Capítulo XI

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Humedad, aire y ese olor a.... ¡mar!

- ¡mierda!-me levante rápidamente- ¡ja de puta!

- ¿Qué pasa?- contesto ella un poco dormida- ¿ahora qué?

- ¿Dónde estamos?

- Cuernavaca

- ¿Por qué?

- En la madrugada tú me dijiste que viniéramos

- Pero...-me puse la ropa- ¡mierda!, Daniela, ¿no se te ocurrió que estaba muy tomada?

- Si sabes que eres muy terca, ¿verdad?

- No sé, pudiste golpearme, dejarme inconsciente, bofetearme o alguna cosa para que reaccionara

- Ayer me haces sentir... diferente, harás lo mismo camile, otra vez, ¿enserio?, me hiciste el amor, ¡carajo!- grito mientras se limpiaba las lágrimas- eres una hija de...-la interrumpí-

- ¡estaba tomada!- grite- ¡estaba muy tomada

- ¡Esa no es una excusa!

- Perdón - dije mientras Salí de la habitación- lo siento

- ¿really? ¡lo sientes!- grito, me tomo del brazo y me dio una bofetada- ¡hija de puta!- me empujo y lloro una y otra vez- hija de puta

Salí, tome aire, asimile, bueno trate de asimilar todo y volví.

- ¿Dónde está mi teléfono?-pregunte

- En mi bolsa- apunto hacia el mueble- Allison llamo

- ¿Qué?

- Allison llamo-repitió

- ¿Qué le dijiste?

- Que estabas ocupada conmigo, tu novia

- Tú no eres mi no... interrumpió

- ¿Novia?, que querías que le digiera, estábamos borrachas, tu misma lo dijiste

- ¡mierda!- golpeé la pared- ¡mierda!

Intento número 83...

- Contesta, contesta- decía en mi cabeza- vamos, coge el celular-se me quebró la voz- mierda... cógelo

- Bueno...



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