Capítulo 12

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Esa noche no pude dormir, por todas las cascadas de ilusiones que me estaba haciendo.
-*Adorable? Yo?*-
Eso es totalmente imposible, yo soy todo un desastre.
-*pero él es tan lindo y tierno, al igual que su novia*- nuevamente ese horrible sabor amargo.
Al día siguiente me desperté mucho antes que jhonnatan, cuando miré hacia su cama y lo vi pensé. -*Hasta durmiendo es lindo-* -*por Dios no tienes ni dos días aquí y ya te gusta, nisiquiera lo conoces amber!-*
Yo lo continuaba contemplando desde el borde de mi cama donde me había sentado. Hasta que llegué a la realidad y decidí bañarme para alistarme para ir a mis clases. Entre al baño y me quite lo que llevaba puesto. Me duché y salí había olvidado mi cepillo para peinarme, así que tomé la toalla que estaba en el baño y salí a buscarla un momento nadie ve vería además jhonnatan estaba durmiendo profundamente. Abrí la puerta y estaba él parado en la esquina de mi cama, Cure que estaba esperando que saliera del baño. Giro su cabeza cuando escucho que la puerta se había abierto y me vio hay parada, mojada y sólo con una toalla de prenda. Sus ojos se movían de arriba a abajo, yo estaba totalmente fría y muerta de pena quería que la tierra me tragara en ese instante. -Mmm... podrías pasarme mi cepillo que está en la mesita?-
-Claro señorita- dijo sonriendo maliciosamente, eso me molestó un poco.
-De que te ríes?- le dije un poco molesta.
-Mmm de nada...- denuevo esa risa maliciosa pero que se le veía tan sensual.
-Dime.-
-Jaja mejor no.-
-Dímelo ya.-
-Ok... me rio porque la toalla que traes enrrollada es mía.- me mire y vi que era cierto, como no me pude dar cuenta que no es mi toalla.
El tenía su mano extendida hacia mi con mi cepillo en la mano, el estaba a centímetros de mi. Quería desaparecer de hay. Que vergüenza más grande. Tomé mi cepillo de su mano, más bien se lo arrebate celosamente porque me enojo que se diera cuenta que era su toalla.
-Debería arrebatarte mi toalla por venganza y por grosera.- dijo con esa sonrisa nuevamente que me hizo sonrojar. Cerré la puerta y me arrecoste del otro lado de la puerta y puse las manos en mi cara -*Que acaba de pasar?*-
Estaba apenada pero a la vez feliz nose porque demonios lo estaba. Pero era fantástica esa sensación... era satisfactoria esa deliciosa sensación. Termine de peirnarme y me vestí salí y estaba sentado en su cama. Me miró y sonrió nuevamente y entro a bañarse. Sentí sus penetrantes ojos sobre mi nuca. Pero recordé que no me tengo que ilusionar porque ese chico tiene novia. Y por que sólo es mi amigo. Sólo mi amigo, sólo mi amigo un buen amigo, sí , sólo eso.
Termine de arreglarme y comenzar a ordenar mis cosas... mis cuadernos y mis libros. Escuché la puerta del baño abrirse y el estaba saliendo del baño y tenía jhonnatan la toalla enrollada en su cadera y estaba pasando la mano por su cabello, lo vi por encima de mi hombro y al verlo tuve que quitar la mirada. Sé que lo hizo a propósito... y creo que por venganza. Tomé mis cosas y salí rápido para evitar seguir admirandolo y babearme al frente suyo. Cuando hiba saliendo escuché que susurró:
-Hasta luego, señorita.-
-Adiós- dije saliendo y cerrando la puerta.
Faltaban solo 10 minutos para que empezarán las clases y empeze a bajar las escaleras cuando llegué a él pasillo de los salones y sólo di dos pasos y una campaña sonó y se escuchó una avalancha de personas que venían bajando por las escaleras, luego de unos 18 segundos personas pasaban casi chocandome, camine junto con la multitud y encontré mi salón, entre y ya habian varias personas de mi salón, no estaban todos pero los que estaban hablaban entre ellos y se reían los vi y ellos me vieron. Me dirigí a mi asiento y me senté puse mi cartera a un lado y sólo pensaba en jhonnatan, más chicos continuaban entrando y se unían más entre ellos y continuaban hablando. La puerta se abrió y entro el profesor cuando lo vi recordé lo de el día anterior y la intriga invadió mi mente, el me miró y me sonrió yo sólo lo mire fijamente a los ojos y no hice ninguna expresión, su cara cambio y puso el maletín que traía en su escritorio.
-Haber buenos días, por favor tomen asiento- todos se dirigieron a sus asientos y cerraron sus bocas.
-Emmmhhhh tú... cuál era tu nombre?- me señaló y le contesté.
-Amber.-
-Si. Amber, ya que eres muy grosera quieres levantarte y venir al frente. Ahora.-
Me levanté y fui hacia el frente, todos me miraban fijamente, no se cuáles eran sus intenciones pero para que no fuera peor le obedeci.
-Bien. Ya que eres muy sabionda puedes decirme como se determina el tamaño de un átomo? Si es que sabes jajaja.-
Todos se miraron unos a otros creo por la dificultad de la pregunta.
-Se determina por su radio atomico, que es la distancia desde los electrones de Valencia hasta el núcleo.-
Todos se quedaron atónitos completamente.
Me llamaba la atención la química y me gustaba robar y leer los libros de mi hermano. Claro eso era antes de que muriera. Mire al profesor y estaba enojado, creo que sus intenciones eran humillarme pero no lo logró. Todos me miraron con una cara de ¿cómo sabes eso?.
-Puedes sentarte.-
-De nada- le dije y me dirigí a mi puesto donde me sentí orgullosa de mi misma. Yo sólo continuaba pensando en las bonitas caderas de jhonnatan que se marcaban con esa toalla que tenía enrollada en su cintura y en que tuve esa misma toalla enrrollada en mi cuerpo. Cuando lo recordaba mi corazón latía más fuerte. Sólo quería que la clase acabará para volver a sentir lo mismo denuevo. Pero recordé a su novia y mi mundo se puso gris y entonces no quería que acabarán las clases y no verlo para que no siguiera acelerando mi corazón otra vez. Pero luego recordaba su cabello mojado... Y así estuve toda la clase. Mis sentimientos estaban tan bipolares y a la vez confundidos. Pero esa sensación era deliciosa.

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