Nuestro pequeño mundo(NPM#1)-Terminada

Capítulo 45-Álvaro

Tiemblo de los nervios. Si algo sale mal, mi padre la odiará y Emma no me hablará. Tengo mucho que perder.

-Tranquilizate. Estás atacado.

Miro mal a la rubia. Es mi mejor amiga, pero la mato.

-No voy a estar tranquilo hasta que no pase esto.

-Todo saldrá bien...-y susurra-. Yo me encargaré de ello.

Me extraño, no entiendo por qué lo ha dicho, pero sigo mirando a la puerta.

Mi padre ya está aquí, pero Emma no aparece. Aunque mejor, si no viene, no la cagamos.

A un lado tengo a Dani, al otro, a mi padre. Todos han pedido ya, pero yo sigo asustado.

-Siento muchísimo llegar tarde.

Una voz que esperaba no escuchar hoy. Me doy media vuelta, como toda la mesa.

Está preciosa con el vestido que se probó. Por primera vez en años, tiene el pelo perfectamente peinado, con su pelo ondulado colocado en ondas.

-No importa-mi madre le sonríe-puedes sentarte ahí, al lado de Clara.

Emma asiente, está nerviosa. Pero Dani se pone pálido y grita:

-¡Espera! Mejor me pongo yo ahí, con ella. Ponte tú con Álvaro.

No sé si lo hace por alguna razón, o sólo quiere joder. Se cambian el sitio. Aparece el camarero.

-Buenos días. ¿Desea algo?

-Eh... Sí. Un vaso de agua, por favor.

-Enseguida.

A los dos minutos, con Emma mirando la carta, viene de nuevo.

-¿Ya sabe lo que pedir?

Trago saliva. Emma odia la comida elegante. La última vez, se pidió una pizza del menú de niños. Eso a mi padre no le gustará.

-Sí, quería una ensalada César de primero y luego unos lingüini, por favor.

-Por supuesto.

Se marcha con una sonrisa y me impresiono. Le aprieto la pierna con una sonrisa. Sé que está nerviosa, pero todo podría salir bien. Ella me devuelve la sonrisa sin que se note.

Mi padre la observa, extrañamente interesado. Por favor, que todo vaya bien.

Se ponen a hablar de distintos temas. Me empiezo a dar cuenta de que ocurre algo raro con Clara, Dani y María. Los dos últimos se dedican a interrumpirle casi todas las frases a la rubia.

-Voy al baño-Emma anuncia.

Se dirige al lado de la mesa de Clara para pasar y alguien grita.

-¡Espera!-es María-. Pasa por este lado, mejor.

-¿Por qué? Por ese lado se va directo y no doy toda la vuelta.

-Por una vez, Emma tiene razón. Dejala que vaya por el otro lado.

Agradezco con la mirada a Carlos por ayudar. María se rinde, resopla, pero no entiendo que le pasa hoy. ¿Quiere arruinarme el día?

Emma pasa tranquilamente. Miro a María, pero no parece darse cuenta.

-Carlos, ¿sigues siendo igual que cuando vivía yo aquí?-pregunta mi padre, pausadamente.

-Yo creo que ha empeorado, el pobre.

Alba se tapa la boca al decir eso. Ya la hemos liado.

-Oye-se mosquea Patri-. No hace falta que pregones que mi novio está loco. Yo también podría hablar del pasado de tu novio. O de lo de Emma y Álvaro.