Un día había pasado desde el atentado de Jinx, algunos de los oficiales seguían internados en el hospital mientras que otros habían sido tratados y dados de alta ese mismo día, de todas formas la Sheriff había decidido que aquellos que estuvieron presentes ese día y que hubiesen recibido lesiones tendrían el día libre, así que en la comisaria se encontraba poco más de la mitad del cuartel y todos estaban rumoreando sobre lo que había pasado el día anterior.
- Esa vaga se ha tomado el día libre?- menciono Jayce un poco molesto mientras dejaba unas carpetas en el escritorio de la Sheriff.
- Si Jayce y no veo razón de tu enojo, yo había dicho que los que estuvieron presentes ese día podían o no tomarse el día libre.- le contesto la Sheriff tomando una de las carpetas que contenía el informe del atentado de ayer.
- Lo se, pero aun así yo vine y ella debería de hacer lo mismo, además de que tengo, y supongo que tu también, muchas preguntas que hacerle.
- Si, respecto a eso, yo pasaré por su apartamento para charlar con ella, tiene que darme muchas explicaciones y quedate tranquilo, te informare lo que sepa sobre el incidente de ayer.- le decía la joven mientras archivaba la carpeta en uno de los cajones en el cual ponía Jinx, que tenia ya al rededor de 21 carpetas, la criminal realmente era difícil de capturar, por no decir imposible.
- Esta bien Cait...- quedo dudando el muchacho.
- Sucede algo?
- No... Digo si, me preguntaba si te gustaría salir conmigo esta noche? Quiero decir, no como una cita ni nada, simplemente ir a cenar para distraernos un poco... Qué dices?
Termino la petición un poco nervioso jugando con sus manos, no era común en él ponerse nervioso cundo le pedía salir a una chica ya que todas le decían que si, era algo imposible que lo rechazaran, después de todo sus encantos hacían lo suyo, pero con la Sheriff era diferente, ella había sido la primera mujer en decirle que no, al principio no podía creerlo, pero el hecho de que lo hubiera rechazado hizo que el quisiera salir con ella con mas ganas, sin mencionar que ya tenia muchas, osea, era la mujer perfecta, hermoso cabello, lindos ojos... y ni hablar de su cuerpo, era simplemente arte, todo estaba perfectamente en su lugar, unos pechos a medida, ni muy grandes ni muy pequeños, delgada y un trasero que hacia que todo hombre e incluso algunas mujeres voltearan a verla y para finalizar un carácter que no todas poseían, sin duda, él tenia que salir con ella y tal vez algo mas...
- De acuerdo, me vendrá bien salir un rato.- aceptó la Sheriff regalándole una cálida sonrisa al muchacho, aunque en el fondo ella sabia que el era un mujeriego, hace tiempo que no salia con nadie y realmente quería distraerse un poco del trabajo.
- A que hora y en donde?- agrego mirándolo.
- ... Te parece en el restaurante de mi familia a las 10?
- De acuerdo, te veré ahí.- saludó la Sheriff dirigiéndose a la puerta de salida.
- No quieres que pase por ti?- preguntó sorprendido el joven
- No, no es necesario.- le contesto abriendo la puerta.
- A dónde vas?
- A hablar con Vi, todavía me debe algunas explicaciones, pero descuida, estaré en el restaurante a tiempo.
- De acuerdo, hasta esta noche Cait.- se despidió con una sonrisa glante y victoriosa.
- No vemos Jayce.- saludo finalmente saliendo de su oficina para dirigirse a la casa de Vi, la pelirosa debía hablar y no iba a escaparse.
Al salir de la comisaría Caitlyn se aproximó a la parada de taxis, en donde de inmediato le consiguieron transporte, se subió al vehículo, dio la dirección y cerro sus ojos, ya que tenia unos 20 minutos de viaje hasta la casa de Vi.
Durante el viaje y todavía con sus ojos cerrados la joven Sheriff debatía mentalmente; Tal vez debería haberle avisado que iría a su casa... Y si no esta? Toda clase de preguntas rondaban por su mente, incluso había pensado en que se pondría para salir con Jayce, de pronto la voz del taxista la sacó de sus pensamientos.
- Estamos aquí Señorita Caitlyn.
- Oh gracias, cuánto es?
- No señorita, usted viaja gratis, se lo merece por todo lo que hace por esta ciudad.- dijo amablemente el hombre.
- Se lo agradezco mucho, ya no le robare más de su tiempo.- contestó la Sheriff bajando del taxi.
- Cuidese señorita.- se despidió el hombre mientras arrancaba el auto y saludaba con la mano.
Caitlyn cruzó la calle de camino a un edificio azul de 4 pisos en donde vivía la pelirosa, entro al lugar y decidió subir por las escaleras hasta el tercer piso, estando allí se dirigió al apartamento 208 y llamó a la puerta.
Habían pasado unos segundo y no recibió respuesta así que tocó nuevamente, fue entonces cuando escucho sonidos al otro lado de la puerta.
- Ya... Ya voy!- la Sheriff pudo escuchar como aquella persona que estaba al otro lado de la puerta tropezó o tal vez cayo al piso, por lo cual no puedo evitar sonreír al imaginarse tal escena.
- Si?- pregunto la pelirosa mientras abría la puerta distraída mirando hacia atras, donde no cabía duda que había tropezado puesto que la alfombra se encontraba un poco arrollada, todavía no se habia percatado de quien era la persona que llamaba a su puerta.
- Hola, vine a charlar por lo de ayer.- contestó la Sheriff y en ese momento Vi se dio cuenta de quien se trataba.
- Eh? Esta bien, pasa pasa.- insistió mientras abría la puerta de par en par para que pasara Caitlyn quien tomo asiento en uno de los sofás de la pelirosa que en pocos segundos se encontraba sentada a su lado.
- Y bien? Que trae a la famosa Sheriff de Piltover a mi apartamento?- preguntó bromeando Vi.
- Disculpa por no haberte avisado de mi visita, pero necesito hablar contigo por lo sucedido ayer.- se disculpo Caitlyn sintiéndose inoportuna.
- Meh, no pasa nada Cupcake, no iba a ir a ningún lado de todas formas, así que adelante, qué quieres saber?- preguntó expectante la pelirosa, esperando las preguntas de su compañera.
En el fondo sabia que cosas le preguntaría pero prefería escucharlo salir de los labios de la Sheriff, sin duda iba a ser una larga tarde de interrogatorio, porque ella bien sabia que hasta que Cait saciara su curiosidad no se iría del lugar.
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Polaridades [Vi&Caitlyn]
Fiksi Penggemar¿Los polos opuestos se atraen no es así? Por un lado tenemos a Caitlyn, mas conocida como la Sheriff de Piltover, una joven agradable, organizada, inteligente y hermosa. Ella se encarga de mantener la ciudad segura y gracias a sus esfuerzos a conseg...