La soledad me baña.

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Me arme de valor, estaba molesta con Ian, con Bill, conmigo por ser tal débil, me levante y camine a casa, algunas personas se me quedaban viendo asustadas pero no me importo.

Llegue a mi apartamento y me lave la herida, no era profunda así que sola la desinfecte con alcohol y me puse una bandita, por la mañana mi ojo estaría muy morado.

Saque mi pipa y fume un poco de marihuana, ya no sentía los efectos de la coca así que salí por mi ventana, le di algunos toques y me fui a dormir, así me olvidaría del dolor.

A la mañana siguiente mi ojo estaba muy hinchado y morado, le escribí a Ramona.

"Estas en casa?"

"No, me quede en casa de April, aquí pasare el fin de semana, regreso el domingo, necesitabas algo?"

"No. estoy bien. solo era para saber si podía salir en ropa interior :b"

"Eres una idiota. Feliz fin de semana, espero tengas mucho sexo por ahí"

"Te deseo lo mismo"

Le escribí y ya no respondió.

Me metí a la tina y me quede ahí toda la mañana, se había vuelto mi solución a mi tristezas.

Salí cuando el agua se volvió muy fría y me recosté en mi cama.

Me dormí y desperté en la madrugada, fume otra vez de mi pipa y pinte, a las 6 am me fui a dormir otra vez.

Desperté a la 1 de la tarde. Mi ojo seguía morado pero ya no estaba hinchado, algo era algo.

Fui por mi botella de tequila, la lleve a mi cuarto y desayune eso, por la tarde estaba muy ebria así que vi películas y me dormí. Mi estomago exigía comida pero estaba muy triste para eso.

Desperté a las 9 pm y volví a fumar de mi pipa, a este paso solo me quedaría para un día mas, necesitaba conseguir mas pero, el que me la vendía era mi compañero de clase pero, el semestre comenzaba a mitad de enero. Tomé una ducha y note que mi periodo había vuelto. Lo que me faltaba.

Me quede ahí con música hasta que vi que el sol se metió.

Volví a tomar y puse música a todo volumen, cante a todo pulmón y baile por toda la sala, luego empezó una canción de Tokio Hotel, me le quede viendo con tristeza a mi estéreo, y llore, llore con sus canciones y lo extrañe tanto, había estado tanto tiempo sola, ya no podía dormir lo había hecho mucho últimamente, así que llore y fue lo único que hice.

Fui al baño y ahí tenia pastillas para dormir, me tome una y me fui a la cama.

Al día siguiente sentí unas manos en mis hombros, sentía que me movían pero yo no podía despertar.

-Alana! Alana! Maldición despierta!

Yo quería abrir los ojos pero me pesaban, era por las pastillas, quería despertar pero estaba tan cansada.

Sentí que me cargaron y  luego el agua en mi cara, estaba fría pero no podía hacer nada, estaba dentro de la tina, lo sabía.

"Llama a emergencias"

Escuche a alguien decir, era la voz de una mujer, tal vez Ramona, me preocupe, ella debería estarlo más por mí, quería decirle que estaba bien pero no podía despertar.

-Esta aquí, la metió a la tina pero ni así despertó, por favor ayúdenme - La escuche creo que estaba llorando.

-Tranquila, por favor salga y denos espacio.

-Tiene pulso, sus latidos son irregulares, la llevaremos al hospital.

Después no escuche nada.

Tu falta de querer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora