uno

1.5K 138 39
                                    

Saqué una de las bolitas de la jaula y me acerqué al micrófono.

—"G" dieciocho.

Varias viejitas tacharon el número en sus cartones de Bingo.

Se lo preguntarán, ¿Qué hago yo haciendo esto y por qué no le estoy gritando a Harry pa' que se quede quieto?

Bueno chamas, es que este es mi trabajo.

¿Y por qué, tía April? —Debo dejar de ver a Adam

Porque ya no vivo en Inglaterra, ahora estoy en Venezuela.

Volví a sacar una bolita.

—"B" cinco.

Por favor, alguien que queme esto.

Saben, si yo no fuera tan alza' quizás seguiría en Londres. Pero como me puse a jalarle las greñas a la vieja de Modest, bue, ya vieron.

Dos semanas exactamente llevo aquí.

Vi como la puerta se abría y Gabriela pasaba, al verme soltó una carcajada y en todo el cuarto se escuchó un "Shh", sonrió en forma de disculpa y se acercó a mí.

—Menos mal que es temporal, chama —Me dijo—.

Rodé los ojos y repetí la acción de antes.

—"F" veintiséis.

—¡Bingo!

—¡Exelente! Llegué en el momento justo, vayámonos, April —Me jaló del brazo hasta salir del ancianato—.

—¿Por qué estás tan alegre hoy? —Pregunté estando ya afuera—.

—Hoy nos devolvemos pa' nuestro estadito bello —Sonrió—.

—Ajá.

—¡Las ferias de mayo! ¿No te emociona?

—No, desde que tengo once años no me emociona —Fruncí el ceño—.

—Daaaale, va a ser divertido, chama.

—Supongo —Suspiré—.

El auto de mi mamá se estacionó frente a nosotras. Ya va, khe.

Bajó la ventanilla.

—Siéntense atrás —Nos dijo y volvió a subirla—.

Abrí la puerta y entré seguida de Gabriela quien cerró la puerta.

Ya vi por qué me hizo sentarme atrás, la estúpida de Yulexis está en el asiento delantero dormia'. Ah ok, me cambió por una malandrita.

—¿Disfrutaste tu primera semana de trabajo? —Preguntó mirándome por el retrovisor—.

—Al parecer, es divertido —Se burló Gabriela—.

—Cállate —Le dije—. ¿Por qué viniste por mí?

—Vamos a buscar a tu hermana al aeropuerto.

¿Y qué hace esa mamagueva aquí?

—¿Qué hace ella aquí? —Pregunté—.

—Se aburrió de estar sóla en Londres, supongo.

—Claro, aburrida de estar en Londres —Murmuré sarcástica—. 

Yulexis se despertó de su "sueño profundo", se volteó a verm... ¡A LA VERGA! QUE FEA.

—¿Volviste a fantasear con One Direction? —Me preguntó—.

—Tú tan "One Direction" y yo tan "los chicos".

—Al menos yo no salí con dos de ellos.

—Al menos yo soy pareja de uno de ellos.

Just a Secret » l.t. ³Donde viven las historias. Descúbrelo ahora