11

186 32 0
                                    

La idea de navegar en barco me aterraba, pero el miedo disminuyo una vez a bordo, habíamos pasado a los militares sin problema alguno y ya nos encontrábamos zarpando hacía Buenos Aires.

Me había recostado en una ventanilla observando la gran abundancia de agua como también al barco que sufría unos leves movimientos, a causa de las olas que se formaban.

—Mamá, ¿tardamos en llegar?— había preguntado a la mayor quien se encontraba amamantando a mi pequeña hermana, ella asintió sin agregar alguna palabra.

Chasquee la lengua y seguí observando hacía afuera, esperando pacientemente poder llegar a nuestro destino.

No fueron mas de media hora, en la que pude ver tierra firme a lo lejos.

Y lo supe, habíamos llegado a nuestro nuevo destino.


Un amor de dictadura. (Uruguay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora