Todo por dinero

Capítulo 23

Todos los personajes pertenecen a Suzanne Collins

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Capítulo 23

Me sentía demasiado triste el día de hoy después de todo, mañana se cumplía un año de la muerte de mi padre, aun recuerdo ese momento cuando nos dieron la noticia. Todo mi ser aun siente la tristeza que sentí, pero también recuerdo como me obligue a ser fuerte para convertirme en el apoyo de mi familia y esa fortaleza me la dio esos dientes de león que vi en su tumba. Un año había pasado y las cosas que en este momento tenía jamás pensé que las fuera a tener; ahora iba a la escuela y estudiaba cómodamente, tenia un novio el cual era adorable conmigo y amigas. Era extraño tener amigas nunca fui buena para hacer amigos y me costaba más trabajo con las chicas, ya que no tenia los mismos intereses que ellas, aparte de que me odiaban por mi amistad con Gale. Mis amigas nuevas eran Madge una chica de mi curso y Johanna una chica mayor que yo de mi clase de arquería resultaban algo parecidas a mi.

-- ¡Katniss!- me grita mi chico del pan. Para que le habrá la puerta

Corro para abrirle y me encuentro con él cargando un hermoso pastel lleno de princesas y coronas, simplemente hermoso.

-- ¿Qué tienes?- me pregunta después de dejar el pastel, quitando un mechón de mi cabello.

Aunque abrirme más a Peeta, lo cierto es que no he tenido los ánimos para contarle que mañana es el aniversario del fallecimiento de mi Padre. Tampoco le he contado que mi Madre y Prim me comentaron que es posible que vengan para acompañarme al cementerio, ya que no es del todo seguro y como no me quiero ilusionar decidí no contarle.

-- Nada- le digo.

-- Katniss, prometiste...-el reclamo es interrumpido por una voz atrás de nosotros.

-- Mm que rico ¿puedo probar?- dice Haymitch, al parecer habíamos dejado la puerta abierta.

-- No- le digo apartando el pastel al ver que su mano se acerca peligrosamente.

-- Acabo que ni quería- dice con aire resignado.

-- Lo siento, es para la hermanita de mi amigo Gale, hoy es su cumpleaños.

-- ¿El chico del Restaurante?- me pregunta.

-- Sí- le digo.

Veo el auto de Effie estacionarse frente a mi casa. Effie amablemente me lo había prestado para poder llevar el pastel a la casa de Hazell. Peeta me ayuda llevando el pastel hasta el auto donde el chofer lo recibe para meterlo. Agarro la mano de Peeta y le digo.

-- ¿De verdad no puedes venir?

-- Me gustaría, pero mi Papá me pidió ayuda para un pedido grande.

Lo observo con resignación- Gracias por el pastel- le digo con un beso en la mejilla-nos vemos en la noche.

-- Sí. Te cuidas.

En el camino no puedo dejar de pensar en que el año pasado tanto mi Papá, como mi Mamá, Prim y yo estábamos festejando el cumpleaños de Posy. Jamás imaginamos que después de ese día todo seria tristeza para nosotras tres. Prim cumplió años unas semanas después, era triste verla llorar el día que debía sentirse más feliz.

Al llegar a la casa de Hazell no puedo evitar pensar en Gale desde la última vez que lo vi en el Distrito 4. Ya había pasado 4 meses y no había vuelto a saber nada de él. El chofer amablemente me ayudo a llevar el pesado pastel hasta el departamento de Hazell donde los hermanos de Gale me recibieron felices.