Eres:

10 2 2
                                    

  La corriente que se llevó a este humilde camarón.
  Está bien,
llévame.
  Me he quedado fascinado por tu grandeza de correr libre sin miedo a parar,
no lo noté porque estaba dormido.
  Pero ahora sé que solo abrí los ojos para verte.
  Desperté para amarte.

Eres:Donde viven las historias. Descúbrelo ahora