☁En las nubes☁

Capitulo 3

Estoy mirando las cutículas de mis uñas, cuando entra por la puerta. Está igual que siempre, no ha cambiado nada. Viste con unos caquis y un polo verdoso. Se acerca hasta donde me encuentro y se coloca frente a mí.

- Jesse, te debo una explicación, es lo mínimo que puedo hacer- pongo los ojos en blanco, me cruzo de piernas y también cruzo mis brazos a la altura de mi pecho.

James se toca el pelo algo nervioso y desde que ha entrado no me ha mirado a los ojos. Cuando abre la boca para empezar a hablar, alguien entra por la puerta del gimnasio. Viene David y me mira, como si James no estuviese presente.

-¿Interrumpo algo? Quiero hablar de algo contigo Jesse.- comenta, rascándose la nuca.

- Interrumpes, sí.- responde James.

- No. David, espera fuera, dentro de dos minutos salgo.- Suelto y resoplo. David sonríe orgulloso, haciendo ver su único hoyuelo. Y James me mira sorprendido, no se esperaba esa reacción en mí. Cuando sale David, James vuelve a su pose inicial y empieza ha hablar.

- Vaya, si que has cambiado...

- Tienes dos minutos, no los malgastes.- escupo.

- Vale, sí, claro. A ver, Jesse yo te sigo queriendo, no me he olvidado de ti. Llevo todo el año pensando en como contactar contigo, así que he vuelto a este instituto, sólo por ti. Siento mucho lo que pasó con Zoey, ella estaba esperando a Swan (el capitán del equipo) y me besó, no sé por qué; pero le seguí el rollo. Después de eso no supe nada más de ella. Sólo que Swan me pegó una paliza al final del siguiente entrenamiento, en el aparcamiento- <<Jódete>>.- Por favor Jesse, dime algo. Dime que sientes lo mismo por mí, que no ha pasado nada y todo sigue igual que siempre.

Me he quedado aún en 'A ver, Jesse yo te sigo queriendo, no me he olvidado de ti.', no me lo puedo creer. Después de todo lo que pasó y ha pasado un año... ¿que no me ha olvidado?

- Mira James, baja ya de las nubes. Tú no me sigues queriendo, ni yo a ti.- y cuando ya me iba, James me coge del brazo, me gira para ponerme frente a él y me besa.

Lo peor, es que me dejo hacer, echaba de menos sus labios y por lo visto él también me echaba de menos a mí. Pero esto esta mal, esta fatal. Debo frenarlo cuanto antes, no se vaya a pensar algo que no es. Así que, me aparto de él bruscamente, empujándolo y salgo corriendo. Restregándome la mano contra la boca para borrar el sabor de él de mi boca. No me acordaba de David hasta que lo veo apoyado en la pared.

- David, lo siento mucho. ¿No podemos hablar mañana? Por favor.- de repente me ha entrado dolor de cabeza, es demasiado.

- Claro, no pasa nada. Pero Jesse, ¿qué te ha hecho ese capullo?- pregunta, señalando con la cabeza hacia la puerta del gimnasio. Con una mano, agarrando mi muñeca.

- Nada.- respondo mirándolo a los ojos. Sintiéndome un poco incómoda. No sabía que estaba llorando hasta que coloca su mano en mi mejilla, y con su pulgar arrastra todas mis lágrimas.

- Me tengo que ir. Mañana hablamos.- dije lentamente, poniendo mi mano, sobre la suya; quitandola poco a poco.

Huyo de allí lo más rápido que puedo. De camino me encuentro a Brenda, hablando con Vanessa, pero paso desapercibida y corro hacia mi casa. Sin saludar, me dirijo hacia mi habitación. De camino a la cama, me paro frente al espejo en el que tantas veces me he reflejado. Y veo que llevo el pelo revuelto, que tengo la nariz roja, y los ojos llenos de lágrimas y rojos. Me tiro lentamente en la cama, abrazo a mi peluche, que es un estrella azul. Lloro en silencio, hasta que me quedo dormida...