Alec se levantó para preparar el desayuno, con los nervios a flor de piel. Un año. Hoy hacía un año desde que llamo a Catrina. Hoy, se irían a Perú.
Magnus, evídentemente, no tenía ni la más remota idea de lo que sucedería a continuación.
Izzy, Jace, Clary y Simon estaban en sus puestos, preparados ya.
Aunque le costara, el mejor amigo de Clary iba recordando las cosas poco a poco, ya que la "contramaldición" que le había echo Magnus no era perfecto, ni mucho menos.
Aún así, el joven trabajaba duramente en su e ntrenamiento como nefilim, con Izzy como tutora.
Ella era la que más trataba de hacerle recordar al muchacho sus recuerdos, y habían comenzado ya a construir algo nuevo entre ambos.
Simon, para variar, hacía todo lo posible para reconstruir la relacción con Isabelle. Salía con ellos, y hasta estaba dispuesto a "soportar" a Magnus, que seguía haciendo que no se sabía su nombre, aunque nadie le creía, y a Jace, que aunque en el fondo apreciase al chaval, jamás dejaría de meterse con él.
Alec había comenzado a construir de nuevo la relacción con su padre, y nada podía mejorar en la vida del nefilim.
Poco a poco, los estragos de la Guerra Oscura habían sido superados, y aunque Max no estuviera con ellos, los Lightwood y Jace habían aprendido a vivir con ello, aunque el pequeño seguíria presente siempre, tanto en sus corazones como en sus mentes.
Acabó de prepara el café, y se lo llevo a la cama a su novio. Magnus se despertó ronroneando cual gato, lo que al nefilim le pareció adorable. Que pena que la tranquilidad no durara mucho...
Alec saludó al brujo con un suave beso en los labios, lo que él aceptó gustoso junto al café.
Hablaban de cosas triviales, hasta que el nefilim se excusó, diciendo que iría a ducharse. Magnus trató de seguirlo al baño, pero Alec lo retuvo en la cama, prometiéndole que volvería pronto.
Pero en vez de aparecer su nefilim de ojos azúles, apareció su hermana por la ventana, trepando como una ninja.
-¡MAGNUS! -Chilló la chica, alzando los brazos al cielo. -¡MAS VALE QUE ESTO SEA UNA BROMA!
El Gran Brujo De Brooklyn, medio dormido, intentó averiguar que había echo en aquella ocasión.
-Izzy, haz el favor de relajarte y cuéntame lo que pasa.
-Lo que pasa... ¿LO QUE PASA BRUJO LOCO? ¡EXPLÍCAMELO TÚ, IDIOTA! -gritó desesperada la Cazadora de Sombras, entampándo su movil en la cara del brujo.
Magnus, dolorido, cogió el aparato en sus manos, y se quedó de piedra al ver aquello.
Jace sugetando a Stephen de la camiseta, mientras que el loco "novio o lo que fuera" de la nefilim trataba de subirse a un avión.
Y el sabio hombre de ochocientos años de edad, quién había visto las cosas más extrañas, el Gran Brujo de Brooklyn... se eschó a reir.
-Menuda foto... ¡me desternillo!- la chica lo miraba entre enfurecída y divertida.
-Queridisimo Magnus, dos cosas:
1. Ya nadie usa esa expresión y
2. ¡DIME QUE ESTÁ PASANDO!
-Queridisíma hermana de mi novio, dos cosas:
1. Esa expresión es genial y
2. No tengo ni idea de lo que me hablas.
Aquí solo veo a dos adolescentes bastante inmaduros. Mejor explicane lo que pasa, ¿Bien?
-Ayyy... - la chica suspiró, poniendo los ojos en blanco. - A Simon le ha dado por decir que recuerda haber sido raptado por nosotros, y que él en realidad vive en Checoslovaquía... quiere volver a su lugar de origen.
-Bien, vale. Esto es raro. Vamos al aeropuerto, llevame. Pero primero me despediré de Alec. - dijo Magnus muy seriamente.
-Magnus, tu novio está en la ducha. ¡EL MÍO ESTÁ A PUNTO DE MUDARSE A CHECOSLOVAQUÍA! Vamos.
Y agarrándolo del brazo, lo arrastró al aeropuerto.
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Al llegar, Magnus se llevó la mayor sorpresa de su larga vida.
Todos sus amigos... ¿Amigos? Dióses, Alec lo estaba cambiándo más de lo previsto. Lo dicho, todos sus amigis, pués a su pesar en eso sa habían convertido, lo esperaban allí, con una gran sonrisa. Los muchachos y... ¡Catrina! Todos estaban allí. Solo faltaba Alec.
Y Spencer no parecía tener la menor intención de irse a Checoslovaquía.
Le pusieron una maleta en sus manos, negándose a responder a las preguntas del brujo. Lo subieron a un avión y... Allí estaba él, con una camiseta azúl que resaltaba sus hermosos ojos. Seguramente, un detalle de Isabelle.
Magnus se sentó en el asiento, tratando de preguntar algo, pero Alec lo acalló con un beso.
Al final, el nefilim le dejo hablar.
-Alexander, ¿Donde vamos?
El Cazador de Sombras sonrió.
- A Perú.
Heyyyyy!!! Bien, sé que mis notas no os importan lo más mínimo, xD
Peroooo... os quería preguntar una cosita. ¿Qué os parecería si escribiese una historía Newtmas? No sé, he tenido un par de ideas, pero estoy dudando. ¿Que opinaís? ¿Lo leerias?
Disfrutad del Capitulo :3
