Capítulo 16

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DAVID:

Llegó el viernes. He estado toda la semana hablando con Emily, es una chica muy maja. Hemos quedado esta tarde a las seis y media en un cibercafé que hay al lado del Starbucks.

Me voy a ir preparando, que si no, no llego. Siempre suelo retrasarme a las quedadas. Siempre o me quedo dormido, se me olvida o es que no me da tiempo.

Saco mi sudadera favorita, es de Element, gris con el logotipo en verde con toques de varios colores, en medio. Unos pantalones negros y unas Airmax verdes. Siempre me ir vestido bien. Cuando no me visto como a mi me gusta, no me siento yo. ¿Me explico? Es decir, que no voy a gusto conmigo mismo.

Cuando ya estoy vestido, voy al baño y me echo mi perfume, es Boss. Si chicas, el que anuncia Theo James.

Antes de salir de casa, me planto enfrente del espejo y me veo perfecto. Cuando voy a irme, mi madre como no, me frena.

- David.- me llama, asomándose desde la cocina.

- ¿Qué quieres, mamá?- pregunto, poniendo los ojos en blanco.

- ¿A donde vas?

- Con unos amigos a dar una vuelta.- como le diga que he quedado con una chica, me va a dar la brasa durante un mes con ella. Y no sólo eso, también me recordará lo que pasó con las demás.

Salgo de mi casa, soltando un largo suspiro...

Llamo a Emily de camino hacia donde hemos quedado. Y le aviso de que ya voy para allá. Cuando llego, esta ella esperándome en la puerta. Va muy guapa, con un vestido olgado, amarillo. Con algunas margaritas estampadas a lo largo de éste.

- Estas muy guapa, Emily.

- Vaya, que raro un complido por tu parte. Es broma. Muchas gracias, tu también vas muy guapo.

- ¿Quieres ir a dar una vuelta o algo...?

- Me gustaría pasarme por el Starbucks. ¿Te importa?

- No, claro. Vamos, pero sólo si compartes un poco.

- Mmm... Yo nunca comparto mi comida... Pero quizás haga una excepción...- reímos.- O no...- susurra, como si no la hubiese escuchado.

- Oye, ¿cómo que no? Al final, te vas a enterar.

- ¿Ah, si? ¿Qué vas a hacer, pegarme?

- No, mucho peor. ¡Cosquillas!- corro hacia ella, y empiezo a hacerle cosquillas. Llora de reírse tanto. Es preciosa.

- ¡Para, David! ¡Por favor!- cuando ya he parado, contraataca.- ¿Eso es lo único que puedes hacer, machote?

- No. Puedo hacer algo muy distinto.- me acerco poco a poco a ella y le susurro en el oído.- Puedo enamorarte si quieres...- la miro y me está mirando los labios, me voy acercando poco a poco, y la beso. Ella me responde.

Cuando nos separamos, levanto mi vista y veo a una persona que conozco muy bien. Jesse. Nos ha visto como nos besábamos.

Veo que tiene los ojos llorosos y me acerco a ella.

- Emm... Jesse, yo...

- No, David. Ya sé. Lo he visto, ¿sabes? Con mis propios ojos y no soy tonta. No son alucinaciones mías.

- Lo siento, yo... no estoy saliendo con ella ni nada. Hemos quedado, y ya está. La conocí el otro día.

- Ah bien bien. Yo también he conocido a alguien... ¡Mira, ahí está!- y veo que corre hacia un chico moreno, con ojos verdes. Se dan un abrazo.

Me hierve la sangre. ¿Cómo puede estar con ese? Mierda. ¿Me estoy poniendo celoso? No puede ser, yo nunca he sido así. De hecho, era yo el que ponía celosas a mis novias.

JESSE:

Si quiere guerra, la va a tener.

Cuando voy hacia Connah, y lo abrazo, le susurro al oído.

- Connah, por favor, sigueme el royo.

- Claro.- dice, poniendo su mano, en mi cintura. Nos acercamos hasta David, que esta muy serio y colorado.

- David, este es Connah. Connah, este es David, un amigo del instituto.- noto, que al llamarlo 'amigo' centra su mirada en mi. Punto para Jesse, digo para mi misma.

- Hola.- dice David. Justo en ese momento llega la morena de ojos cristalinos.- Anda mira. Jesse, esta es Emily. Emily, esta es Jesse, una amiga del instituto.- nos presenta, imitandome. Lo miro cuando dice lo de 'amiga' y veo que sonríe, triunfante. Pero aún no ha ganado. Empate.

- ¡Encanta Jesse!- comenta Emily, mientras me da dos besos. Lamentablemente, esta chica me cae bien.

- Encantada. Pero, Connah y yo nos tenemos que ir. Vamos a tomar algo al Starbucks.

- ¡Anda! Mira tu por donde, nosotros también.- dice David, intentando mostrar alegría.

- Si... Que coincidencia, oye.- comento irónicamente.

Entramos, y nos sentamos en mesas distintas. Cojo a Connah de la mano y me lo llevo a la mesa más lejos que esté de esa parejita. Cuando estamos pidiendo, miro de reojo y noto que David me está mirando fijamente. Vale, esto me da mal royo.

- Jesse, ¿qué te apetece?- pregunta sonriente, es muy mono cuando sonríe.

- Hmm... Un capuchino estará bien.- digo mientras reviso la carta.

- Yo creo que también... ¡Ostras! ¡Mira Jesse!- me dice mostrando la carta. Y cuando veo lo que hay detrás de la carta, estallo en risas. Cosa que él también hace.

Lo que había hecho, era la típica broma de, poner entusiasmo en una cosa y cuando la enseñas, pones todos los dedos juntos. Entonces, es como que le has tomado el pelo a la otra persona. Normalmente, se dice: "Ohh, te lo has comido." O también cosas como: "¿Estaba rico?" Y cosas así.

Cuando ya nos traen los capuchinos, dejamos de reírnos y le pedimos las gracias al camarero.

Vuelvo la vista hacia David y por su cara, creo que ha visto todo el espectáculo. De repente, veo a Emily, que le acaricia la mano a él. Y necesito entrar en acción.

- Jesse...- me llama Connah, chasqueando los dedos delante de mi.- Te decía que, después, que vamos a hacer.

- Bésame Connah, rápido.

- ¿Cómo?

- Rápido, por favor.

- Vale, por mi perfecto.

Se levanta y viene hacia mí. Apoya una mano en la mesa y la otra en la silla en la que estoy sentada. Y me besa.

Cuando nos dejamos de besar... no me creo lo que acaba de pasar.

☁En las nubes☁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora