You Belong with me || Ángelo Henríquez

15: "Beso"

Hoy era un nuevo día, hoy era el día que todo iba a cambiar, ya no pescaría más al Ángelo o sea yo no soy una de esas minas masoquistas que andan atrás de un tipo que no las pesca y más encima las trata mal. Así que decidí volver a enfocarme en mis estudios. Por eso me pasé toda la noche estudiando para poder repetir mi certamen de Ética Clínica y que me fuera bien. Cuando llegué a la universidad mi profesor me estaba esperando en su oficina.

-Javiera ¿y Cómo estás hoy?- me preguntó mi profesor.

-Espero que mejor que ayer- le sonreí, él asintió con la cabeza y me pasó la prueba.

-Tienes 60 minutos para contestarla- dijo, asentí y comencé a hacer la prueba, cuando estaba contestando la primera pregunta, mi profesor se paró y empezó a caminar alrededor de la oficina, caminaba como si fuera un modelo sexy, no podía parar de mirarlo, aunque lo hacía de reojo para que no notara que no estaba pescando la prueba, cuando se acercaba a mí hacía como que estaba escribiendo, es que definitivamente mi profesor estaba demasiado mino, Santiago tenía toda la razón con todo lo que decía acerca de Kristian Krausse...

-Javiera ¿tienes alguna pregunta?- me preguntó, ¡Mierda! Me había quedado mirándolo fijamente, negué con la cabeza.

-No, profe, solo estoy pensando- dije.

-Será mejor que pienses mientras avanzas en tu prueba- miró el reloj- te quedan 45 minutos- ¡Mierda! ¡Me quedé pegada durante 15 minutos! Luego de eso comencé a escribir rápidamente las respuestas, ahora mágicamente la prueba estaba super fácil, ¡El poder de estudiar!- Se acabó el tiempo.- le entregué la prueba, ay dios, por lo menos la había alcanzado a terminar... Espero que me haya ido bien...- Bien, lo revisaré ahora mismo.

-Está bien- le dije. Mi profesor comenzó a revisar la prueba, lo miré, su rostro no demostraba nada, estaba críptico ¡ay quizás me había ido mal!, frunció el ceño, sí definitivamente debía tener todo malo, ¡Ay por qué! El doctor Krausse, levantó la vista y me miró inexpresivo con esos cautivadores ojos azul cielo que tiene... Luego pasó algo inédito, se rió. ¿Qué onda? ¿Por qué se reía? Aunque debo admitir que se veía adorable cuando reía.

-¿Por qué me miras con esa cara de asustada?- me preguntó.

-Es que mira mi prueba con esa cara, y...- ay me daba miedo preguntarle- ¿Tan mal me fue?- él rió de nuevo, y me miró a los ojos, su mirada siempre tan fría, ahora era cálida, me miraba divertido como si yo fuera una comediante...

-Ay Javiera ¿En serio me preguntas eso?- fruncí el ceño- ¿Tan poca confianza tienes en ti misma?

-Pero profe, respóndame, ¿tan mal me fue?- estaba entrando en pánico, parece que de verdad me había ido mal y él no me lo quería decir.

-Javiera, te sacaste un siete- me dijo. Una sonrisa se formó automáticamente en mi rostro, quería gritar y saltar de la felicidad.

-Profe, me había asustado, pensé que me había ido horrible- le dije aliviada, él rió, era tan raro verlo reír, como que no me acostumbraba.

-¿Por qué me ves de esa manera? ¿Tan raro es que me ría?- me preguntó con una sonrisita divertida en el rostro.

-Bueno, solo un poco- le dije soltando una risita nerviosa- es que usted es siempre tan serio y tan estricto, y siempre diciendo cosas sobre la disciplina y el orden, y bueno... de repente como que me da un poco de miedo...

-¡Oye! Tampoco soy tan malo- dijo con un enojo fingido- puede que sea un poco obsesionado con el orden... pero no pretendo asustar a la gente y menos a mis alumnos- le sonreí.

-Profe creo que no lo está logrando, porque todos le tienen miedo- él me miraba incrédulo- es que usted siempre nos da esa mirada con su ceño fruncido y siempre anda tan serio, le juro que a muchos los asusta hasta la muerte- se rió.