Je t'aime.

19

Lena despertó en una cama desconocida e iba a maldecir hasta que vio a su padre dormido junto a esta. Se aproximó y le recorrió la mejilla con los dedos, sonriendo inmensamente.
-Papi.-susurró como niña pequeña y él despertó de golpe, tomándola y volviendo a recostarla en la cama mientras la rodeaba con sus brazos con fuerza.
-Hija. Hija. Hija. Hija. ¿Estás bien? ¿Te duele algo? Escapaste.
-Fui al sur. Como dijo el tío Jacky.-musitó ella.
-Si. Muy bien, fille. Lo hiciste perfecto. Lo hiciste muy bien.
-Te extrañé. -lloró ella rodeándolo con todas sus extremidades.
-Y yo a vos, fille. Te extrañé muchísimo.
-Je t'aime.
-Je t'aime.
Luego de unas horas, todos estaban a bordo de un avión. Lena se separó de su padre unos segundos y se sentó junto a Dimitri. Él la miró unos instantes y luego le acuno el rostro para besarla. A nadie le pasó desapercibido el acto, pero a ninguno de los dos jóvenes pareció importarle.
-Nos salvaste a todos. -murmuró él.
-Vos me salvaste a mi.
-Vos encontraste la salida.
-Dimitri...
-Mi abuela quiere conocerte.
Todos enmudecieron. Ella lo miró sorprendida y él se sacó uno de sus anillos, deslizándolo por el dedo de ella. Lena volvió a besarlo.
Cuando la chica volvió a su lado, Shawn la abrazó con fuerza y miró el anillo.
-Lena...-murmuró Jackson y ella lo miró con una sonrisita.- Gracias por obedecerme.
-Dijiste que fuéramos al sur.-dijo ella.
Su tío abrió sus brazos y ella fue hacia ellos, feliz. Pasaron pocos minutos antes de que la chica se quedara dormida.
-Señor Green.-dijo Dimitri parado a su lado.- Me gustaría pedir la mano de su hija en matrimonio. -el silencio volvió a llenarlo todo.- Sé que ella solo tiene quince años y estoy dispuesto a esperar a que ella cumpla dieciocho si así usted lo pretende.
-Un matrimonio no es un juego de chicos.-advirtió Shawn, revolviéndose los rizos castaños.
-Lo sé. Estoy muy seguro de mi decisión. Quiero convertir a su hija en mi esposa.
-Parker, dijiste que esto no iba a pasar.-se quejó Shawn y el hombre rió.
-Te dije que nada iba a pasar a menos que él sacara un anillo y tu hija ya lo tiene puesto.
-Dimitri...-empezó el padre de la chica.
-Hermano, ella aceptó el anillo.-dijo Antony.
-Es muy chica.-se interpuso Michael. No quería que su hija se comprometiera, tenía tan solo quince años.
-Lena ya eligió. -dijo Landon, poniendo una mano sobre el hombro de Shawn.
-No quiero perderla.
-Señor-rió Dimitri.-,con todo respeto, pero nunca va a perder a Lena, ella lo ama. Creo que si le pregunto dónde quiere vivir, me pide que busquemos una casa junto a la suya, si no me pide vivir con usted para no perder a su padre. Estuvimos dos semanas en un campo de concentración y ella la primer hora ya lloraba por su ausencia. Créame que si hay alguien que nunca va a perder a su hija es usted, señor Green.
-¿Vas a cuidarla?-preguntó entonces, rendido a que era lo que su hija quería.
-Con mi vida si así es necesario.
Michael, de modo brusco, se puso de pie y se encerró en el baño. No podían estar entregando a su hija en matrimonio sin siquiera consultárselo. Tenía que rebelar la verdad y recuperar a Lena, cueste lo que cueste.
-Al final, la mas chiquita se llevó al futuro conde.-rió Beth.- Dimitri, felicitaciones. Te llevas a la mas inteligente de todos nosotros.
-¿Saben?-dijo el chico sentándose frente a ellos.- No puedo creer todo lo que hizo.
-Se le infecto la herida de la mano.-dijo Magda y todos la miraron.- El primer día y desde ahí está con fiebre y está débil. Así y todo, pudiendo escapar, se quedó hasta que todos salimos. Creo que se merece a nuestro querido Dimitri.
Jackson le acariciaba el pelo a ella con suavidad y Antony comenzó a llorar. Se acercó y Jackson se la tendió.
-Nuestra bebita.- murmuró y le besó la frente.- Si algo te pasaba me moría.
-No digas esas cosas, tío.-susurró ella sin abrir sus ojos. Se acomodó contra su pecho y sonrió.- Te extrañé.
-Creo que es hora de volver a casa.
-¿Ya?
-Si. Puede que tuviéramos que quedarnos en casa desde un principio.
-Volver a casa me suena a volver al colegio.-dijo ella y dejó caer su cabeza hacia atrás.- Puaj, colegio.
Shawn rió y los demás lo siguieron.
-Si. Colegio para Lena.-canturreó Landon y sus amigos se asomaron a ver la escena.
-¿Y si mejor seguimos recorriendo el mundo? Es mejor que el colegio.
-Vas a terminar el secundario.-dijo su padre y ella cayó en las piernas de Antony con el pelo rozando el suelo y la cabeza echada hacia atrás.
-Es que es tan aburrida.-dijo haciendo una mueca y soltando un quejido en modo de disgusto.-Voy a volverme un cactus sentada en un salón de clase.-entonces se enderezó de golpe.-Hay muchos chicos en la escuela. Papito lindo, vos no queres que yo esté rodeada de chicos babosos. ¿No es cierto?
-Te mando a un colegio de mujeres.-dijo él riendo. Ella volvió a dejarse caer.
-Esto es cruel.
-No te va a mandar a un colegio de mujeres.-dijo Jackson.- Te conseguí bacante en la Academia de Arte.
-¿Qué? -preguntó ella incorporándose con rapidez.
-Vas a ir ahí. -dijo Antony.
Lena irradiaba felicidad mientras reía y agradecía a su tío una y otra vez.
-Pero, ahora que lo decís, es verdad, la secundaria es aburrida. Podrías saltártela.-dijo Shawn y ella lo miró.
-Papi, no puedo saltarme la secundaria.
Todos soltaron una carcajada y ella abrazó a su padre con fuerza.
Agradecía que volvieran a estar todos juntos.