Capitulo 29

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(...)

Hoy es un día muy pesado, mucho trabajo en la oficina, muchos papeles en mi escritorio, en la barra que tenía a lado mío, muchos archivos por revisar, por ordenar, por firmar. Estaba acomodando los papeles de mi escritorio en orden. Esbocé con un tono suave y victorioso-: ¡Por fin!

-Señ...-

-¡AAH!.- deje caer los papeles en el suelo, mire a la señora de mínimo treinta años "Dila" Es el nombre de esa señora castaña treintona.- Me asustaste Dila ¿Qué sucede?.-

-Ay un joven en...-

-No estoy ahora, dile que si gusta podría marcarme en.- mire el reloj que colgaba en la pared gris.- en una ¿hora?, estoy ordenando esos papeles y necesito entregarlos.- mi voz sonó desesperada por la situación en que estaba.

-yo le digo que en una hora está disponible. Con su permiso.-

Solo asentí y ella desapareció de la oficina gris, cerró la puerta y solté un gruñido por los papeles que tenía que recoger, termine de recogerlo y ordene los demás, aguarde los que ya había usado, ya revise los que tenía pendiente, y ahora estoy firmando permisos y rechazando Solicitudes, pero sin antes de avisarle mi padre de esas solicitudes, escuche tocar la puerta de la oficina, levante la vista y el chico castaño ojiazul entro con una sonrisa tierna.

-Hola Louis ¿has terminado tu trabajo?.- deje lo que estaba haciendo para escuchar su respuesta.

Tomo asiento en una de las sillas negras que tenía al frente de mí, cruzo sus piernas y sus manos las descanso en su vientre.

-Sí, ya he terminado, veo que aún no entregas los documentos, yo apenas los entregue al Sr. Jean , solo faltas tú y creo que ya. Pero dime ¿Cómo has estado? Esta semana ha estado muy pesado que no he podido venir a saludarte.-

-Ahg, sí, me imagino que solo falto yo, espero que el Sr. Jean no se enoje, ya sabes, él es reservado en sus cosas pero cuando se enoja el trabajo se entorna en rojo.- me acerque más a él.- parece que es el infierno y él es el demonio.- dije en susurro lo cuán Louis solo una risa.-: y am..., eh estado muy bien, hasta ahora, con mucho trabajo y cansancio, no eh podido dormir mucho, con esto de que vivo en otro hogar y te confieso que no estoy acostumbrada compartir la cama, solo la compart...- decidí parar rápido.

-solo la compartiste con Harry.- solo asentí.- ____. No sabes cuantas veces él nos contaba cómo se sentía dormir contigo, es lo mismo que yo siento en dormir con Eleonor. Ella es el amor de mi vida y no me encantaría estar en tu posición.- su tono de voz se transformó en uno ronco y serio.

-Louis, él es pasado, ya no me preocupo si el piensa en mí, que estará haciendo, él tiene novia, y yo un novio, ¿Quién dice que tal vez en unos días me comprometa con él? Es un amigo, y espero que este muy feliz con ella, y se casen y tengan muchos hijos.- tenía miedo de que mi voz se quebrara pero sonó segura.-

Louis solo sonrío y se encogió de hombro dándole la menos importancia de lo que acabo de decir, él sabe que estoy mintiendo, pero esto ya está volviendo realidad.

-No creas Louis, se lo que estás pensando, pero no me importa amigo, llore mucho hasta quedarme dormida muchas noches y días, el la graduación llore, Eleonor estuvo conmigo en ese momento de dolor que tenía, él había prometido estar conmigo y nunca dejarme, dime esto no estaría pasando si él no se hubiera ido sin decir lo que sucedía, te hubiera pedido mi celular, como según te dijo que su celular se le ha olvidado en el tren ¿Por qué no te pidió mi número de nuevo? ¿Por qué no ha venido a visitarme? ¿Por qué no me llevo con él? O ¿Por qué no quiere que sepa dónde está el? Tengo tantas preguntas que hacerle.- al decir esto solté un largo suspiro y deje caer mi cabeza hacia atrás recargándola en la recárgasela de la silla de cuero.

Tal y Como eres (H.S & Tu) -Editando-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora