La Maestra De Mi Hijo (Completa)

CAPÍTULO 44 "LA FAMILIA"

Los Ángeles

-Annie- Dijo Peeta asombrado de ver a su hermana en la puerta junto a Emily, su nueva asistente. Esta estaba sonrojada y boqueaba, intentando decir algo. Annie lo miraba molesta y zapateaba de una forma graciosa, haciendo sonar sus tacones.

-Emily, puedes retirarte- Le dijo Peeta a la pobre criatura.

Emily pareció agradecida de poder irse. Era una chica bajita, con unos lentes enormes y unas faldas que daban miedo, de lo largas que eran, pero la había investigado y ella no era una delincuente con intención de robarle su empresa y deshacer su familia, o con intenciones ocultas de convertirlo en su esclavo, o eso daba a entender las investigaciones realizadas.

Annie caminó hasta su hermano y lo golpeó en el rostro con la palma de su mano lo más abierta que pudo. Peeta solo la miraba asombrado, pero Annie habló antes de que él pudiese decir cualquier cosa.

-Debería patear tu trasero hasta que se vea tan rojo como un tomate. Eres un idiota, estúpido y no sigo porque entonces sí tendría que patearte.

Peeta se levantó de la silla y abrazó a su hermana tan fuerte que la dejó sin aire. Tenía tanto tiempo de no verla que lo único que quería en ese momento era eso, abrazarla. Annie también lo abrazó y sollozó diciéndole:

-Te extrañe tanto hermanito.

Peeta suspiró y la soltó. Los ojos de Annie brillaban por las lágrimas acumuladas. Aun así estaba hermosa, como siempre, solo que su cabello estaba más largo.

-Deja de mirarme como si fuese un fantasma- Susurró Annie, golpeándole la cabeza. Peeta se rio y le revolvió el cabello, haciéndola quejarse como cuando eran niños.

-¿Cómo están todos?- Preguntó, deseando saber de su familia. Annie lo soltó y lo miró fijamente. Hacía demasiado tiempo que no estaba con él.

-Marvel está trabajando junto con Finnick en una firma de abogados. Johana está dedicando todo su tiempo a Josh y Effie y Haymitch están planeando un viaje a Inglaterra en unas semanas.

Quieren sorprender a Anthony- Peeta asintió incómodo y se sentó de nuevo. Annie se sentó sobre su escritorio y le dijo con voz contenida:

-¿Por qué no vienes a almorzar el domingo?- Peeta negó un par de veces antes de balbucear

-No soy bienvenido. Ya no hermanita. No después de todo el daño que le he hecho a la familia.

Annie se levantó despacio y se acercó a él. Le besó la mejilla y se giró para salir. Se había dado por vencida con Peeta, quien se veía cada vez más solo y triste, pero antes de irse dijo:

-No siempre tenemos que ser nosotros en dar el primer paso Peeta. Recupera a tu familia. Vuelve hermanito.

Y con eso se fue, dejando a un Peeta muy confundido.

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Londres

Katniss abrió la terraza y se sentó con un café en sus manos. Las noches en Londres eran hermosas en esa época del año. Suspiró intentando relajarse. Había tenido un día difícil en el trabajo.

Las cosas eran diferentes desde que Anthony había aparecido de nuevo en sus vidas para quedarse. En la Academia le habían concedido un permiso para poder vivir con su mama, aunque había sido Caesar quien lo sugirió y Anthony se había mostrado feliz.

Recordaba vívidamente la conversación que tuvieron ella y Anthony el día del cumpleaños de este, después de que a ella se recuperara.

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