*MENSAJE DE DANIELA*
D: Tenemos que hablar, he tenido una gran idea... Bueno, hace tiempo que la estoy haciendo y necesito tu ayuda.
No entendía nada, sinceramente... Viniendo de ella, podría ser cualquier cosa.
A: Okey, ahora voy a jugar al Baloncesto con los chicos.
D: Ooh, vale entonces no te entretengo.
A: Me encanta que me entretengas.
D: Bobo...
A: Enana...
D: Te quiero.
A: Y yo a ti.
¿Que sería lo que tramaba Daniela? Esta muy loca y es lo que me gusta de ella, pero podría salirme con cualquier idea.
Mientras caminaba... El terror me recorría el cuerpo, la calle estaba desierta, solo varios coches estacionados en el lado izquierdo de la carretera.
Aun que era de día... Entre las notitas anónimas, las pesadillas y los nervios... Me tenían completamente consumido. Me aterrorizaba estar solo, aumenté mis pasos, quería llegar cuando antes a la cancha con los chicos.
Cuando llegué los vi a lo lejos, pasándose unos a otros la pelota
Si soy sincero, estábamos tan ridículos... Ver a unos chicos de 24 años jugando al Baloncesto como críos...
Pero si reconozco que era una perfecta forma para desconectar del mundo, desconectar del trabajo, los problemas.
No existía nada más, solo lanzar y encestar.
Vi a Isaac a lo lejos, a su lado Miki y Zaca, Luis en una esquina, Ruben en el centro y Juan Carlos y David delante, apoyado sobre la canasta estaba Alberto.
Sentadas en la hierba, bajo la sombre de un gran árbol había tres chicas, las distinguí enseguida. Estaban Celia, Andrea y Paula.
ANDRÉS: Ey! ¿que hacéis aquí?
PAULA: Venimos a ver el partido.
ANDRÉS: Jajaja estas aburridas ¿no?
ANDREA: BASTANTE! Jajajja
Me fui hacia la cancha pero Celia me llamó y di la vuelta sobre mis talones para mirarla a los ojos.
CELIA: Tenemos que repetir lo de esta mañana...
ANDRÉS: Si, algún día de estos estaría bien.
Miré a Andrea que se puso roja roja como un tomate, miró a Celia sorprendida y le apretó la mano "disimuladamente" ...
Chicas... -Murmure mientras me dirijia a la cancha, con una sonrisa torcida en mis labios.
ISAAC: EY!! Te pesa el culo, ya íbamos a empezar sin ti.
ANDRÉS: Oooh! Que ataque más gratuito.
MIKI: Vengaaa, empecemos.
Jaja no quería admitirlo pero íbamos perdiendo, yo solo miraba hacia los lados en busca de ¿algo? ... ¿alguien? Nidea...
Reaccioné de mi trance cuando note que tenía el balón entre mis manos, no malgasté la oportunidad, me coloque y arrastré los pies en el suelo saltaron pequeñas chispas imperceptibles y lancé el balón.
Los siguientes segundos que estuvo en el aire no paré de morderme el labio inferior con fuerza, el balón rebotó en el tablero y callo en el aro.
Había conseguido empatar el partido, escuché como Luis me felicitaba y unos aplausos detrás de mi, giré para ver a las chicas, pero Celia no aplaudía... Ella estaba con la mirada perdida en Zaca, un chico rubio de ojos grises del barrio.
Una sensación rara invadió mi estómago... ¿sera hambre? No creo.Desvíe la mirada hacia otro lugar.
*MOMENTOS ATRÁS *
~NARRADO POR CELIA~
ANDREA: ¿¡ PERO QUE!? ¿QUE HICIERON EN LA MAÑANA? ¡CELIA CONTESTA!
CELIA: Andrea dejame la mano vas a conseguir cortarme la circulación!!
ANDREA: Vale vale, perdón... ¡PERO CUÉNTAMELO!
CELIA: No paso nada, solo desayunamos juntos, no he matado a nadie.
ANDREA: ¿Te gusta?
CELIA: NOO! El tiene novia, Daniela ¿recuerdas?
ANDREA: Conmigo no tienes que finjir Celia... Dímelo.
CELIA: Vale si, me gusta... Un poco... Pero no puedo hacer nada.
ANDREA: Tranquila ¿vale? Hay muchos chicos en el mundo, seguro que alguno esta loquitó por ti... Y ya que estamos... Zaca no te quita la vista de encima.
Giré la mirada hacia la cancha y me encontré con los ojos de Zaca, eran grises, pero muy bonitos, te hipnotizaban, también su cabello rubio alborotado que caía hacia un lado.
No me había fijado en lo guapo que era hasta ese momento.Escuché aplausos, pero lejos de mí como en un susurro, pero yo seguía embobada con sus ojos, una sonrisa se dibujo en sus labios y sentí como mis mejillas ardían, en un acto reflejo, desvíe la mirada.
Tranquila Celia, solo... Respira.
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ELECTROKINESIS
FantasíaLlega un momento en el que todo lo que tenías claro en esta vida se desvanece. Es difícil abarcar todos los conocimientos que ansiamos alcanzar. Pero ¿Y si las reglas del juego cambiasen? En este juego, Andrés, tendrá que mover ficha para sobreviv...