Tu falta de querer.

Sorpresas.

Hoy era el cumpleaños número dos de Olivia, era una niña hermosa.
Desde que estaba en mi vientre Tom no se le separaba y seguía siendo así, pasó por ella desde la mañana y fue a comprarle todo lo que ella quería. Era muy pequeña pero ya controlaba a la perfección a Tom, todo lo que ninguna de sus ex novia logró.
Olivia era una bebé muy alegre, siempre estaba riendo, a la vez muy chiple pues sus abuelos (los 4 del lado de Bill) la llenaban de regalos en Navidad y más en su cumpleaños, también los chicos de la banda y mis amigas, siempre había quien quisiera sacarla a pasear, a veces me daban celos pues yo la quería toda para mí, era la bebé más hermosa de todas.
Tenía sus ojos verde oliva, su cabello era castaño casi rubio, era muy blanca como Bill y yo y tenía unos cachetes enormes. Todos la amaban.

Ese día me dediqué a preparar todo para la fiesta de Olivia.
Le prepare un pastel, y le hicimos una comida. No había más bebés así que solo éramos adultos, Bill trajo champán para preparar mimosas.
Yo me duche y me puse un pantalón de mezclilla entubado y una camise negra con tacones, deje mi cabello suelto y planchado.
Baje y Bill estaba preparando los bocadillos, me detuve en seco y lo vi.
-¿Pasa algo? - me dijo él pero, no me pude más y ya no supe nada de mi.
Abrí los ojos y todo era muy brillante.
-Alana ¿estas bien? -me dijo Bill preocupado.
-Yo... ¿Qué pasó?
-Te desmayaste. ¿Te sientes mal?
-No, no, estoy bien. -dije y me levante-¿qué hora es?
-Son las 4:30
-Ya casi llega Olivia y aún hay cosas que hacer.
-No, tú quédate aquí, yo me encargo de todo.
Me recosté y Bill me trajo agua,
-Iremos a el doctor mañana en la mañana.-me dijo y salió al patio con botellas.
-Hemos llegado -Dijo Tom entrando.
-Mamá! -Dijo Olivia.
-Hola, hermosa ¿qué tal te fue con el tío Tom? ¿Te trato bien?
-Bien, me compro muchas cosas.
-¿De verdad?
-Si! Me compro ropa y, y, y, juguetes
-¡Olivia!
-Papá! -Dijo y corrió a los brazos de Bill.
-hay una fiesta de cumpleaños afuera pero no sé de quién es
-¡mia!
-¿Tú eres la cumpleañera más bonita de la que todas hablan?
-Si, soy yo -Dijo riendo.

La fiesta fue bien, Bill y Tom se pasaron de copas y pusieron el karaoke fue divertido. Una revista nos había pedido haber fotos de la fiesta de Olivia, aceptamos a cambio de que nos envidiaran también las fotos a nosotros.
Luego se fue haciendo tarde y a las 10 Lleve a Olivia a dormir.
-¿Qué tal te la haz pasado?
-Muy bien
-¿te ha gustado tu fiesta?
-¡Mucho!
-Esa es mi niña, te amo
-Yo te amo, mamá
-A dormir entonces.
-¿Y si me cantas una canción?
-¿prometes irte a dormir?
-¡Lo prometo!
Le cante una canción de cuna en inglés mientras acariciaba su cabeza y se quedó dormida.
Era algo mágico verla dormir, cada día me parecía más perfecta, debía ser por Bill, cada día se parecía más a él. Bese su cabeza y baje a la fiesta.
Bill y yo cantamos en el karaoke, y me pidieron que grabara una canción con él para el próximo disco. Yo sólo me reí.
A las 2 de la mañana ya no quedaba nadie. Recogimos un poco y fuimos a dormir.
Al día siguiente Bill me despertó y me dijo que me fuera a duchar, pues me había agengado cita con el doctor.
Aliste a Olivia y la dejamos de pasada en casa de Tom, hacia 1 año que vivía con su novia Hanna, estábamos seguros que en cualquier momento nos dirían que se iban a casar.
Fuimos al doctor y me sacaron sangre, midió mi presión y me dijo que estaba muy baja, comenzaríamos un tratamiento con medicamento para subirla, estuvimos hablando de mis hábitos alimenticios y trajeron mis análisis de sangre.
-Tus niveles de hierro están bien, temía que tuvieras anemia, parece que todo está en orden, no hay nada de qué preocuparse. El desmayo debió ser por tu presión baja.
-¿entonces no hay nada fuera de lo normal?
-No, todo está bien.-dijo con una sonrisa- Señora Kaulitz, ¿usted ya sabia que estaba embarazada?
-¿Qué?-le dije sorprendida.
-Si, usted tiene 2 semanas.
-Le recetaré unas vitaminas y ácido folico, permiso -Y salió del consultorio.
-Bill... -le dije y ambos nos reímos-
-Te amo, gracias por la sorpresa.
-Bill... ¿Como puede ser posible?
-Tal vez fue la vez de el viaje a Bélgica.
-Nuestra bebé de Carolina del Norte y nuestro bebé de Bélgica -reímos ambos.
-¿Estás lista para este bebé?
-Ahora sí. -nos besamos-
Fuimos a casa a recoger a Olivia y ahí estaba Simone desayunando con Tom y Hanna, Olivia estaba en la sala viendo la tele y coloreaba unos dibujos en la mesa de centro.
-Hola, -saludamos ambos-
-Mamá! -Dijo Olivia y la carga en brazos.
-Cómo estás, bebé?
-No soy una bebé -dijo cruzando los brazos.
-Lastima, porque los bebés no tiene juguetes
-¡Soy una bebé!
-Hola, bebecita
-Hola, papi -dijo y le alzó los brazos a Bill para que la cargara-
-Les tenemos una notica -Dijo Bill aún cargando a Olivia.
-¿Cuál es, hijo? -Le dijo Simone.
-Le vamos a dar a Olivia un hermanito.
-Tengo dos semanas-les dije.
Todos vinieron a abrazarme y nos felicitaron.
Mi segunda bendición venía en camino.