CAPITULO 35
"Llévame contigo"
Las personas caminan a mí alrededor, me ven indisimuladamente por el color de ropa que llevo puesto, y se retiran con el semblante serio.
No pude dejar de llorar. Mi maquillaje se corrió en mis mejías dejando un rastro negro, y mis medias se han roto al pasar al lado de una rama.
Sentía que la vida era una mierda. De hecho, lo era.El padre me ha pedido que de un discurso, pero sé que mis sollozos no me dejarán hacerlo, y me rehusé a pasar.
Tomé asiento en la última silla de todo el lugar, justo al lado de los niños.
Me dediqué a observar la notoria hipocresía que las personas demostraban al pasar al estrado y hablar de Harry.Bebí muchos vasos de jugo de manzana, y comí la mayor parte de los postres de la mesa. Estaba devastada, me dolía la cabeza y había gastado demasiada energía en llorar.
Parada frente a la mesa de las botanas, escuché la canción de los Beatles, Blackbird. Tarareé, y me sonreí entre lágrimas al recordar a mi esposo.
—Lamento tu pérdida —trato de ignorar el sonido de su voz, pero me es imposible cuando se para frente a mí.
Está más alto, robusto y su barba de drogadicto no ha cambiado.
—No me mientas —digo. Fijé la mirada en las personas cerca de la caja, mientras él me observa a mí.
— ¿Cuál es la mentira?
—No lo lamentas...
—Lo lamento por ti, te ves devastada —me dijo.
Lo miré con desprecio. ¿Quién se ha creído Zayn Malik para venir a decirme que lamenta la pérdida del amor de mi vida?
Él me ayudó a realizar el maldito plan.
—No tengo ánimo para escuchar a idiotas parloteando, si me disculpas —tomé una copa de vino burbujeante y caminé lejos de él.
Las personas estaban retirándose.
Quedaban algunos empresarios y dos que tres familiares de Harry.
Me acerqué al ataúd, en donde reposaba su cuerpo dormido para siempre. Me puse delante, porque quería verlo.
Pasé los dedos delicadamente por el borde de la caja, mientras observo cada facción de mi esposo. Quiero tomarlo de los brazos y estrecharlo entre los míos. Quiero que se levante y me diga algo como: "Yo soy actor, todos son actores, allí hay cámaras escondidas y estás en MTV hinchapelotas"... pero eso no pasa.
No se levantará nunca más.
—Debemos enterrarlo, si me permite —dice.
—Deme unos minutos más, por favor...
—Lo siento, pero...
— ¡Me importa un coñaso que hora sea! ¡Le estoy pidiendo unos minutos más! ¡¿Es eso tan difícil de dar?! —grité, y dos segundos después estaba entre llanto una vez más.
—Señorita Lambert, tranquilícese...
—Styles —susurro.
— ¿Perdón?
— ¡Styles! ¡Señora Styles, maldita sea! —le grito.
Él se aparta asustado, mientras el resto de las personas me ven con desprecio.
Estoy molesta, no quiero que se lo lleven, no quiero.
—Será mejor que nos vayamos, ________ —dice Eleanor a mi lado.
Me toma de los brazos, cubriéndolos con una sábana y me conduce hasta el auto.
Louis arranca el coche y deja que caliente el motor unos minutos, y mientras esperamos, veo como preparan la caja para meterla al hoyo de tierra.
Y corro, salgo del auto y corro hasta donde está la caja y me lanzo sobre ella como tal lunática. Las personas intentan moverme pero no quiero que lo hagan, quiero que me lleven.
— ¡Llévame contigo Harry! ¡Te lo suplico! —grito, lloro, todo a la vez.
—Linda, vamos a casa, debes descansar.
—No, no quiero descansar. Quiero estar con Harry —y continúo llorando.
Louis y Liam me cargan y me remueven del ataúd de Harry.
Todo a mi alrededor de pronto se borra. Los veo a todos, pero mi mente está tan cansada de escuchar cosas que no desea que omite todo aquello que me parece estúpido.
Veo como los árboles simulan correr al lado del auto, mientras vamos de camino a casa, y a veces sonrío de pensar en Harry, y todos me ven con lástima, como si hubiera contraído una enfermedad incurable... como la del amor de mi vida. Y los quiero odiar por ser así, pero los quiero tanto a todos por estar allí para mí que prefiero hablarle a Harry en mis pensamientos. Quiero que me escuche, quiero que me abrace... quiero que él esté allí, conmigo.
"Superaré esto, lo sé".