C A P Í T U L O 20.

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C a p í t u l o 20.

NIALL.

Camino al mismo tiempo que ella hacia mi puerta. La vergüenza y timidez por lo pasado no me daba el valor de girarme, solo logro abrir la puerta, suplicándole a mi sistema nervioso que lo abrumador de mis mejillas se fuera al pisar mi casa. Tal vez ese milagro se me concedió, y nada más fue mi madre fingiendo no haber visto nada.
Estaba tan linda.
Con el cabello igual de largo pero mucho más brilloso, su sonrisa más elevada y sus ojos, volviendo a mirarme con el mismo brillo materno que siempre me observaron. Le sonrío y corriendo, me acerco abrazarla.
Sus brazos sujetan fuerte de mis costillas, diciéndome en el acto cuanto me extrañaba. ¿Cuántos meses habían pasado? ¿Ocho, nueve?
No lo sabía.
-Estás más guapo de lo que recordaba. -dice en mi oído.

No contesto nada, no encontraba necesario reprocharle en un momento como este. Apoyé mi mejilla en su hombro y me bañe en su aroma a leche de coco, siempre con el mismo aroma, desde que tengo memoria.
-te extrañamos mucho, mamá. -digo, aguantándome las ganas de llorar todo en frente de ella.
Sus brazos me sueltan y me toma por los hombros. Me sonríe, como siempre hace cada vez que estoy a punto que quebrarme en frente de ella. Sus ojos verdes puestos fervientemente en los míos.
-Niall, las lágrimas son para las almohadas, tu eres fuerte. Fuerte como un árbol...
-Fuerte como un árbol viejo. -terminé la frase con una débil sonrisa.
-Así es.
-Entonces solo déjame abrazarte mamá.

Rápidamente me despoje de sus brazos y enrolle los míos en su cuello, en el acto, no dejé escapar ninguna lágrima, como ella siempre me aconsejaba. Me acurruque en su perfume y calidez. Mis manos quietas. Llenándome de su amor materno que tanto necesitaba.

- ¡Bien, dejémonos de monerías! -exclamó alejándose de mí y dándome la espalda en busca de algo en las escaleras. La perdí de vista unos segundos, y cuando ya la pude volver a ver, llegaba cargada con cuatro maletas.

- ¿Y eso? -pregunté apuntando todo el equipaje.
-Es mi ropa Niall.
- ¿Y por qué traes tanta ropa?
La mujer río burlonamente. Saltó hacia mí como una niña pequeña y agarró de mis dos manos, mirándome fijamente.
-No me lo creerás, Niall.
-Si me lo contaras...
-Está bien, prepárate para la mejor noticia del mundo.
-Habla ya.
- ¡Fui transferida aquí! Ahora tú hermosa madre no tendrá que estar más lejos de su hijo ¡yujua! -celebro con los ojos achinados mientras saltaba por la casa y levantaba los brazos, divertida.
-por fin alguien que ordene la casa, así que estoy feliz.
Su celebración se detuvo en seco, y me miro.
-No seas cruel hijo..., trabajaré todo el día, pero si quieres puedo orde...
-Es broma mamá, estoy feliz.
- ¿En serio?
- ¿Quién crees que soy? Si no estuviera feliz no me podría hacer llamar tu hijo. -contesté fingiendo sentirme ofendido.
Mamá río nerviosa.
-Je, je, solo es que..., como siempre has sido tan frío conmigo y la familia... creí que...
Me acerque a ella y apoye de mí mano en su hombro. La mire diciéndole "mujer cierra ya la boca".
-Mi carácter no significa que no esté feliz por ti.
- ¡Eh! Hablando de soportarte ¿Quién era esa chica con la que estabas afuera?
- ¿QUÉ? ¿AH? JEJE ¿QUÉ CHICA? No, creo-creo que viste mal... yo, no, nadie. ¡Oh mira, tus maletas! Las subiré.
-Pero Niall...
-Yo lo haré. -dije yendo lo más rápido posible hacia las maletas.
-Oh hijo..., ¿Ella hace que te pongas así de nervioso? En realidad nunca te había visto ...-escuché que comentó para ella misma.
-Mamá no...
- ¡Bien, mañana trae a tu amiga para la cena! ¡Cocinará tu mamá! Será la mejor comida que ella preparara...
-sus padres son cocineros mamá, no creo que tú comida...
-Le prepararé algo que hasta superará a sus padres, ya lo verá.
-Me voy arriba.
-quedará tan encantada que no dejará ir a la familia Horan.
-estoy subiendo.
-y le mostraré tus imágenes de bebé y...
-¡Buenas noches!

Me despedí subiendo con las maletas. Las dejé afuera de la habitación de mis padres e ingresé directamente a la mía. No me demoré mucho en dormirme, el día había sido lleno de altos y bajos y seguramente mi cuerpo estaba cansado por ello.

Al otro día no dejé de estar nervioso. Sería la primera vez que vería a una chica a la cara después de besarnos. Sonaba raro hasta para mí. Mi madre no dejó de explicarme sus planes para la cena, algo familiar y hogareño, según lo que ella quería demostrarle. Eso ya era un problema, el segundo sería invitar a Evangeline. ¿Cómo decirle?
- ¡NIALL!-escuché un grito desde mi espalda. El sonido de su bicicleta frenando de golpe y el quejido de Liam al hacerlo. -Liam déjame aquí, ire caminando con Niall a la escuela, nos vemos allá.
-Bien, como quieras, nos vemos.

Liam pasó por mi lado sin mirarme y siguió andando en su bicicleta hasta la escuela. De pronto, sus pequeñas manos golpetearon tres veces de mi brazo. Seguramente moriría pronto por la lindura de esa chica. Me giro y la observo.
Sus mejillas están rojas y mira sus pies con vergüenza.
-Sé que no pregunté, p-pero ¿puedo ir contigo a la escuela?
Demonios, demasiado bella.
-C-claro, pero soy muy rápido al caminar.
- ¿En serio? Gracias Niall. -agradeció mientras comenzamos a caminar. -no sabes lo aliviada que estoy. Ayer no pude pegar ningún ojo pensando en cómo te hablaría hoy, aunque no lo creas, yo también me cuestiono mucho en la cabeza-y río, como si lo que ella paso fuera algo personal.

Jamás le diría que yo también viví eso.
-Oh... ahora que tengo tiempo, mis padres... bueno, yo tuve la idea -murmuro bajo-, quieren que vayas a cenar con nosotros este fin de semana al restaurante y quería preguntarte si quieres ir.

Mi corazón, donde ¿DÓNDE ESTABA MI CORAZÓN? Estaba tan palpitante que ya salía de mi pecho, y en realidad, estaba asustado. Jamás me había dolido así el pecho por hablar con una chica.
Me detengo de golpe.
- ¿Qué sucede? -pregunta, confundida por mi repentino acto.
Tomo fuerte de las correas de mi mochila y aprieto los ojos con fuerza.
-¡Iré encantando si tu vienes a cenar a mi casa esta noche! -Grité tratando de esconder mis nervios. Pero era estúpido, ¿quién gritaba esas cosas?
Solo yo y mis nervios.

Abrí un ojo para mirarla. Sus ojos estaban muy abiertos, y tapaba su boca con sus manos tal vez escondiendo sus mejillas.
Y asiento desesperada.
-Sí, sí, sí, sí, claro, ¡por supuesto!
Se giró con intenciones de correr hacia la escuela, pero se contuvo, se giró a mí y deposito un rápido beso en mi mejilla, y ahí si se fue corriendo.
Probablemente también por los nervios.





Bueno, tenía ganas de escribir como serían ellos como pareja y ¿Les parece está idea tierna? ¿Les parece un Niall ingenuo en el asunto del amor?

Espero contésten las preguntas.

Otra cosa, ahora la pregunta oficial.
Describanme como USTEDES ven a Niall, por favoor.

Paloma



"En tres pasos" (N.H)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora