Epílogo

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Es mi aniversario de seis años con Ash, le compré una de esas camisetas de su equipo de fútbol preferido que tanto quería.
Me llega un mensaje al celular y es de Ash.
"Ya estoy afuera pequeña, baja"
Una sonrisa aparece automáticamente en mi rostro. Agarró mi cartera y bajo.
Veo a mi novio tan lindo como siempre en su moto sonriéndome. Se siente bien esa palabra "novio". Me mira con felicidad extrema.
-Hola pequeña- siento un escalofrío al escuchar pequeña. Este chico me tiene locamente enamorada en la palma de su mano.
-Hola- le saludo con un beso.
Nos subimos a la moto y como siempre, Ash comienza a manejar.
-¿Dónde vamos?- le digo.
-A la playa- me contesta. Wow, Ash Hunderson por fin contestándome a dónde vamos en vez de dejarme con la intriga.
Al llegar a la playa, estaciona la moto y saca del compartimiento de ésta la lona de siempre.
Tiramos la lona sobre la arena y nos acostamos a mirar el cielo. Ash no habla y eso me preocupa.
-Ash ¿Pasa algo?
-No- me contesta.
-Eso no es lo que parece.
-¿Qué es esto?- me pregunta alcanzándome una foto. Abro mis ojos como platos, casi ni me acuerdo de ese chico, es Peter, mi antiguo novio y en la foto me estoy besando con él. Ash me mira realmente serio lo que me hace reíri- ¿De qué te ríes?
-¿Quién te la dio?- digo con una sonrisa.
-Tu prima- me empiezo a reír a más no poder-¡¿Qué es lo gracioso Julia?! ¡Me... Me metiste los cuernos!- paro de reírme porque veo que se le cristalizan los ojos.
-Ash- le agarro la mano- Ese es un antiguo novio... Eso fue... Hace años- la cara de Ash cambia completamente pero aún está triste- Hey- le masajeo el hombro con una mano- Ya... Está bien.
-Sentí cómo todo mi mundo se derrumbaba y no podía hacer nada. Perderte... Eso me arruinaría perqueña- sonríe de costado. Me muerdo el labio sonriendo.
Me le tiro encima lo que hace que quede acostada arriba suyo y le beso.
-¿Perderme?- le digo- Tú eres mi Roma- cito sus palabras- así que no importa qué camino tome, siempre iré hacia tí. Porque todos los caminos llevan a Roma"

Nos miramos y nos abrazamos, el atardecer ya se es visible. Ash me abraza con fuerza, luego me suelta y se para.

-Ven aquí.

Le agarro su mano y me paro, hace unos pasos hacia la orilla, justo donde llega el agua de las olas.

-Julia... yo siempre he dicho que eres mi Roma, pero... no sé si eso es lo que tu piensas, quiero decir, no está como oficializado o algo así. Tú también dices que yo soy tu Roma pero yo tampoco nunca te dije que así lo sentía. El punto es, Julia- saca una pequeña cajita de su bolsillo, no lo puedo creer, mis lágrimas caen y sonrío- ¿Quieres ser mi Roma y que yo sea tu Roma?- abre la cajita y hay un hermoso anillo en ella, lo saca y espera mi respuesta.

-¡Claro que sí!- me tiro hacia él y le abrazo.

Lo amo, me ama ¿Qué más puedo pedir? 


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