Cuarenta y uno

24.8K 2.5K 3K
                                        

Louis soltó un pequeño suspiro entrecortado, observando detenidamente sus caderas infladas y la pequeña barriguita que se le formaba en su abdomen, casi nula por cierto.

— Puta — Susurró — Eso es lo que soy, una puta — Precionó su mano contra su abdomen, intentando reducirlo — Le doy asco, a todos les doy asco — sollozó, recargando su espalda contra la pared, bajando lentamente, para después terminar hecho bolita en el suelo — Nadie nunca va a quererme. Por puta, por ser una perra.

Harry, por su lado, escuchaba los pequeños sollozos de su novio por detrás de la puerta, alcanzando a percibir algunas palabras de lo que estaba diciendo, lo único que quería era abrazarlo mientras le susurraba lo precioso y perfecto que era.

— Lou, abre, por favor

Cuando fue ignorado por decimocuarta vez, decidió ir por la llave y abrir la puerta de madera por si mismo, encotrandose a Louis llorando desconsoladamente sobre la cama de colchas rosas.

— Amor — Susurró

— N-no me digas así

— Lou — Intentó tomar su mano, fracasando en el intento

— Soy Louis, o perra ofrecida, como tu decidas llamarme — Susurró, mientras sorbía su nariz, abrazando sus piernas.

— Oh, mi amor

— ¡No me digas así, jodido idiota! — Chilló, acomodandose sobre la cama, para poder ver mejor las facciones del rizado.

— Soy tu novio

— Ya no quiero ser tu novio— susurró, jugando con sus pequeños deditos y sintiendo aún mas tristeza al pensar en no ser novio de ese estúpido rizado, al que amaba con todo su corazón.

— ¿Qué? ¡Lou, no! Te amo, te amo, lo que quieras menos eso, por favor

El pequeño negó con su cabecita, reprimiendo el llanto que amenzaba con salir

— No, Harry, siempre lo mismo, me haces daño, ahora has cruzado la línea

— Louis, escuchame, soy un idiota, un completo idiota que dice las cosas sin detenerse a pensar, pero te amo, te amo demasiado

— No puedes amar a una perra de culo abierto

— Tu no eres una perra — Con una mano tomó la pequeñita de Louis, entrelazandola con la suya y con la libre, acarició su suave rostro, tan perfecto.

Todo lo que jamás podría desear.

— Acabas de dejarmelo bastante claro

— Lo único que tu eres es una cosita adorable, pequeñita y-

— ¡Callate! ¡Ya no quiero estar contigo! ¡Te odio!

Louis se soltó llorando, como si no hubiera un mañana y Harry, no pudo evitar atraerlo contra su pecho y abrazarlo muy muy fuerte, diciéndole lo perfecto y preciosa que su carita de ángel es.

— Te odio — Le susurró, entre el llanto

— Yo te amo, te amo tanto

El más alto posicionó su mejilla sobre la coronilla de la cabecita de Louis, sintiendose demasiado culpable.

— Soy un idiota, siempre termino lastimandote, y tu no tienes la culpa, bebé

— No me llames así — Le dijo, sin separarse de su pecho, dejandose abrazar por el rizado — Ya no somos novios

— No, no digas eso, Louis, te amo, soy un estúpido, un completo inútil, y sin ti, soy absolutamente nada — Iba a llorar si no paraba, pero es que Louis se había convertido en una de las pocas cosas por las que Harry lloraría como un marica día y noche — Mi amor por favor, no me dejes, te lo ruego — su voz comenzó a quebrarse, y estaba siendo sincero, sincero porque era Louis, su bebé, su novio, y el era solamente un bocón que no sabía medir lo que decía

— Yo solo quería darte mi virginidad — Susurró, pero Harry alcanzó a comprender perfectamente.

— ¿V-virginidad? — Louis asintió lentamente — Tu me dijiste que ya no eras virgen

— No, yo te dije que ya había hecho eso antes, no que había tenido sexo, tu lo malinterpretaste

Harry frunció el entrecejo

— ¿Ósea que eres virgen?

Louis asintió, sintiendo sus mejillas enrojecer.

El nunca había tenido sexo, solo algunas frotadas, uno que otro beso caliente y un poco de masturbación mutua, pero nunca habían llegado a penetrarlo. El quería guardar ese espacio para una persona especial, y estaba seguro de que esa persona era Harry, su novio Harry, el amor de su vida. Pero al parecer Harry no quería ser esa persona especial a la que Louis le entregara todo, y a Louis le dolía.

— Sí, lo soy

El rizado acunó la carita de Louis entre sus manos, detallando lo preciosos que sus ojos eran, y diciéndose mentalmente lo estúpido que era por lastimarle.

— Perdón, bebé, perdoname, soy un estúpido, joder, perdoname por favor — Estaba a punto de llorar, porque si su bebé lo dejaba, no se lo perdonaría nunca a sí mismo, porque era completamente su culpa, y de nadie más — No me dejes

— No quiero dejarte, pero -

Harry lo interrumpió

— Pero soy un idiota que solo sabe lastimarte, lo sé, pero sin ti no soy nada, mi amor, por favor

— No lo hagas más difícil, Harry

— Es que te amo, todo lo que dije ahí abajo es una jodida mentira, lo único que quiero es estar dentro de ti mientras gimes mi nombre y tocarte, porque tu cuerpo es hermoso, y sexy, y tu eres una cosita tan adorable, mientras que yo soy un idiota

— Quiero dejarte, pero te amo tanto — Hipó

— No, no me dejes, por favor, bebé, te amo, por favor, soy un estúpido, perdóname, por favor

Louis vio la sinceridad en loa ojos verde esmeralda de Harry, y quiso abrazarlo, mientras le decía que lo amaba y que nunca lo dejaría, porque lo amaba.

— Lou — Tomó su mano —
Te amo, muchísimo, no me dejes, por favor

— Eres tan imbecil— Chilló, con la voz entrecortada, lanzándose a los brazos del mayor — Y te amo tanto

— ¿No vas a dejarme? — Murmuró en el oído del ojiazul, aún abrazado a su cintura

— No, inútil

— Prometo que no va a volver a suceder, bebé, te lo juro, eres lo mejor que tengo y no soportaría perderte —
Se separó un poco para detallar las facciones tan bonitas — Te amo demasiado, y eres precioso, no eres asqueroso, es solo que soy un estúpido

— Ya no importa, Estás un poco perdonado

Holaaaaa, perdón por hacerlas sufrir, para las que leían ken doll quiero decirles que pronto voy a resubirla, una chica me ha mandado capturas se la historia, pero voy a hacerle unos cambios. En fin, gracias por leer, los amoooo

Harry Why?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora