Capítulo XXVII

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Dormimos como media hora antes de que tomáramos una ducha y finalmente salimos a nuestro destino. Mi lugar favorito.

- Pero, ¿puedes solo no vendarme los ojos por todo el camino y no manejar a toda velocidad?

- Vale, manejare despacio.

- Tengo mucho sueño y está demasiado obscuro el camino.

- Deja de quejarte, solo son las 5:30 de la madrugada.

- ¡Exacto!, ¡las 5:30! ¿no podemos ir más tarde?

- No, a las 10 debemos estar de regreso, a las 11 iremos a comprar las cosas para la noche, vino, cerveza, uvas, carne y todo eso y no lo quiero dejar para después, quiero que sea hoy, quiero que hoy sea el día.

- Okay- dijo adormilada- está bien.

- ¿Cómo te sientes?

- Bien, ¿tu?

- Bien, ¿no hay algo que extrañes?

- Claro, extraño a mis padres, digo, apenas hace unos días se fueron, extraña la ciudad y así.

- Si, también extraño la ciudad, aunque me siento cómoda porque recupere mi familia.

- ¿No será difícil dejarlos?, ya sabes, recuperarlos y después irte, es un poco feo.

- No será tan difícil, eso creo.

- Yo creo que los extrañaras mucho.

Finalmente llegamos al lugar, lo mejor de todo es que mi primo se adelantó y adorno todo, un picnic nos caería muy bien. Allison se había quedado dormida después de 10 minutos de plática. Actualmente eran las 6:30, la tome en mis brazos pero ella despertó.

- Buenos días hermosa, ya llegamos- la baje y ella me beso

- Este lugar es hermoso, ¿cómo diste con este lugar?

- Bueno, cuando estaba pequeña venía con mi prima, me gustaba pescar, meterme al agua, me gustaba ver los peces, estar en la naturaleza.

- Este lugar es hermoso. Te quiero tanto Camile, estar contigo aquí es... PERFECTO.- La cargue, ella enrosco sus piernas a mi cadera y nos dirigimos a la cabaña.

Había una mesa con el desayuno preparado y una nota que decía "solo calienta en desayuno, misión cumplida"

- ¿Quién te ayudo con esto?- dio Allison mientras sonreía

- Un primo se llama Héctor, ya lo conocerás en la noche. ¿desayunamos?

- Sí, tengo hambre pero antes...- se lanzó a mis brazos- llévame a ver el rio.

- ¿Está segura que no quieres comer primero?

- Claro que estoy segura

- Vale vamos- entrelace mis dedos con ella y la lleve al puente- ¿Qué te parece?

- El agua es muy trasparente y todo se ve hermoso, una pregunta, ¿el agua esta helada o cliente?

- Mira por las mañanas está caliente y por medio día esta helada, ¿Por qué?

- No, solo tenía curiosidad.

- Vale.

- Mira ven- Allison estaba muy cerca de la orilla y quería enseñarme algo- ¿Qué?

- Mira, ¿ves eso?

- ¿Qué?- yo no alcanzaba a ver nada y en un abrir y cerrar de ojos sentí lo tibio de aquella agua en mi cuerpo- así que quieres jugar - le grite mientras se alejaba de la orilla- Bien- Salí- juguemos.

AmoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora