Capítulo 9

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Christopher y yo íbamos camino a Lakes Park, en su auto negro. Debo admitir que por dentro se veía mil veces mejor que por fuera, e ir en este automóvil era algo que aún no creía. El tapizado era de alguna piel delicada, los botones gritaban "lo último en tecnología" y el aire acondicionado se sentía como la misma brisa del mar...o mejor. Yo no sabía nada de carros, o sus marcas, pero él sí sabía bastante, y cuando digo bastante digo bastante.

"Sabes, he estado pensando en cambiar de auto" comenzó. "El problema es que no sé si cambiarlo por uno deportivo, un sedán o...incluso un SUV para que allá espacio para más personas".

"¿Me creerías si te digo que no se casi nada de autos?" Le dije con una sonrisa genuina.

"No te preocupes, es de esperarse de una mujer" me dijo riendo.

Me quede boca abierta, sin habla. Al final dije, "¿qué insinúas?" 

"Bueno eres mujer y obvio te interesan otras cosas que a los hombres no. Todas son así, así que no te preocupes yo entiendo" me dijo como si nada.

Comencé a sentir como mi temperatura subió de puro enojo. Después explote, "el que sea mujer no hace una diferencia. ¡Una, no soy como todas! ¡Dos, el que sea del género femenino no tiene nada que ver con que no sepa nada de autos! Si no sé nada es por el simple hecho de que no me interesa. Pero si me lo propongo puedo aprender, incluso más que tú. No me subestimes. Jamás".

"Wow, wow. Tranquila" me dijo un poco angustiado. "Yo solo pensé..." Lo interrumpí.

"No pienses y no asumas si no me conoces. Vengo escapando del machismo, fue una tortura vivir con alguien así, no sabes lo que se siente que todo mundo piense que no eres capaz de algo" le dije mientras miraba afuera de la ventana. 

Se quedó callado por un momento muy largo, solo se escuchaba el aire de afuera y un suspiro fuerte que di.

"Lo siento, siempre consigo incomodarte y molestarte" me dijo finalmente.

"Ya te lo dije, no me subestimes" le dije fría. "Soy tan capaz como cualquiera. Todas las mujeres lo somos, y no necesitamos a un hombre a nuestro lado para que..." Mejor me quede callada, no tenía caso explicarle si él no iba a comprender.

"Perdóname, no volverá a pasar" pasó un momento más de silencio y después comenzó a reírse.

Yo solo lo voltee a ver lentamente y lo mire con una mirada fría que decía ¿qué es tan chistoso, idiota?

"Cada vez me doy cuenta más de lo maravillosa que eres" y siguió riéndose. "Una mujer fuerte e independiente".

Voltee hacia la ventana otra vez, sólo sonreí.
Por primera vez en mi vida escuche esas exactas palabras de alguien. Antes sólo había escuchado lo típico, las mujeres son débiles y no pueden vivir sin el hombre. ¡Pero no! No es así, y hoy un chavo me lo confirmó y me dijo que era fuerte, algo en lo que muchas mujeres hemos estado trabajando.

De repente, Christopher tomó una salida y comenzamos a avanzar en un camino estrecho. Después pude ver a lo lejos algo azul, el lago.
Cuando llegamos nos bajamos del coche y nos dirigimos a la cajuela del auto. Había dos canastos grandes ahí, intente ayudarle con uno pero se negó.

"No lo tomes a la mal, no es machismo solo soy caballeroso" me dijo.

Acerté y mire hacia atrás. Observe su coche por unos segundos tratando de recordar todo lo que se de autos.

"Tu coche no está mal, no es un modelo tan viejo, si acaso unos tres años atrasado al último modelo hoy. No está en mal estado, pero no se del motor y las millas que tiene" el paro de caminar y me miró con curiosidad, yo seguí hablando. "Tú coche es un Mercedes Benz, un CLS Coupe, modelo AMG 63 S, si no me equivoco".

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