Amigas con secretos

Ella

*Narra Uxía*

Me giro para ver quién habla a mi espalda. Una chica rubia, alta y delgada me observa con superioridad.

Yo: ¿Quién eres?

**: Parece que te has olvidado de mi...

Yo: No, es que he tenido un acci...

**: Tranquila, no hace falta que me digas tu vida... podría adivinarla. A lo mejor estas con ese rubio del pelo largo que parece una chica o con el rubio de bote o...

Yo: Mi novio no esta aquí, está en las toallas.

**: Jajaja. Que me voy a creer que TU tienes novio.

**: ¿Hablabais de mi?

Mi cabeza se giro 180º. Allí estaba, apoyado en el marco de la puerta mirando, con sus ojos verdes, desafiante a la chica.

**: ¿Quién eres?

Blas: Creo que no te has enterado... Soy el novio de Uxía.

La chica puso cara entre confundida y dispuesta a no creerle.

Blas: ¿Qué pasa? ¿Quizás necesitas pruebas? Tranquila te voy a dar una con la que no podrás negarlo...

Blas comenzó a andar hacia a mí poco a poco. Me agarró de la cintura y me atrajo hacia él. Los dos nos pusimos nerviosos, pero ninguno opuso resistencia. Nuestros alientos se convirtieron en uno y, seguidamente, nuestros labios se juntaron. Quise estar toda mi vida allí, besando a Blas, pero el oxígeno hizo que nos separáramos, maldito oxígeno.

Blas: Venga chicos, vámonos.

Me llevaba de la cintura con los demás atrás, pero cuando llegamos al umbral de la puerta dijo:

Blas: Y guapa, será mejor que cierres la boca si no quieres que te entren moscas.

Y siguió conmigo, sin separarse ni un solo momento. Entonces Alba se paró en seco.

Alba: David, ¿quién era esa chica? ¿Por qué no reaccionaste para ayudar a Uxía?

David: Yo-yo... Era Jessica, si, la misma. La que le hacía bulling a Uxía, la que elegí cundo me lo pidieron.

Él bajó lentamente la cabeza.

David: Lo siento, Uxía.

Yo: Dejémoslo, David. Venga, vayamos a por ese helado.

Llegamos a un bar súperguay , en el cuál, ponían música variada. Una melodía comenzó a sonar, me sonaba pero no sabía de que. Las chicas comenzaron a mirar a Mencía mientras esta reprimía las lágrimas.

Yo: Menci, ¿qué te pasa?

Mencía: ¿No lo recuerdas?

Entonces...