Sueños secretos [COMPLETA]

11.

MALDITO IMPULSIVO

• • •

—Esto es algo que hice cuando comencé a crear algo por mí mismo sin necesidad de estar mirando algo sin moverse —me explica Matt mientras estamos sentados en las gradas, en el mismo lugar donde me citó la primera vez.

Yo estoy atenta a cada explicación que él me da porque en realidad amo esto, me gusta mucho admirar sus trabajos como dibujante, también me ha mostrado algunas pinturas que hizo y cómo fue que le llegó la inspiración. Desde hace unas semanas que me la paso hablando con él, me he atrevido a mostrarle mis fotografías y él se ha encargado de darme una opinión sobre ellas, también quedamos en que me explicaría muchas más cosas sobre dibujos y pinturas porque opina que ve potencial en mí.

—Es increíble —murmuro.

—Fueron algunos años los que me tomaron para lograr un resultado como este —dice—, pero conseguí al fin poder crear cosas expresando sentimientos como los grandes artistas.

—De seguro todo lo tuyo con respecto a sentimientos es negro y oscuro —bromeé.

Matt rodó los ojos y solo me empujó un poco para intentar molestarme, luego de eso comenzó a despeinar mi cabello.

—Eres una habladora, Ellison Wise.

—Y tú un chico malo, Matthew Evans.

Volvió a rodar los ojos y se alejó de mí para poder guardar los bocetos en su mochila, aun conservaba los que él me regaló. Eran demasiado hermosos y confiaba en que Matt llegara alto si se lo proponía, era un chico que valía demasiado y aunque tuviese problemas ya no era tan insoportable conmigo.

—¿Irás a la fiesta de esta noche en Esteban Park? —me preguntó de repente.

Sabía de esa fiesta desde hace días, pero no tenía ni la más mínima intención de ir, era en honor a la victoria del equipo de lacrosse, y no quería ir dado que a ella asistiría Nolan. No tenía ganas de lidiar con sus limitaciones y tampoco quería un conflicto cuando él ya sabía que debía mantenerse alejado de mis amigos y yo no abriría la boca sobre su extendida reputación con chicas.

—No creo —hice una mueca—. Están los del equipo de lacrosse y sé que mi primo irá y...

—Ellie si quieres ir, ve. No tienes porqué preocuparte por lo que Nolan tenga para decir, o decirme. Somos amigos.

Asentí, tratando de no hacer una mueca.

—¿Tú sí irás? —le pregunté, enarcando una ceja con diversión—. Pensé que eras el chico asocial de la escuela.

Matt volvió a hacer algo muy característico, rodó los ojos.

—Sí iré —gruñó y luego me miró con diversión—. Soy tan asocial que no me queda de otra que juntarme contigo.

Una Ellie agresiva salió de mí y le di un golpe en el brazo. Matt soltó una carcajada mientras se sobaba el área donde lo había golpeado.

—¿Entonces? ¿Irás? —Volvió a preguntar, como si esta vez mi respuesta fuese positiva, pero en realidad no deseaba ir.

—No —volví a responder.

Matt solo se encogió de hombros, derrotado. Cambiamos de tema y solo continuamos hablando sobre cosas que nos gustaban hasta la siguiente clase. Me gustaba pasar tiempo con él, era bueno, después de todo lo insoportable que fue conmigo en un principio terminó por ser mi amigo.