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Emilie corría por el parque y la veía desde lejos de pie mientras pensaba en ti; sentí unos brazos recorriéndome por atrás y giré mi cabeza para ver quién era y estabas ahí.

-Hola -dijiste mientras sonreías- ¿Qué tal todo?.

-¡Sophie! ¡Mi amor!.
Te abracé fuertemente y te llené de besos. -¡Te he extrañado tanto! No tienes idea de cómo. .

-Yo también te he extrañado mucho, mi amor... a ti y a la pequeña Emilie... está hermosa, Ryan.

-Es igual a ti, siempre te lo he dicho, incluso desde antes de que naciera, ¿lo recuerdas?.

-Cómo olvidarlo... -Sonreíste -¿Cómo sabías que sería una niña?.

-Intuición de padre, mi amor...-Reí por un momento, pero mi sonrisa se desvaneció después-
Hubiera querido haber intuido que morirías ese día para haberte besado y abrazado muchas veces más, decirte que te amo....
Empecé a llorar.

Levantaste mi cara para que te viera.

-No te pongas así, por favor...-Dijiste con cara de preocupación- lo mío era inevitable, Ryan, la muerte siempre nos llevará tarde o temprano, ni tu ni yo podíamos hacer nada...
Créeme que lo último que sentí y pensé fue en el gran amor que sientes por mi, siempre fue lo prinero y lo último en lo que pensé cada día de mi vida.

-Eso mismo hago yo...

Nos quedamos un tiempo abrazados y viendo a nuestra hija correr y reír, luego hice la pregunta que quería hacer y tenía miedo que respondieras.

-¿Te quedarás?.

- Nunca me he ido, cariño. Sonreíste.

-¿Me esperarás para irnos juntos?.

-Te esperaré todo lo que tú me esperaste a mi, Ryan, para volver a tenernos y no separarnos munca más de muevo...para amarte...

Limpiaste mis lágrimas mientras me acercaba a ti y te tomaba entre mis brazos firmemente y te besaba lentamente.

Te separaste de mí y con lágrimas en tu rostro supe lo que dirías, mi corazón se puso en suspenso.

-Ryan, quiero que recuerdes siempre lo mucho que los amo, que los tengo presente en mis pensamientos. ..

-¿Te marchas?.

-Solo por un momento, soy un ángel, ¿No?. Sonreíste para animarme.- Dios me llama.

-¿Volverás? ¿Volverás pronto?.

-Volveré amor, volveré por ti...
Nunca dejes de decirle a Emilie que su mamá la ama mucho, que siempre la cuidaré por favor...
Te acercaste y me abrazaste, me diste un beso en la boca diciendo que era para mi y otro en la mejilla para que se lo diera a nuestra pequeña y caminaste lejos de nosotros, te giraste para dedicarme una última mirada, aproveché y te dije las palabras que hubiera querido decirte antes de que te fueras.

... Y yo te esperaré el tiempo que sea necesario para adorarte, para besarte...

Fin.....




Para besarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora