camas para los artistas en momentos como estos, por eso siempre nos daban unos acolchonados y escondían mantas en los guardarropas.

Me dirigí al guardarropas tomando dos mantas, le pase una a Lucy quien se acomodo en ella en solo segundos mientras yo trataba acomodarme correctamente.

Cuando por fin conseguí ponerme en la mejor posición que podía, voltee a ver a mi rubia amiga dormir con una sonrisa en la cara.

Ella algunas veces era arrogante e irritante, pero en ocaciones como esas ella hacia latir mi corazón a mil por hora dejándome sin respiración.

— Al final reencarnaron – dije para mi mismo — Y vivieron felices por siempre. Aunque suene cursi, o eso espero – termine para cerrar los ojos.

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L  &  A
Yusa.