50.- Graduación

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Capitulo 50: Graduación (Ultimo capitulo) 

—Los únicos problemas que puedo encontrar en él sería el bajo peso y la falta de estatura, su apariencia de un niño de nueve años no concuerda con las muestras de sangre que obtuvimos de él.—El médico me entrega un papel donde unas letras de mayor tamaño llaman mi atención, el lobezno se revuelve en mis brazos y resbala por entre mis piernas.

—Tiene.... ¿Cómo es posible?— afirmo al chico por el cuello de la camiseta para que no se escape de la consulta y miro al doctor, es realmente agradable conocer a un médico lobo, no tengo miedo de lo que salga en los análisis pero esto.

—Este chico tiene quince años, no nueve, como aparenta.— el doctor Kaven se gira en su silla y enciende la pantalla del computador.— aquí, según los resultados es un lobo de quince años que ya tuvo su primera conversión. Por lo que me contaste, puedo deducir que durante años estuvo bajo el cuidado de los vampiros y por lo que veo creo que sería acertado pensar que durante ese tiempo extrajeron grandes cantidades de su sangre. Sin darle una alimentación y cuidado adecuado, el crecimiento de su cuerpo se vio interferido por la necesidad de "regenerar" o "reponer" la sangre perdida.

—¿Cree que pueda crecer ahora? Su salud mental también me preocupa.— El lobezno intenta morder la pierna del médico que rápidamente desliza su silla lejos de su alcance.— este es el tipo de cosas que me preocupan más, actúa como un perro sin entrenamiento.

—Estoy seguro de que podrá aprender, pero llevará tiempo. No tiene ninguna especie de confusión mental o pérdida de memoria, todo se debe a la forma en la que creció.— Kaven me pide de regreso la hoja con los resultados y en su lugar me entrega una delgada carpeta, la abro y encuentro una especie de régimen de alimentación y entrenamiento.— tiene que ganar al menos unos quince kilos, y si logra aumentar su estatura será aun mejor, significaría que no es imposible llevarlo a conseguir su apariencia normal de quince años.

—Ah, tengo la sensación de que conseguir eso será muy difícil... a nivel mental.

—Al menos te reconoce como autoridad, dijiste que te decía "papá" ¿no?— asiento y dejo la carpeta sobre el mesón, paso las manos por debajo de los brazos del chico y lo jalo hasta tenerlo en las piernas otra vez, es demasiado inquieto.— es seguro que sabe hablar pero por los años de no uso simplemente no lo tiene entrenado, mientras te reconozca como su padre podrás guiarlo a mejorarse... luego ya veremos.

Supongo que lo mejor será no encariñarse demasiado con él, ni siquiera tiene un nombre por el que podamos llamarlo. El doctor Kaven nos despide en la puerta de su consulta, llevo al lobezno de la mano hasta la salida del hospital donde Tomo nos debería de estar esperando.

A un lado del estacionamiento está el peli verde con el vehículo encendido, sin decir palabra alguna nos subirnos en la parte de atrás y Tomo arranca mientras nos observa por el espejo retrovisor. Hay muchas cosas que contar.



—... Es un poco extraño, saber que no estarán más en el mismo edificio.— Scarlett forma un puchero que quisiera besar pero hay demasiada gente alrededor, Eliot y los gemelos siguen despidiéndose de sus ahora antiguos compañeros de curso.

Seguirás viéndolos.— mi pelirroja se abraza a mi cintura con fuerza, algún día... Me dejara sin oxígeno.— lo que me preocupa son sus planes a futuro, nunca he escuchado a los gemelos decir sus sueños o algo.

—Tal vez no saben que es lo que quieren.— Scarlett se separa de mí para correr a los brazos de Aki, los tres graduados se acercan con enormes sonrisas y mi hermano mayor está más que feliz por el abrazo espontáneo de mi pelirroja.

Aun si no me escuchas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora