Sí, nos hacíamos llamar así en referencia al enemigo de Sherlock pero es que estábamos un poco aburridos.
El primer día de nuestras vacaciones en Brighton lo habíamos pasado durmiendo. Ni bien llegamos a la habitación del lugar alquilado, corrimos hacia la cama y nos despertamos al anochecer. Podíamos ser lamentables pero no nos arrepentíamos; lo que más me gustaba del otoño era disfrutar de la cama con frazadas, y si se tiene a alguien para abrazar, mucho mejor.
Los días siguientes habían transcurrido con salidas por la ciudad, que incluía visitar la playa y el muelle de Bighton, conocer el pabellón real y pasar el rato en el Sea Life Centre. Aiden estaba tan ensimismado con olvidarse del trabajo y no pensar en cirugías que incluso había insistido en salir a algún club nocturno. Y por supuesto que no me negué. La cuestión fue cuando le pedimos recomendación a Logan y él estuvo a punto de enviarnos a un club de gays y transexuales. Personalmente creo que la hubiese pasado muy bien, pero sospecho que me habrían secuestrado a Aiden. Esa noche terminamos yendo a Patterns Brighton, y la pasamos mejor de lo que creímos.
— ¿Entonces la están pasando bien? —inquirió Logan; su voz salía del altavoz del móvil de Aiden.
— Si — respondimos Aiden y yo al mismo tiempo. La rapidez con la que contestamos lo hizo dudar, y lo oímos a través del teléfono.
— ¿Y qué hicieron hoy? —inquirió en tono juzgador.
— Desayunamos en un café sobre la playa, fuimos al shopping y luego de almorzar, volvimos a la habitación a tener mucho sexo — respondí.
— Mucho, mucho -insistió Aiden—. Demasiado. Tanto, que estoy agotadísimo —suspiró ensoñadoramente.
— Exacto. Practicamos nuevas posiciones, inventamos algunas cosas, e incluso probamos...
— Paren ya mismo, dejen de hablar de eso porque les aseguro que voy a vomitar y ¡odio vomitar! — exclamó Logan escandalizado. Yo me reí por lo bajo, mientras Aiden ponía expresión irónica.
— ¿Entonces vas a dejar de preguntarnos que hicimos a cada rato? Ni mamá me supervisa tanto —se quejó Aiden.
— ¿Qué quieren que haga? Me preocupo por ustedes, y tengo que asegurarme que están siendo seres humanos normales en vacaciones. Nada de pensar en descuartizar personas y drogarlas —insistió Logan.
En serio, este chico cada día es más exagerado.
— Para drogas están los psiquiatras, y para descuartizar, los forenses —opinó Aiden, aunque fue en vano porque a Logan poco le importó ese comentario.
— Estamos siendo normales, en serio —le dije a Logan, queriendo sonar realmente convincente-. Luego te mando fotos por whatsapp, ahora no puedo porque no tengo batería —agregué.
— Pip, esa es la mentira más horrenda que he escuchado —exclamó Logan, riéndose en tono alto y un tanto histérico.
¿Qué parte era mentira? ¿La de normal o la de la batería?
— Creo que las dos cosas —susurró Aiden, y entorné mis ojos sobre él. Supongo que reconoció la pregunta en mi expresión porque sonrió tiernamente y asintió—. Lo dijiste en voz alta.
— ¡Demonios! —me quejé.
— Tienen que aprender a mentir un poco más, si quieren les doy clases —dijo Logan y no pude evitar reírme; al fin él se estaba tomando más en broma los chistes de su hermano sobre él.
Aiden también rió despreocupado, y me alegraba ver cuanto había cambiado su relación en este ultimo tiempo. Esa competencia negativa, ya no existía. Ahora eran más cercanos y tenían más dialogo, lo que permitía que las diferencias de ambos fuesen comprendidas. No siempre estaban de acuerdo. Se podría decir que nunca, pero por lo menos se entendían y se aceptaban.
ESTÁS LEYENDO
Sin Anestesia (SA #1) [Finalizada]
ChickLitSinopsis Piper es realista, desubicada, y mordaz; Aiden es centrado, arrogante e inteligente; Logan es liberal, autodidacta y sincero; Loreley es práctica, romántica y gruñona; Ellos simplemente viven en un mundo complicado... sin anestesia. Todos l...