Aun si no me escuchas

44.- La verdad de hace un año

Capitulo 44: La verdad de hace un año

-Tatsu, presta atención.- Scarlett me da un golpe en el costado y señala al frente con su delgado dedo índice. Después del entierro, recuperarme y terminar mi discusión con Car dándole un golpe en el estomago (Laura me pidió que no lo golpeara en el rostro) tuvimos que regresar al insti, es realmente algo tedioso pasar la mitad del día encerrado aquí pero fue la condición de mi pelirroja para perdonarme no contarle todo cuando nos conocimos, una sanción muy suave si lo pienso.

-Estaba pensando en algo.- los ojos grises de mi pelirroja me observan con curiosidad un momento pero parece desistir de preguntar y regresa su atención a la pizarra.

El timbre, que afortunadamente es el ultimo del día, suena deteniendo todo movimiento en el salón. El maestro suspira resignado por no tener el tiempo suficiente para acabar la clase y cierra su libro, los demás alumnos se ponen de pie guardando sus cosas y comienzan a abandonar el aula.

Perezosamente meto el cuaderno (que Scarlett me obligo a usar) en el bolso y espero a que mi pelirroja termine de acomodar sus cosas dentro de su mochila, me sonríe antes de levantarse y rodear las mesas para llegar junto a mí. En el pasillo, prácticamente vacío, diviso a Tomo "hablando" con Aki. Nada bueno puede salir de eso.

Rodeo la cintura de mi pelirroja y acelero los pasos para llegar hasta ellos, Tomo me mira de reojo para luego cruzarse de brazos. Mi hermano mayor se gira hacia nosotros y sonríe al ver a Scarlett, ella extiende su mano derecha para saludarlo con un largo apretón que de ser posible, y si no la tuviera firmemente sujeta, Aki abría convertido en abrazo.

-Es realmente tranquilizador verlos juntos, pero aún quedan problemas.- Los pasos apresurados acercándose por el pasillo me hacen girar el rostro, por la esquila aparece la manada de Car junto al otro gemelo y el resto de mi manada. Todos juntos, forman un gran grupo.- Tomohisa estuvo de acuerdo con nosotros, esperamos que tú también.

Miro a Tomo encogerse de hombros ante las palabras de Aki, más bien está resignado a contar todo. Aprieto un poco el cuerpo de Scarlett para acercarla aun mas a mí, al parecer llego el momento de contarles lo que ocurrió con Tomo y conmigo hace un año. Ya ha pasado un mes desde que recibimos el mensaje de boca de Francis, pero ninguno estaba preparado para hablar.

-Esta noche, en la casona. Dile a todos que vayan nii-san, incluso mamá y papá.- Aki me observa confundido pero acede a mi petición, se dirige hacia el gran grupo que nos espera y comienzan a caminar en dirección contraria a nosotros.- llevaré a Scarlett a su casa, nos vemos en la noche.

Tomo se despide de mi pelirroja con un beso en la frente y se aleja siguiendo el mismo camino que los demás, siento como jalan mi camiseta hacia abajo con mucha insistencia. Mi hermosa novia tiene los labios ligeramente separados como si una exclamación hubiera sido ahogada en ellos, acaricio su rostro recibiendo una sonrisa como recompensa.

-Te llevare a tu casa, pero si quieres puedes ir esta noche también... voy a necesitarte ahí...

-Voy a estar donde tú me necesites, siempre a tu lado... - el nudo que sentía en mi garganta se disuelve con las caricias que Scarlett reparte por mi rostro y pecho, se para en la puntas de sus zapatillas para alcanzar mis labios. La ayudo rodeando su cintura con mis brazos y levantándola del suelo unos centímetros, suavemente junta nuestros labios. Es un beso cálido, como si quisiera decir que puedo confiar en ella y en su compañía.

Sentados alrededor de la mesa y cerca de las paredes de la cocina los chicos se mantienen en silencio, esperando. Mis padres y hermanos se encuentran de pie tras de mí, apoyados en el mueble que separa la cocina del comedor. Con Scarlett a mi izquierda y Tomo a mi derecha me siento medianamente relajado, pero los ojos expectantes que esperan por mi relato hacen que mi lengua se seque dentro de mi boca.