¡Eh, Papá! »Harry Styles

¿Hija?

Una fotografía, eso era lo que necesitaba. Un recordatorio de que ella seguía siendo real y no solo en mis pensamientos. Darcy corrió a nuestra habitación, donde estaba su mochila y regreso con algo en mano. La foto, obviamente, impresa en ese papel brillante que acostumbran llevar las fotografías. Se la entregó a Zayn y los otros cuatro nos apretujamos para poder verla.

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Me quedé sin aliento, como los cuatro chicos a mi lado.

La fotografía mostraba a una  Emily  más madura, entallada en un precioso vestido verde. Se veía preciosa, más que eso, era perfecta y hasta más que eso. Pero había un problema.

A su lado se encontraba un chico ¡y no cualquiera! Si no que era el chico más caliente que había visto, ya, se que sonó algo gay, pero hasta yo, que soy un hombre, lo encontraba apuesto.

Era rubio, de brillantes ojos azules y vestía de traje. Ambos sonreían, radiantes, como si estuvieran pasando por la mejor noche de sus vidas el uno junto al otro, abrazados.

D-i-a-b-l-o-s

Fingí una sonrisa.

-Darcy, cariño ¿el es...? –pregunté.

-Es el tío Thom –dijo la niña inflando sus mejillas mientras jugaba con sus pies.

-Oh –seguía con una sonrisa tan hipócrita que dolía- ¿Y el es muy cercano a ustedes o...?

-Mucho –asintió mientras caminaba hasta la cocina- Vive con nosotras.

Esto pasó así: Louis se atragantó con las palomitas que comía, Niall se golpeó la mano con la punta del mueble y chilló como niña, Zayn escupió la bebida que tomaba en la cara a Liam y yo...pues yo me caí del sofá golpeándome en el trasero.

-Con...con ustedes –repetí con voz muy aguda.

-Eso fue lo que dije, papi –me respondió mientras trataba de alcanzar un envase de galletas.

En eso, el teléfono sonó. Bien, parecía que Emily sí llamaría todos los días.

Darcy abortó su misión y corrió a buscar su teléfono, que estaba sobre la mesa desde ayer.

Los cinco nos acercamos para escuchar y mi niña, tan inteligente, lo puso en altavoz.

-¿Darcy? ¡Hola mi amor!

-¡Hola mami!

-¿Cómo estas, preciosura?

-Muy, muy bien –rió.

-Eso es...

Entonces, justo como ayer, se escucho la voz de fondo que, ahora sabía, era de ese rubio sacado de una playboy.

-¿Hablas con Darcy?

-No, pf –mintió Emily.

-¡Es el tío Thom! –chilló Darcy, contenta.

-¡Si lo es! ¡Déjame hablar con mi hija Emily Isabella!

Paren todo.

Los otros cuatro chicos a mis lados también habían escuchado eso y me miraron con estupefacción y lastima, algo así como "Lo lamento, te ganaron"

Pe-pero qué demonios...

-¡No, Thommy, yo quiero hablar con ella!

Oh, claro, Emily no le decía nada. ¡Vamos! El tipo acaba de llamar a mi hija su hija.

-¡Hablaste con ella ayer!

-Pero eso no...Thommy... ¡Thommy eso es injusto!

-La vida no es justa. ¡Hola Darcy!

-¡Tio Thom!

-¿Cómo estás princesa mía?

¿Su princesa? ¡Ella es mía! Mía desde ayer... ¡pero mía!

-Muy bien ¡Hoy vi la sirenita y me acordé de ti!

-¿Necesitabas de tu galán príncipe?

-¡Sí! ¡Y de mamá también!

-¿Qué mamá qué? ¡Ponlo en altavoz! –gritó Emily desde atrás.

-Ya, ya esta pequeña gruñona.

¿Pequeña gruñona? Este tipo se las verá conmigo. Y con cuatro más.

En otras noticias, creo que Zayn va a golpear el ventanal...solo digo.

-Darcy decía que vio la sirenita

-¿De verdad bebé? A que no sabes qué película vimos Thommy y yo ayer.

-¿Cuál? –respondió animada Darcy.

-Aladdin –gritaron ambos.

-¡Oh! –Se emocionó Darcy- ¿Y la vieron sin mí?

-Bueno mi amor, estábamos buscando una película en la televisión del hotel y la encontramos y nos acordamos de ti –explicó su madre.

-Y yo comencé a cantarle a tu madre, pero intenta hacerse la difícil igual que Jazmín.

Darcy río.

-Bueno, tú no llegaste en un elefante.

-Ni tú tienes un tigre, así que no tienes derecho a hablar.

-Ya cállate, estoy hablando con mi hija

-Y yo también.

Ay, por favor.

Vamos a arreglar eso.

Gracias por leer:)