JESSE:
Me lo he pasado genial con las chicas, han hecho que me olvide de todo lo ocurrido, tanto lo bueno como lo malo. Acabo de llegar a mi casa, y tengo que llamar a Alba y a Lucía, para hablar por Skype.
Me desvisto y me pongo mi pijama de Hello Kitty, soy muy infantil, en todos los aspectos.
Me siento en la cama como un indio, y pongo el portátil en mi regazo. Veo que están conectadas, justo a la hora en la que quedamos; las nueve y media. Las llamo y al segundo tono, responden juntas a la vez.
- ¡Estas perdida!- exclama Lu.
- Ha saber lo que ha estado haciendo...- comenta Alba con cara pícara.
- Bueno, para empezar, hola. Me han pasado muchísimas cosas, os tengo que poner al día, pero después vosotras también a mi. Sobre todo tu Alba...- y noto como se sonroja, gracias a la cam que tiene su ordenador. Y ellas a mi también me ven.Mientras les pongo al día de todo. Justo cuando acabo me llama David. Descuelgo, pero sigo en la videollamada. Les pido silencio, porque son capaces de decirles todo lo que siento hacia él, pero aún así las quiero mucho.
- ¿Si?
- Em...Hola Jesse. Tengo algo muy importante que contarte. Es sobre James.
- ¿Qué ha pasado? ¿No os habréis vuelto a pelear no?
- No, no. Eso no es. Es...que... somos primos. James y yo, somos primos...- lo va soltando todo poco a poco.
- ¡¿Cómo que sois primos?! Eso no es posible. ¿Cómo...? A ver, explicamelo todo, por favor.
- Como explicartelo... No se por donde empezar...
- Pues por el principio...- le interrumpo.
- Bien. El otro día, cuando volvía de tu casa, iba pensando en eso, ya sabes; el beso. Y cuando me abren la puerta veo que está allí, al principio me llamó 'primo', pero pensaba que era sólo de broma, pero no. Entré y mi madre me lo explicó todo...
- Dios mío... Esto no es posible...
- Es adoptado. Y se mudó aquí por ti.- dice con un tono muy serio y cortante.
- ¿Por mi?- pregunto confusa.
- Si, Jesse. Por ti...- y cuelga.Me quedo mirando el teléfono, con la boca abierta. Y después de unos minutos, miro a las chicas, que están igual que yo.
DAVID:
Me rindo. Todas las esperanzas que tenía en salir con ella, han desaparecido. Cuando me enteré de que James se mudó a Seattle, por Jesse... eso me hizo pensar. ¿Y si a lo mejor me estaba entrometiendo en su historia? Así que es mejor alejarme de ella. Por mucho que me cueste y me duela, lo debo hacer. No soy bueno para ella. Soy problemático, alguien que nunca se ha enamorado. Y ella necesita justo lo contrario a lo que yo soy. Pero James tampoco es que sea un príncipe azul, de hecho, le puso los cuernos. Pero bueno, antes que yo, él.
A pesar de que son las diez de la noche, salgo a correr. Lo necesito. Me visto y cuando voy a salir mi madre me pregunta que a donde voy. Pero le contesto con un portazo.
Empiezo a correr y a correr, hasta que no puedo más. Cuando siento que mi cuerpo no puede más, comienzo a correr más rápido. Para no pensar en el cansancio. Voy tan rápido y estoy tan agotado que cierro mis ojos. Pero de repente me choco con alguien. Los abro de golpe y veo a una chica.
- Pero, ¿qué coño...?- pregunto agarrandola, ya que hemos estado apunto de caer.
La observo y veo a una chica morena, blanca de piel, los ojos muy transparentes, como cristales. Es bajita, tiene la nariz respingona, como Jesse.
- Perdona, no me he dado cuenta. Lo siento.
- Em... No pasa nada tranquila. ¿Qué haces corriendo tan tarde?
- Mis padres están discutiendo y necesitaba salir de esa casa. ¿Y tú?
- Demasiados problemas personales...
- Soy Emily, encantada.- se presenta, mientras estira su mano hacia mi. La acepto. Esta muy fría.
- David.
- Bueno, me ha gustado mucho este encuentro, espero vernos de nuevo. Algún día podríamos quedar para correr...
- Si... vale.- le respondo inquieto. Sin parar de pensar en Jesse.
- Encanta, chao.- se despide y me guiña un ojo.Espera, esa chica. ¿Me acaba de guiñar un ojo? ¿Ha intentado ligar conmigo? La verdad, que es guapa y muy mona.
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☁En las nubes☁
RomanceNunca pensé que después de enamorarme por primera vez, encontraría a otro chico igual o mejor que él y por lo que veo me equivoqué. A lo largo de mi vida he tenido muchos cambios, tantos físicos como psicológicos. Pasé de ser la niña más feliz del m...