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A la mañana siguiente, Bryan despertó, se ducho y emprendió camino a su trabajo. Ese día se sentía sin ganas. Solo había tomado como desayuno una taza de café humeante.

-Buenos días, Bryan -saludo Jacobo, uno de los compañeros de Bryan. 

-Buenos días -respondió, luego bostezo- ¿Qué tal todo?

-Aburrido -respondió con una sonrisa-, ¿y tu? ¿Qué tal estas? No te ves muy bien.

-No lo se, tengo sueño, supongo -se encogió de hombros. Jacobo asintió.

[...]

Día anterior.

-¿Que querías preguntarme? -dijo Freddy a Josh después de que Bryan abandonara la casa.

-Ah, si -se acomodo mejor sobre la cama-. ¿Crees que es muy pronto para pedirle a Lisa que sea mi esposa?

-¿Que? ¿Quieres casarte? -pregunto totalmente anonadó-. Dios...

-¿Crees que sea muy pronto?

-¿Cuanto llevan juntos?

-Tres años -respondió orgulloso.

-Creo que tal vez... deberías esperar unos meses mas -suspiro-. No lo se, no soy bueno en estas cosas, Josh.

-¿Estas cosas? Dilo, Freddy. Con confianza, repite después de mi -aclaro su garganta-: Amor -dijo lentamente-. Anda, repitelo.

-Eres un imbécil -negó con la cabeza-. Y sobre casarte... Esa cosa es de dos, ¿ella te ha dicho algo... Menciono o insinúo algo sobre la boda?

-No, no creo -suspiro pesadamente-. Gracias de todas maneras, Freddy. Eres el mejor primo que alguien pudiera tener.

-Lo se -rieron.

Presente...

No. No. No. No. No. Repetía esas dos letras desde que había despertado. Quería verlo, en serio quería, pero a la vez... No era así. 

Quería ir al Wal-Mart solo para ver su sonrisa y mirar su adorable hoyuelo que podía llegar a formarse algunas veces. Pero su otra mitad decía que no que debía esperar al menos un par de días para no quedar como un completo loco.

Aunque tal vez, para eso, ya era demasiado tarde. 

-Maldita sea -murmuro pasando una de sus manos por su castaño cabello- Lo quiero.

Wal-Mart. ||BM||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora