Conspiración (Crónicas del Nigromante 1)

Cap 1

-¿Qué vas a hacer?-me pregunta Jehan mirándome con la duda escrita en la cara. No tenía esa respuesta. El chico estaba muriendo y se supone que yo tenía que intentar atraerlo a este lado, quitarle la vida con mis susurros, engatusarlo a que vaya a voluntariamente a la muerte, pero no quería hacerlo. Él, si se resistía a mí, tendría toda una vida por delante, se casaría, tendría hijos, una linda mujer, que aunque nunca lo amaría y lo engañaría con otro, lo haría muy feliz por varios años, hasta que se separen y él muera de pena, al estar muy borracho, cruzando la calle en rojo. Un auto lo atropellaría y él moriría instantáneamente.

-No lo sé-murmuro agobiada. Ese chico me hacía sentir algo que yo no debería ser capaz de sentir. Jehan me observaba atentamente, estudiando mis expresiones. Él me conocía demasiado bien como para no darse cuenta que algo raro pasaba conmigo.

-¿Puedes ver lo que pasará si se resiste a tus llamados?- me pregunta y yo asiento con un fugaz movimiento de cabeza.- Pero no lo estás llamando. Eso cambiará completamente su futuro.

-Lo sé, pero hay algo que me impide pronunciar su nombre- digo mirando al chico herido unos metros por debajo de mí, quien respiraba con dificultad, como si cada vez estuviera más cerca de su último aliento.

-¡No! ¡Drake!- grita otro chico corriendo al cuerpo del chico herido. Entonces pasó algo que no debió haber sucedido y que me dejó completamente desconcertada. El cuerpo del herido se iluminó por completo y poco a poco su espíritu comenzó a separarse del cuerpo. El cuerpo estaba vivo aún, pero el espíritu se había liberado.

-¡No!- exclamo impulsándome hacia abajo, tomando los hombros del espíritu del chico y comenzando a sacudirlo con violencia, mientras él me miraba completamente asustado, con la mirada perdida como si aún no fuera capaz de ubicarse a sí mismo. -¿Cómo has hecho eso?

-¿Qué?- susurra él mirando mis alas aterrorizado. Él se separa de mí y retrocede con brusquedad, solo para tropezar con su propio cuerpo y caer de espalda. Él miró horrorizado su cuerpo y me miró interrogante, con el miedo escrito en la cara.

-Tu cuerpo está vivo, pero tú espíritu ha salido de él tal como si hubieras muerto- le digo tomando su brazo y obligándolo a ponerse de pie.- ¿Cómo has hecho eso? Se supone que el espíritu está atrapado en un cuerpo hasta que muere.

-Él debe regresar a su cuerpo. Cuando lo haga, él vivirá, su cuerpo se curará instantáneamente, pero la energía necesaria para que él regrese al mundo material hará un vínculo tan grande entre un ángel de la muerte y el humano que algo cambiará. Aunque no puedo saber qué- explica Jehan.

Yo miré a mi hermano desconcertada, al igual que Drake, quien no lo había visto antes. Comprendí de inmediato que lo que Jehan había dicho era cierto.

-Quieres decir que si no regreso a mi cuerpo, me muero- comenta Drake a modo de pregunta con un hilo de voz, aterrorizado.

-Drake- digo firmemente y él me mira con pánico. Sentía el poder de mi llamada y se sentía tentado a escucharla, a ceder a ella.

-No, no quiero morir- dice él cayendo de rodillas mientras se presionaba los oídos con una fuerza desesperada. En verdad él no quería morir y estaba resistiéndose con todas sus fuerzas a mí. Entonces él me mira con lágrimas brillantes, hechas puramente de energía, la cual se escapaba de él a través de ellas, y me ruega que lo ayude.

-Drake- lo llama Jehan inflexible. Yo lo miro horrorizada y le tapo la boca con fuerza, mientras mi sorprendido hermano se debate contra mí sin mucha energía.

Drake seguía estando de rodillas y se presionaba los oídos aún con más fuerza. Estaba decidido a vivir, pero no estaba seguro que fuera lo suficientemente fuerte como para resistir. Si seguíamos llamándolo, él terminaría cediendo. Quizá fuera mejor que él cediera, pero todo mi ser se revelaba contra el hecho de que él se uniera al abrazo de la muerte y dejara este mundo.