ESTEFANÍA
Desperté y rápidamente note que no estaba en mi habitación, Esteban me había traído aquí, no podía creer que había salido con el me sentía como una tonta, desde hace años lo miraba de lejos siempre me gusto y miraba lo lindo que era con su novia, fue terrible cuando ella murió paso semanas sin salir de su casa. El día del accidente no podía creer que él era el que me llevo al hospital, y le dije que prefería mil veces que me hubiera dejado tirada allí, le debía mucho dinero a esos tipos y me querían matar, prácticamente ya les pague a mitad pero aún les debo 3,000 dólares, no sé en qué maldito momento me vine a meter en esta vida de mierda que llevo.
Ángel así me había dicho él no sé si lo soñé o si fue real pero sentía que el corazón me palpitaba a mil por hora, lo que si tenía claro era que no quería lastimarlo por nada del mundo, ya había sufrido mucho como para que viniera alguien a joderle la vida, pero es que no me puedo alejar de él, esperé tanto para que el me mirara que ahora que lo ha hecho se ha vuelto una adicción para mí, una adicción mas aunque estaba segura que esta no sería dañina como las otras que habitaban en mí, al menos para mí no pero para él puede que no sea del todo bueno.
Vi la hora y ya eran las 7 am tenía que levantarme, entre al baño y tome un poco de enjuague bucal que Esteban tenía allí, acomode un poco mi cabello y salí del cuarto, no lo vi en la sala así que supuse que no había despertado aun así que me tome la libertad de ir a la cocina y preparar un desayuno para ambos.
Tome lo necesario para hacer uno pancakes y busque miel, al cabo de una hora ya tenía el desayuno listo así que fui a despertarlo, toque la puerta de la recamara pero nadie atendía así que entre para ver si aún estaba dormido.
--- mierda lo siento --- mi cara de seguro estaba roja como un tomate y me sentía avergonzada. Salí de la habitación como quien vio un fantasma.
Estaba desnudo bueno al menos solo vi su trasero, no me quejo de lo que vi este chico está buenísimo. Me reí bajito para que no escuchara pero me era inevitable reírme, como ya sabía que estaba despierto puse la mesa para los dos, y serví los pancakes. Esteban salió y al parecer él también estaba avergonzado ya que no me miraba a los ojos.
--- perdona por entrar así creí que seguías durmiendo --- él se puso a reír a fuertes carcajadas y yo solo me ponía roja de la vergüenza.
--- no te preocupes solo fue un accidente --- empezó a comer de su desayuno --- oye esta rico el desayuno gracias por el gesto ---
--- de nada es lo menos que podía hacer por dejarme dormir en tu casa --- parecía ebria ayer en la noche toda dormida pero la verdad es que estaba súper cansada.
--- ¿quieres acompañarme a un lugar hoy? --- me pregunto así de repente
--- ok pero tengo que ir a cambiarme --- el asintió y seguimos comiendo tranquilamente aunque por ratos mis ganas de reírme no disminuían ese era mi problema que cuando estaba nerviosa me reía mucho.
Después de terminar de desayunar me fui a la casa a darme una ducha y a cambiarme de ropa, no sabía a donde iríamos así que me puse un pantalón de lona pegado al cuerpo y una camisa blanca encima, me coloque mis pequeñas botas que eran un poquito más arriba de los tobillos, me maquille un poco y deje mi cabello suelto, me puse una chamarra ya que hacía un poco de frío. Después de cambiarme espere a que Esteban pasara por mí.
Pasaron unos quince minutos y un carro se estaciono fuera de mi casa y sonó el claxon tomé mi celular y salí de mi casa, él se bajó del auto y me abrió la puerta del copiloto.
--- estas muy linda --- era tierno y él se veía muy guapo también y me era un poco imposible no imaginármelo sin ropa era algo un poco excitante. Empezó a manejar al cabo de unos 30 minutos llegamos a North of Little Italy. Llegamos a un restaurante de comida italiana la cual me encantaba mucho, nuevamente Esteban me abrió la puerta del coche y me baje de él, sin hacer preguntas fui adentro del restaurante con él.
Todos lo saludaban con mucho respeto y fue en ese momento que comprendí que él era el dueño del lugar, me dijo que lo esperara un rato que no se tardaría mucho así que accedí, me quede sombrada de ver el lugar era hermoso.
Después de lo que fueron al menos quince minutos Esteban salió del lugar y me pidió que nos fuéramos, subimos al auto y nos fuimos a otro lugar él paro en el cementerio y sabía a donde se dirigía. En la entrada compro unas flores hermosas, un ramo de rosas amarillas y uno de rosas rojas, primero fuimos a la tumba de su padre y le dejamos el ramo de rosas rojas.
--- sabes, él era un gran hombre y se tuvo que ir el peor momento --- no sabía que decir aunque lo comprendía
--- mis padres también están muertos, ellos dos murieron cuando yo tenía 13 años, y te entiendo tu dolor porque es más difícil cuando han sido personas increíbles --- sentía un nudo en mi garganta pero no me permitiría llorar más.
--- la vida se encarga de quitarte todo lo bueno y no entiendo cuál es el motivo para eso --- agacho la cabeza y pude ver tristeza en él.
Caminamos un poco más por el cementerio y paramos frente a otra tumba, frente a la de Dana, allí pude notar cuanto la quería su rostro cambio totalmente al estar frente a esa tumba.
--- ella era mi novia y hace 7 meses, la vida me la arrebato también. Sabes a veces quisiera entender un poco los planes del destino pero no puedo --- se agacho y puso el ramo de rosa amarillas en la tumba, acaricio la placa y se levantó --- vámonos ---
Empezamos a caminar pero él se paró y yo di la vuelta para ver qué pasaba, él estaba viendo hacia el cielo y por curiosidad yo también vi hacia arriba para poder ver lo que el miraba. No sé si era eso lo que miraba pero el cielo estaba particularmente hermoso tenía una cosa que no puedo explicar, un pequeño viento paso por mi rostro y sentí un paz enorme, inexplicable.
--- ¿quieres saber porque te traje aquí? --- lo mire y le asentí con la cabeza --- desde que Dana murió yo no podía ver a otra chica, a nadie solo tenía ojos y mente para ella, el día que te lleve al hospital, ni siquiera me fije en ti, pero al pasar el tiempo y al verte de nuevo algo muy en el fondo se removió en mí y no sabría decirte que es porque ni yo mismo se. Y sé que vas a pensar que estoy loco pero quiero conocerte mejor no como mi amiga si no como algo más ---
No sabía que decir y no por el sino por mí, no quería lastimarlo no a él.
--- no lo sé Esteban --- el me tomo las manos y me hizo que lo mirara a los ojos --- mi plan no es lastimarte es demostrarte a ti y a mí que si se puede volver a ser feliz ---
Por supuesto que quería, lo vi a los ojos eran hermosos y me encantaba que me viera así como lo estaba haciendo, no estaba enamorada era obvio nadie se enamora de un día para otro pero si me gustaba y mucho.
--- dime algo nena --- pero las palabras no salían de mi boca, él puso su frente junto a la mía y sentía escalofríos por todo el cuerpo.
--- quiero intentarlo pero no te prometo que funcione, no soy chica de relaciones serias ni de compromisos, me gusta lo liberal no las ataduras ok --- el asintió y estaba segura que quizá él no quería nada serio tampoco solo vivir un poco de lo que se había perdido estos meses y yo se lo daría.
Fuimos a casa y Esteban me pidió que me fuera a cenar a su casa y acepte, pedimos pizza y pusimos una película que se llamaba ¨mujeres al ataque¨ más bien según el yo lo obligue a verla pero después él se reía. Era guapo y mucho y tenía una sonrisa encantadora.
No sé en qué momento Esteban estaba encima de mí haciéndome cosquillas y yo me retorcía y hasta me dolía ya el estómago.
--- ya para por favor no puedo más --- el paro de hacerme cosquillas pero no se quitó de encima de mí y en un movimiento bien hecho sus labios estaban encima de los míos, dándome uno de los mejores besos de mi vida, tenía su mano sobre mi mejilla y con la otra tomaba mi cuello. Era un beso lento pero bastante excitante.
Una persona entro por la puerta y me pego el susto de mi vida
--- Esteban ¿Qué está pasando aquí? ---
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Pensando en voz alta
RomanceHay momentos en la vida en que pasan cosas que no podemos comprender, primero aparecen cosas buenas que podemos decir que nos hacen felices pensamos que tal vez por esa razón muchas de estas tendrían que ser eternas o quizá al menos que duren hasta...