El Amor es Ciego (COMPLETADA)

Capítulo 19: Siempre Estaré Aquí

Después de tocar la puerta fue abierta en poco tiempo, allí estaba mi papá, era muy alto y con cabello castaño, todos dicen que nos parecemos demasiado y así es, nunca tuve ningún rencor con el por tener que divorciarse de mi mama, era un poco duro no verlo siempre, pero ya me  estaba acostumbrando.

—¡Chloe! Que bueno que estas aquí— Se acercó a mi y me dio un fuerte abrazo.

—Te extrañe— dije dejando un beso en su mejilla. Su vista se dirigió a Lucas, el sabía que iría con el y también el hecho de que no podía ver.

—Eres Lucas ¿Cierto?.

—Si, un gusto conocerlo— Lucas extendió su mano para estrecharla con él.

—Soy Paul, es un gusto para mi también, ¡Pasen chicos!.

Entramos y  nos sentamos en la sala, después de un largo tiempo hablando contando todo lo que había pasado en mi vida últimamente y de cómo conocí a Lucas, algunas experiencias que habíamos pasado juntos, y que mi papá contará igual sobre su vida, me sentía demasiado hambrienta.

—Tengo hambre ¿Y ustedes?— comenté.

—Yo si que tengo hambre— dijo Lucas.

—Chloe ¿Por qué no llevas a Lucas al parque en el que jugabas de niña?, mientras yo preparo algo de comer— pregunto papá.

—Me parece buena idea, ¿Quieres ir Lucas?.

—¡Claro!— respondió levantándose de su asiento.

—Ya volvemos— le dije a papá antes de salir.

Ayude a Lucas a entrar al auto, el parque no quedaba tan lejos, pero ya que tenía el carro ¿Por qué no aprovechar?.

—Tu papá es un tipo muy genial— dijo él ya en el auto.

—Me alegra que te agrade, se que es súper genial ¡Como yo!— conteste con un tono presumido.

—Claro igual que tú— dijo Lucas con sarcasmo.

—¿Estas insinuando que no soy genial?— pregunté, fingiendo estar ofendida.

—Tu eres más que genial— respondió Lucas.

Arranqué el auto y nos dirigimos al parque, en menos de 3 minutos habíamos llegado.

—¿¡Ya llegamos!?— preguntó Lucas al sentir que el auto se detuvo.

—Si— dije riendo.

—¡Ha sido el trayecto más corto del mundo!— respondió riendo. —¿No podíamos caminar?.

—Si, pero tenemos el auto, es más fácil— añadí. —Además tenemos todo el parque para caminar.

—Bueno, es cierto— dijo Lucas.

—¡Vamos! Te va a encantar este lugar— salí del auto y ayude a bajar a Lucas.

Entramos al parque que era un lugar precioso había un camino con piedras por el cual podías pasear admirando todo el paisaje rodeado con árboles muy altos en los cuales había cualquier especie de animales y en el centro del lugar había un estanque, con un montón de patos y tortugas que nadaban tranquilamente. Era un lugar muy relajante y precioso.

—Me encanta el olor de la naturaleza— dijo Lucas apenas comenzamos a caminar, con nuestros brazos entrelazados.

—A mi igual, solía venir aquí siempre, me encanta este lugar.

—Supongo que debe ser hermoso, es decir, el olor es estupendo y me encanta el sonido de las aves— dijo él. —A veces desearía volver el tiempo atrás y no haber sido tan estúpido como tener este accidente y no poder ver una mierda.