Perturbados

Capítulo 20

Faltaba poco para que la clase empezará, estaba en el patio, pensando en todo lo que había pasado, tratando de asimilar todo.
*-El no te quiere Amber... te está utilizando.-*
¿Será cierto lo que mi cabeza me estaba diciendo?
Eso no lo sé, pero lo que si se es que lo quería y mucho. Por mi cabeza pasaban esos momentos en los que estuvimos juntos. Pero al imaginarmelo en mi cabeza sabía que no tendría alguna mínima oportunidad con el y además es mayor que yo. Seguro conocera a otras chicas mucho menos feas que yo y... Quien sabe seguro y no soy la única que babea por el, tiene de donde escoger.
El timbre de inicio de la clase sonó, pero mis oídos se hicieron los sordos.
Mis sentimientos estaban mezclados entre amor, oido, ravia, tristeza, felicidad y muchas cosas más.
Algunas pequeñas sonrisas se me escapaban al escuchar en mi mente sus palabras... fueron tan sinceras y sentí que salieron de su corazón. Lo quiero pero a la vez lo odio y es complicado porque me molesta el no saber que es lo que en realidad siente por mi y me entristece pensar que sólo quiere engañarme con palabras bonitas.
El patio ya estaba casi totalmente vacío. Me levanté tomé mi cartera del suelo y mire hacia el alrededor y el sol iluminaba totalmente el lugar.
Camine hacia la puerta y entré, al entrar di dos pasos y vi a Mónica sentada en la recepción. Hacia dias que no sabía nada de ella y no puedo creer que no me haya acordado.
-Mónica Hola!-
-Hola-
-Que haces? Como estas? Y tus brazos, muestramelos.-
-Ya me curaron.- dijo levantando sus mangas y mostrandome.
Sus brazos sólo tenian las minúsculas cicatrices, al parecer alguien la había curado como tenía que ser. Puesto que yo y Jhonnatan no éramos enfermos.
-Que bien. Y quien te curo Mónica?-
-La enfermera.-
-Bueno... por que no pensamos en eso desde un principio?-
-Y Jhonnatan?-
-Esta en clase. Creo.-
-Y ya se casaron?-
-Que?! Jajaja de que hablas Mónica?-
-Cuando me estaba llevando a mi habitación me dijo que tu y el pronto se casaría y que me hiban a invitar.-
-El te dijo eso? Segura?-
-Si.-
-Las dos a sus clases!- dijo el de la recepción.
-Ok ya vamos. Mónica me tengo que ir te veo luego ok?-
-Esta bien.-
Me fui a mi salón, subí las escaleras hasta el piso donde se ubicado mi salón y al llegar no había nadie en los pasillos.
Me acerqué a la puerta de mi salón y la abrí todos voltearon sus caras hacia mí.
-Donde estaba? Llega tarde señorita Amber.-
-Disculpe... me retrase.-
Me senté en mi silla y Angélica estaba sentada junto a mí.
La mire y ella sonrío.
-Que pasó?-dijo curiosa
-Que?-
-Mm Jhonnatan... hablaron?-
-Si... discutimos otra vez.-
-Y... Que te dijo?-
-Tantas cosas... algunas bonitas.-
-En serio? Que?! Dime!!-
-Bueno... dijo cosas que me hizo pensar en que fue estúpido mi enojo. Me siento tan estúpida por haberme enojado sin sentido.-
-No entiendo.-
-Me enojé porque el dijo que le gustaba lo casual... Pero esta mañana se contradijo y... me asesina lentamente tenerlo cerca.-
Continuamos hablando por unos 13 minutos más.
-Ok Amber... entonces vendras a mi cuarto luego de la salida?-
-Si... debemos entregar eso... Y más yo que no tengo casi notas.-
-Si... le diré a dereck que busque los libros por nosotras.-
-Esta bien... él me cae bien.-
-Si, es una persona muy cálida.-
El timbre tocó y salimos y nos dirigimos a su habitación, Entramos y me sente en su cama. Las habitaciones eran absolutamente iguales unas a otras.
Dereck estaba acostado en su cama mirando hacia el techo.
-Hola... Amber? Cierto?-
-Si... Hola dereck-
Angélica abrió las gabetas del pequeño escritorio que estaba en la habitación y sacó un montón de hojas blancas, saque de mi cartera una pluma y comencé a hacer la hoja de presentación.
-Dereck puedes buscar por favor unos libros sobre política en la librería?-
-Esta bien...-
Dereck se fue y quedamos Angélica y yo haciendo cosas esenciales.
Luego de unos 11 minutos dereck regresó con 4 libros gruesos en sus manos.
Comenzamos a hacer el dichoso álbum sin descanso.
Se había hecho ya tarde. Eran como las 6 de la tarde creo. Estábamos sólo terminando algunos detalles del trabajo.
Terminamos y yo salí me despedí de Angélica y luego de dereck.
-Hasta luego dereck!-
El se levantó y me abrazó en forma de despedida y me dio un tierno beso en la mejilla.
-Hasta luego Amber.-
Cerré la puerta y fui a mi piso. Llegué a mi habitación y no había nadie. Estaba vacía.
Me duché, me puse algo cómodo y me acosté a dormir... Estaba cansada.
Eran como las 3 de la mañana cuando de repente mis ojos se abren de golpe y me incorporo de un salto estaba sudando completamente lo había hecho de nuevo esa pesadilla esa horrible pesadilla que no tenía explicación alguna.
Mi respiración se escuchaba en la habitación y suspiros escapaban de entre mis labios.
-Estas bien Amber?-
-Si...- dije.
Era Jhonnatan sentí como se levantó de su cama y se sentó junto a mi, podía sentir su pecho desnudo y mi corazón estaba teniendo un ataque.
Rodeó su brazo por mi espalda y lo puso sobre mi hombro derecho. Sus manos eran tan grandes y rústicas pero a la vez sensibles y frágiles.
-Denuevo cierto?-
-Si...-
-No es la primera vez Amber...-
-Es la segunda vez que me sucede.-
-No. Te ha pasado varias veces pero en sólo dos haz despertado.-
-Como lo sabes?-
-Porque escucho claramente tu respiración desesperada.-
-Es... horrendo.-
Estaba hablando nuevamente con el y estaba sintiendo una paz tan inmensa.
Pase mi brazo por su espalda y lo pose en su cintura, esa acción hizo que me recostará en su cuerpo, posando mi cabeza con mi cabello despeinado sobre su pecho. Podía sentir su respiración y estaba acelerada, muy acelerada.
¿Será? No. No lo creo que esa respiración sea por mi.
El me envolvió en sus brazos y me sentí tan bien. Sentía las puntas de su cabello en mi frente. El traía unos pantalones pijama que habitualmente usaba y que por ciento se le veían tan sexy. Y yo llevaba una camisa que me llegaba a los muslos y un diminuto short que usaba para dormir.
-Lo siento por ser estúpida.-dije susurrando.
-Fui yo el estúpido, no tienes nada por que disculparte Amber. Soy yo el que debe hacerlo. Lo siento... todo va a estar mejor.-
-Si... lo sé-