Collingwood

Capítulo 10 parte II

Cuando me sostuve por mí misma, noté que Ian me estaba observando. Aunque duro unos pocos segundos antes de desatarse la tercer Guerra Mundial en el lobby del hotel donde Peter, Jack y Travis, que apareció segundos después del primer golpe lanzando por Peter hacia Ian, estaban decididos a acabar con Ian. Liam obviamente intervino por su hermano. La recepcionista terminó llamando a la policía.
–¡Todo es tu culpa, Malia!–dijo Jack–No tenías que golpear al tipo.
–Ese tipo es un idiota y lo merecía–insistí
–Ese tipo puede escucharte, pequeña mentirosa–dijo Ian desde el otro lado.
–Ese tipo es un idiota ¿Cómo es que golpeaste a Malia?–dijo su hermano junto a mí con el labio un poco roto.
–He dicho mil veces que no fue mi intención ¡Solo la vi acercarse y reaccioné!–se defendió Ian.

Sí, estábamos en la estación de policía. El lío que se armó en hotel fue de gran magnitud, algunos policías tuvieron sus buenos golpes al intervenir. Debido al gran desastre. Tuvieron que separar a Ian y Peter en dos celdas una frente a la otra que eran las únicas disponibles, durante el viaje a la estación de policía no pararon de provocarse el uno al otro inclusive cuando nos ficharon no paraban de pelear, entonces decidieron separarnos en tres celdas. En la que yo estaba me encontraba con Jack, Travis y Liam los cuales se habían hecho grandes amigos al descubrir que eran aficionados del Chelsea.
–Podrían solamente callarse–dijo uno de los policías–¡Por Dios! Si hubiese sabido que eran más molestos aquí que en el lobby del hotel mejor los hubiésemos dejado ahí matándose. A ver niño–dijo el policía refiriéndose a mí.– ¿Cuántos años tienes? ¿Quince? No debes meterte en problemas con tan poca edad.
–¡Hasta el policía cree su engaño!–dijo Ian con una risa irónica.
–¡Cállate! Tú eres el idiota que no noto que es una chica–dijo Jack con un ojo morado.
–¿Un chica?–dijo el policía sorprendido.

Al ver mi estilo de vestir los policías pensaron que yo también era un hombre así que me enviaron a la sección masculina.
–¡Ella es una buena mentirosa!–gritó Ian por décima vez–Con un buen trasero–dijo provocando a Peter.
–¡Tú pedazo de idiota!–gritó Peter con su ceja sangrante y con dos moretones en sus pómulos. 

Así más o menos se mantuvo toda la noche y madrugada que estuvimos en la cárcel. Amenazas, insultos, lamentaciones, esa última fue Jack al arrepentirse de bajar a buscarme y verse metido en todo este lío. Pocas horas antes del amanecer trajeron a alguien, sin embargo lo estaban fichando. Un rato después entro.
–¡Vaya! ¡vaya!–dijo el tipo irónico–Ian ¿en qué te metió Liam esta vez?

Alcé la mirada un poco asustada al reconocer esa voz, era la de Luke.
–¿Qué diablos haces aquí?–me dirigí a él.

Él me miró con confusión después vio a su alrededor a Jack, Peter,Travis y todos los demás. No fue difícil darse cuenta de lo que sucedía.
–Bueno querida, como bien sabes nuestra ruptura me ha dejado destrozado. Las acciones de un hombre no pueden ser previstas y por lo que veo has causado algunos problemas.
–¡Muérete Luke!–dije enojada.
–Ahí vamos otra vez–dijo el policía abriendo la celda de Ian para meter a Luke.
–¿La conoces?–miró Ian a Luke.
–Es mi ex novia, amigo. Lo que no entiendo es ¿Por qué estás aquí?
–Por ella–me señaló–¿Y tú?
–Me salté una maldita luz roja.El maldito policía me siguió por al menos media hora ¿Puedes creerlo? No es para tanto, pero no puedo negar que fue pensando en Malia.

¿Acaso todos iban a seguir culpándome? Fue un error ¡Por Dios! Se tomaban todo tan en serio. Después de un rato de mentiras sobre mí Luke finalizó su historia imaginaria de cómo yo lo había dejado cruelmente.
–¡Eso ni tú te lo crees!–dijo Jack.
–Estás del lado de Malia–señaló.
–Me engañaste con mi mejor amiga estúpido–respondí retante.
–Además ¿cómo es que conoces a este ser tan despreciable?–dijo Travis a Ian.
–Somos amigos desde pequeños–dijo Ian encogiéndose de hombros.

Estaba segura que iba a decir algo cuando entró uno de los guardias.
–¡Liam Sawyer! ¡Malia Collingwood! ¡Travis Heughan! ¡Jack Fraser! Han pagado su fianza–dijo uno de los guardias de turno.
–¡Adiós hermosa!–se burló Luke cuando me acercaba a la salida de la celda.
–¡No empiecen!–dijo el guardia mientras abría nuestra celda.–He tenido suficiente de ustedes seis. Hubiese querido que se llevaran a estos dos–señaló a Peter e Ian– Tanto lío solo por una mujer. Vamos chica ¡muevete! Ya has hecho mucho desastre por hoy.

Al salir nos encontramos con tres personas en la entrada. Una era Diana la melliza de Peter, Lucas su otro hermano que tenía mala cara y otro chico.
–¡Malia Collingwood! ¡Jack Fraser! No puedo creer el desastre que ocasionaron ayer. No saben todo lo que tuve que hacer para encontrarlos–ella bajó la vista un poco al verme–¡Oh por Dios, Malia! Tienes moretones en tu brazo.

Inmediatamente bajé la mirada a mi brazo izquierdo. Los moretones debieron aparecer debido a Travis, cuando me sujetó la quinta vez que intenté separar a Ian mientras Peter era casi molido a golpes.
–Y yo tengo al menos otros cuatro en mi estómogo–se quejó Travis.
–Nómbralo tu mismo, amigo. Yo tengo el maldito ojo morado–dijo Jack al ver su reflejo en un vidrio.
–Bueno aquí el que peor quedó fue el mayor de los Sawyer. Un ojo morado y el labio roto–recordó Jack– quizá una o dos costillas rotas.
–¡Es una maldita roca! No le habrían quebrado una uña ni con un martillo–lo defendí.
–De todas maneras. Todos ustedes están hechos un desastre ¡Malia! ¿Qué cara le voy a poner a Sophie si viene y los encuentra en este estado?
–Miéntele. Un asalto.
–¡No digas tonterías!–señaló Travis al comentario de Jack.
–Tuve suerte al encontrar a este amable chico–dijo señalando a su acompañante–él me ayudó a encontrar la comisaría a la que habían sido enviados.
–¿Por qué no sacaste a Peter?–pregunté.
–¿Cómo dices?–dijo ella.
–Sí has pagado la fianza y no has sacado a tu hermano.
–Yo no he sido. Cuando llegamos nos han dicho que la fianza ya estaba pagada y que ustedes venían.

Jack se dirigió de vuelta a preguntar qué sucedía. Mientras yo permanecí con todos los demás.
–¿Keylor?–dijo Liam que hasta ahora había permanecido buscando los objetos personales que cargaba antes de ser ingresado a la celda–¿Amable chico? Amigo vaya que ahora eres un imán de gratitud.
–¡Cállate,Sawyer!
–¿Sawyer?–dijo Lucas confundido–Porque ese apellido me suena ¡Oh por Dios! ¡Eres el novio de Karma! ¿Cierto?
–¡Es él!–dijo Diana con una sonrisa– Es inclusive más guapo en persona. Karma me enseñó una foto tuya hace algún tiempo.
–¿Ustedes son...?-dijo Liam confundido.
–Soy primo de Karma–respondió Lucas.
–Bueno técnicamente no somos su familia aunque nuestro padre estuvo casado...

Después de una larga plática explicando los parentescos por parte de Diana, Liam concluyó en que había tenido un alejamiento con la chica mencionada entonces que ahora no podía considerarse su novio.
–Supongo que debes hacer algo que impresioné a la chica. Quizá deberías citarla en un lugar, pero que ella no sepa por qué está ahí solo que alguien la lleve por ti–dije recordando la parte de la conversación donde Liam no sabía cómo recuperarla–, no lo sé solo sugiero.

Me había dado mucho lastima Liam, está tan enamorado de la chica que cuando mencionaba su nombre casi que se echa a llorar.
–Tienes razón.Sería una buena idea acompañada de algo más ¡Malia! Después de todo no ha sido tan malo conocerte. Pensaré en algo más para está gran idea es un buen inició.

<<Al menos has sido de ayuda para alguien, Malia>>me felicité a mí misma.

Muchos saludos. Espero que hayan tenido unas felices fiestas.
¿Qué opinan del repentino encuentro de Luke y Malia? ¿Coincidencia?