The last summer.

Epílogo.

Y aquí acaba mi historia. No había mucho que contar al fin y al cabo. Mañana empiezan las clases de nuevo y yo solo tengo pensamientos para Jake. Ni siquiera me ha llamado aunque debo reconocer que es muy egoísta por mi parte recriminarle que no me llame cuando fui yo la que le dejó.

Y estoy aquí, sentada en mi cama, pensativa. Hice las cosas mal y ahora me arrepiento. ¿Le quiero? Sí. ¿Dejaria que formase parte de mi vida de nuevo? También. ¿Lo necesito aqui y ahora? Eso ni se pregunta.

Cuando me dieron la noticia dde que se fue a Londres, casi me da un ataque y despues de arrepentirme por todo lo que hice y dije cuando él estaba ingresado, decidí que no lloraría mas.

Durante esta semana no he llorado pero si he estado un poco baja de ánimos. Eve y Peter no se despegan de mi en ningún momento y Madison se ha mudado con nosotros. A su madre la ingresaron en un centro psiquiátrico. Resulta que no hace mucho había comenzado a actuar raro y Madison no nos había querido decir nada porque no tenía a nadie y cuando le dijimos que se mudase con nosotras casi nos come a besos. Era por eso que se resguardaba en Thomas. La pobre estaba sola en esto, pero ahora vive con nosotras y se lleva de maravilla con Susan.

Al principio, Susan no la trataba muy bien pero poco a poco Madison se ganó su confianza.

Eve y Peter siguen igual de pesados y romanticones que siempre. En ocasiones intento sonsacarles información sobre como está Jake ya que por lo visto se dejó el móvil y no puedo petarle a llamadas hasta que no se compre otro, pero siempre evaden mis preguntas con frases como "Ya lo sabrás", "No se nada de él" o simplemente cambian de tema. Se que hablan con el cuando les llama desde alguna cabina porque varias veces los he oído hablar de ello, aunque quizás no quieran decirme nada para que no me afecte.

- Buenos días. Pensé que todavía estarías durmiendo.- dice Madison entrando en la habitación.

- No. Llevo despierta un rato. Estaba dibujando.

Durante estos días he dibujado varias cosas a decir verdad. El que mas me gusta sin duda es el de una rosa y no solo por como me salió si no también porque me recuerda mucho a Jake. Le encantan las rosas, sobre todo las blancas.

- ¿Que has hecho esta vez?- pregunta caminando hacia la mesa donde los tengo todos esparcidos.

- Terminé la pluma.

- Todo acaba volando ¿verdad?

- Así es.- sonrío. El dibujo es el mítico de la pluma y los pájaros volando, es sencillo pero bonito.

- Me lo voy a tatuar. Que lo sepas.- dice y río negando con la cabeza.

- Hola gente.- grita Eve entrando por la puerta seguida de un Peter demasiado sonriente.

- ¿Estás bien? Se te van a acalambrar las mejillas como sigas sonriendo tanto.- le digo cuando cruzamos miradas.

- Si, estoy bien. Solo estoy feliz.- le resta importancia y río.

- ¿Listas para empezar nuestro último año?- habla Eve saltando sobre mi cama.

- No. Y no saltes en mi cama. Cochina.- le grito bajándola a empujones mientras ríe como una loca.

- Os veo muy felices hoy.- coincide Madison.

- Es que es el último día de verano. Hay que estar feliz.- disimula Peter.

- Ya. Claro.- murmuramos mi hermana y yo al mismo tiempo.

De un momento a otro el móvil de Peter comienza a sonar y sonríe mas ampliamente si eso es posible.

- Nosotros nos vamos.- avisa y mira a su novia, a lo que ella asiente efusivamente.- Madison ¿vienes?

- No. Creo que... Vale. Iré.- cambia de opinión al notar la mirada asesina de Peter.