CAPÍTULO 54 "EL FINAL DE LA SEÑORA DESTRUCCIÓN. TERCERA PARTE"

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Anthony dejó correr los dedos sobre el piano y luego se detuvo. Suspiró antes de dejarlos correr de nuevo. Cerró los ojos y sonrió cuando se dio cuenta de que podía tocar con los ojos cerrados, como Caesar había querido enseñarle. Una persona aplaudiendo tras él lo devolvió a la realidad. Se giró rápidamente para encontrarse con Pollux mirándolo, recostado en la entrada al escenario y la única salida. Estaba sonriendo de forma cínica mientras aplaudía.

-¿Qué quieres Hiztfield?- Preguntó Anthony levantándose y cerrando el piano de golpe, pues ya no podría tocar. Pollux sonrió y dijo:

-Te crees todo un Mozart ¿No? ¿O tienes nombre de perro? Beethoven

Anthony gruñó molesto y luego sonrió diciendo:

-Te crees muy listo ¿No es así?

-Solo un poco- Admitió con arrogancia Pollux, irguiéndose en su altura y caminando hacia Anthony, quien ni siquiera se movió, solo cuadro sus hombros y se cruzó de brazos para no romperle la mandíbula a ese idiota rubio engreído. Cuando Pollux llegó a su altura Anthony no se movió.

-¿Tienes límite?- Pregunto empujándolo a Anthony. Este no descruzó sus brazos. Después de todo, partirle la cara a Pollux sería fácil, echarse encima al equipo de fútbol de la academia era lo que sonaba complicado. Además de su conducta intachable.

-¿Me crees tarjeta de crédito?- Preguntó Anthony de forma sarcástica. Pollux volvió a empujarlo y esta vez Anthony si reaccionó, tomándolo por las solapas del chaleco, pegándolo a la pared y gruñéndole:

-Puedo ser un mocoso, pero estoy seguro de que puedo hacerte pedazos la cara

-Quisiera ver eso- Le reto Pollux aún rojo de la furia, pero sonriendo. Anthony lo miró un momento antes de decir:

-No, no soy tan estúpido- Luego lo soltó.

-Eres débil - Dijo Pollux molestándolo cuando Anthony le dio la espalda, pero no por eso iba Anthony sin tener cuidado de un ataque a traición.

-Por eso Claire no te hará caso jamás- Anthony se detuvo frente al piano y no dijo nada. Podía ser que Pollux tuviese razón, pero no iba a dejar que nadie lo viera de menos. Había aprendido que ser un Mellark implicaba que debía aprender solo a defenderse. Pollux en cambio siguió hablando.

-Quería ser yo el que te lo dijera ¿Sabes? Pero voy a dejar que te des cuenta tú. Creo que eso será más divertido.

Anthony frunció el ceño y Pollux se fue. Cuando salió al pasillo de la academia vio a varias chicas saludar a Pollux. Él ni siquiera les dirigió la mirada.

-¿Has escuchado la nueva noticia?- Cuchicheó una chica que se sentaba tras él en Biología avanzada, con otra chica casualmente cuando Claire entró. Esa era la única clase que ambos compartían. Anthony fingió no oír lo que las chicas decían pero la chica chillona de atrás chilló, diciendo asombrada y dejando a Anthony, quien tenía un lápiz en la mano y copiaba la clase, furioso

- ¿Esa chica es novia de Pollux Hiztfield?

-Sí. Pollux ha puesto su foto de perfil en Facebook besándola y ha cambiado su estado de soltero a en una maravillosa relación ¿Puedes creerlo?

-Que desperdicio.

Sí, que desperdicio pensó Anthony girando su mirada hacia Claire, quien lo miraba sonriente. Anthony movió la cabeza en su dirección sin sonreírle, pero saludándola.

-¿Señor Mellark? - Llamó su atención el señor Banner. Genial, lo que le faltaba, ahora seguramente tendría que soportar una hora en detención por no poner atención en clase o quizás un reporte. Bufó molesto, se cruzó de brazos y se prometió no volver a ver jamás a Claire, porque ella ya era del idiota descerebrado rubio y él no había podido hacer nada.

La Maestra De Mi Hijo (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora