Tras un rato observándonos, Jack y Karen nos hicieron un gesto para que les siguiéramos, nosotros hicimos caso y comenzamos a caminar detrás suyo. Tras unos minutos andando llegamos a una gran sala en la que se podían distinguir distintas partes, por ejemplo: Había una parte en la que se podía practicar perfectamente esgrima, otra en la que se podía practicar agilidad y velocidad, también había una parte para fortalecer el cuerpo. Era una sala gigante, ¿Cómo podía ser que un colegio tuviera eso?, era casi imposible de creer sin embargo; allí estaba, delante de nuestros propios ojos.
Cristian y yo intercambiamos una mirada, ninguno de los dos sabía que iba a ocurrir, tampoco sabíamos porque estábamos allí ni si algún día conseguiríamos entender todo lo que nos acababa de pasar, en cuestión de días habíamos cambiado totalmente de vida, habíamos pasado de ser una estudiantes corrientes a combatir contra un enemigo que no conocíamos contra el qué seguramente moriríamos pero; seguíamos todos juntos, en ese momento el seguir unidos era lo más importante para nosotros aunque; pronto descubriríamos con mucha pena que algunos de nuestros compañeros no pensaban lo mismo sin embargo; me estoy adelantando a los hechos así que seguiré con nuestro primer día en la escuela, un día que lo cambio todo en nuestras vidas.
-Hola, me llamo Karen y él es Jack, como ya sabéis seremos vuestros entrenadores personales, yo me encargaré de ti Sara y Jack trabajará con Cristian. Dijo Karen tranquila.
-Entrenaréis seis horas al día y de esas, dos serán conjuntas, el resto serán independientes para cada uno. Continuó diciendo Jack.
-A parte de esas seis horas, estudiareis de dos a tres horas conjuntamente y cada cierto tiempo, Marta vendrá a examinaros por escrito conjuntamente. Terminó de decir Karen.
Cristian y yo volvimos intercambiar otra mirada de asombro e intriga, ¿cómo que exámenes conjuntos?, pensábamos nosotros, en nuestro antiguo instituto todo era individual, estaba casi prohibido el trabajar conjuntamente sin orden del profesor e incluso a veces del director, ¿tanta diferencia había entre nuestra escuela y esta?, cada vez estaba más segura de que ambas escuelas pertenecían a universos muy distintos, los profesores, los medios, las aulas y todo era diferente, supongo que con el tiempo me acostumbraría, con el tiempo, claro.
ESTÁS LEYENDO
Los espadachines místicos.
Genç KurguEsta es la increíble historia de Sara y sus amigos. De como no solo lucharán contra fuertes oponentes si no que también, combatirán contra sus propios sentimientos y contra un futuro ya predestinado para ellos, aún si eso significa la muerte o el ab...