Capitulo 45: Noche de aullidos
Scarlett se acomoda aún más cerca de mí en el pequeño sofá tomando todo el espacio disponible de mi pecho con sus manos, a pesar de insistir para que nos sentáramos en el sillón donde estaríamos más cómodos terminé con mi pelirroja sentada sobre mis piernas. Últimamente pasa mucho tiempo en la casona y no me deja solo a menos que uno de los dos necesite ir al baño, lo cual es un poco incómodo. Eitan dice que durante el tiempo de separación que tuvimos debió generarse en ella un miedo inconsciente, algo así como miedo a que yo desaparezca.
Por otro lado, la situación con los vampiros se ha calmado bastante. Los informes de Sander dicen que las incursiones en su territorio se han calmado y los rastros que quedaban se comprobaron como caminos limpios, suponemos que el equipo de tres que ataco mi casa para entregar el mensaje informó del éxito de la misión, uno de los vampiros se las arreglo para escapar esa noche. Desde entonces, ha pasado un mes y algo más en los que hemos estado tranquilos.
Realmente es una calma antes de la tormenta. Una presión sobre mi mejilla me hace abrir los ojos que aparentemente mantuve cerrados durante un buen tiempo, Scarlett me mira un poco enojada aunque desconozco el motivo. La sonrisa de Yves es clara señal de conocimiento, pero antes de poder abrir los labios desvía la mirada, ignorándome. Mi pelirroja empuja su dedo en el centro de mi pecho, le sonrío para disminuir un poco su enojo pero las extrañas curvas en sus rosados labios no auguran nada bueno.
-Mira, Tatsuya.- ¿Acaba de usar mi nombre completo? Scarlett suele llamarme "Tatsu" igual que los chicos.- Entiendo que estés preocupado pero debes prestarme un mínimo de atención, soy tu novia ¿sabes?
-No lo estaba haciendo a propósito, en verdad. Estoy cómodo isa que el sueño me estaba ganando, lo siento.- acaricio su cabello extendiéndolo por toda su espalda, me gusta cuando lo deja suelto y más cuando no usa ningún gorro o boina para controlarlo. Yves se pone de pie y cruza la sala dejándonos a solas, los demás se fueron a dormir bastante temprano hoy.
-¿Estás bien? El que estés sobre exigiéndote me preocupa, te ves cada vez más cansado.- Scatlett reparte suaves besos sobre mi rostro y labios, esta chico dominante sabe qué hacer en el momento justo ¿Quería mi atención? Ahora la tiene.
-Para nada, todavía tengo suficiente energía para retribuirte el tiempo que estuvimos separados por mi culpa.... Y debo escoltarte a tu casa después.- su cuerpo se mueve con intensiones de alejarse pero paso mi brazo por su cintura y abrazo sus piernas con las mías quitándole toda movilidad.- no te dejaré escapar, tu insististe en estar junto a mi todo el día... ahora es mi turno de pedir algo.
-¿Algo? ¿Qué cosa?- a pesar de la situación, mi pelirroja tiene una expresión alegre. Supongo que caí en la trampa otra vez, oh bueno, si es con ella no me molestaría ser atrapado millones de veces.- Tal vez... ¿algo como un beso? - su sonrisa se extiende peligrosamente, mi pequeña manipuladora. Asiento mientras suelto un fingido suspiro, ríe suavemente mientras rodea mi cuello con sus brazos delgados.
-Siempre estoy bailando en la palma de tus manos, podría tomarle el gusto a esto.- libero sus piernas dejando que se dé la vuelta completamente, separo las piernas para que se arrodille sobre el sofá. Su pequeño y delgado cuerpo se apega a mí, en su nueva posición queda un poco más alta que yo y parece disfrutarlo ya que me mira desde arriba con sus ojos grises brillantes.
-Voy a lograr que seas adicto a mi.- como puede decir eso con una cara tan seria.... esta chica. Lentamente acerca su rostro al mío y besa cerca de mis labios, busco hacer contacto pero se escapa dejando besos en otros lados de mi cara. Me quedo quieto, esperando. Cierro los ojos y uso mis manos para saber dónde está su cuerpo, acaricio su espalda con lentitud. Siento sus labios sobre los míos, no parece querer mi ayuda así que la dejo a sus anchas. Juega con mi labio inferior besándolo y dejando una débil mordida en el, no hago nada en respuesta pero ella busca profundizar el beso. Solo debo dejarla, yo soy de ella y por todo lo que la hice y haré sufrir, no tengo el derecho de ser caprichoso.
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Aun si no me escuchas
WerewolfEl vínculo con tu pareja es más fuerte que cualquier problema o enfermedad, capaz de superar todas las barreras aún si esa barrera es el no poder oírse. Así es el caso de Tatsuya, que deberá superar el hecho de que su mate es humana y sorda, a esto...