Capítulo 3

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¡Booktrailer en la descripción y en este link! > https://youtu.be/AZrvRGxap7A 
¿Amas a Paul? Unete a la página "Yo adoro a Paul McCartney"

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A lo que ella respondió:

— ¡¡John Lennon!!

Y así desapareció

Cuando Susan termino de relatar su breve recuerdo, sus ojos se quedaron casi congelados mientras sus manos tocaban con suavidad su pecho, Leopold seguía escuchando con brevedad, y al ver que su cuidadora se había quedado sin palabras, opto por preguntar:

— ¿Quién es John Lennon?

—John es... un músico, famoso por ser cantante de la banda extinta... The Beatles.

— ¿Él es mi padre? — pregunto Leopold todavía sin comprender la situación de las cosas.

—Según lo que dijo esa mujer, sí. Y ni siquiera se quedaron juntos, meses después mientras te cuidaba se hizo pública la noticia que ella se iba a casar, espere con todas las ansías que fuera con otro hombre que no tuviera ningún vínculo con la banda mencionada anteriormente, o por lo menos que si fuera Lennon, pero fue mi sorpresa cuando Linda... se convirtió en la mujer de Paul McCartney.

— ¿Quién es Paul?

—Otro miembro de esa banda, supuestamente mejor amigo de John.

—Entonces ¿Dónde están?

—Tengo entendido que...— Susan miró una nota del periódico. — John en Nueva York y... Linda en Inglaterra.

—Quiero verlos. — dijo el niño con tristeza, su vida no era la mejor, y lo único que necesitaba con todas las ansías era sentir un beso de su padre.

—Es que... sería muy complicado ir a verlos, ellos están en la zona metropolitana de Nueva York, llegar nos tomaría unas buenas horas.

—Yo solo quiero abrazar a papá. — Leopold tomó el osito de peluche que siempre cargaba consigo y lo abrazo, haciendo a denotar que era lo único que añoraba en esta vida.

—Está bien. — Susan sintió lástima por esto. — Mañana mismo, vamos a ver a tu papá.

Leopold sonrió por primera vez con sinceridad, tenía 11 años, y no había tenido una infancia normal, a pesar de ser huérfano siempre tenía en mente el hecho de que no tenía papás, pero ahora gracias a lo que Susan Bevans le había dicho, se sentía con una nueva esperanza para volver a recuperar su felicidad, para siempre.

(...)

—James no puede dormir, señora McCartney. — dijo Jazmín en cuanto vio a sus dueños salir del estudio de grabación.

—En seguida vamos. — dijo Paul y sostuvo la mano de su mujer, así ambos se dirigieron a la habitación de su pequeño hijo.

Las cosas para Paul habían salido excelentemente bien estos últimos meses, desde que había regresado del día del cumpleaños de John, no se había percatado de lo fantástica que era su vida, su familia lo amaba, su esposa era lo más importante para él, su grupo era el más exitoso del momento, y saldría de gira por Europa otra vez, para así entrar al estudio nuevamente y embarcarse nuevamente por una gira, está vez en la tierra del sol naciente: Japón.

Linda logró dormir bien a su bebé mientras Paul esperaba en la puerta, después los dos salieron tomados del brazo con mucho amor, a sus 9 años de matrimonio y realmente no hubo ninguna sola noche hasta en ese instante, donde se hubieran separado o dormido en distintas camas. Cuando estaban descansado después de tanto trabajo duro, Paul siguió pensando en lo bien que lo trataba la vida, dejo de leer su libro y miró como su mujer se colocaba aquella mascara para el cutis, que según ella le ayudaba a disminuir las pecas.

El tercer hijo de John LennonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora