Capítulo 32 Es ella

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Hermione estaba molesta, que decir estaba furiosa, entro a la Madriguera seguida del rubio, se recordaba mentalmente "solo es salsa y el un idiota" subió un par de escaleras y paro en seco, se giró y lo encaro ― ¡ahí está el baño! ― Le grito mientras le señalo con el dedo una puerta a su derecha, se giró e ingreso por otra puerta que estaba justo frente al baño.

Hacía años que él no la veía echando chispas "que mal genio" pensó mientras se desabotonaba su camisa, se encogió de hombros cuando escucho el portazo proveniente de Hermione, por inercia volteo a ver por donde había desaparecido la chica, la puerta del impacto había revotado y ahora se habría lentamente, Draco hubiera seguido su camino si no hubiera reconocido de inmediato la camisa a cuadros que estaba tirada en el suelo, siguió su vista un poco más por el piso y avizoro la blusa blanca de tirantes, trago en seco y levanto la mirada, exploro todo el escenario de la habitación que desde su lugar le permitía observar pero no encontro rastro de ella, el ruido de cajones le confirmo que seguía ahí, giro a ambos lados su cabeza para confirmar que nadie lo veía, con sumo cuidado dio unos pasos más e ingreso a la habitación. Entonces tubo frente a él a unos escasos cuatro metros a Hermione, de espaldas a él, estaba inclinada, buscando seguramente una prenda en los cajones de un tocador, ya no llevaba sostén, este estaba tirado a sus pies.

Se sintió como un voyerista mientras su miembro se endurecía y presionaba bajo su pantalón ¡Por Merlín, es solo su espalda desnuda! Se regañó mentalmente, pero no era solo eso, desde ahí tenía una vista magnifica de su trasero inclinado, se imaginó todo lo que podría hacerle en esa posición, admiro sus nalgas bien formadas y firmes, sus anchas caderas, su pequeña cintura, su columna vertebral se marcaba en esa posición. Su espalda lo invitaba a acariciarla, besarla, dio un paso más y una tabla crujió bajo su zapato.

Hermione se sobresaltó, se irguió y volteo aprisa, se quedó en shock cuando descubrió a Draco a unos metros de ella, mirándola con vehemencia, deseo y lujuria, podía sentir su hambrienta mirada sobre ella, llevaba su camisa desabotonada hasta la mitad y se apreciaba que bajo su pantalón una enorme erección pedía ser liberada, el comenzó a cercarse lentamente a ella, una brisa entro por la ventana y la hizo temblar, fue hasta entonces que reparo en que estaba desnuda del torso hacia arriba, por instinto cubrió sus senos y dio un paso hacia tras pero choco con el mueble.

―Sal de aquí Malfoy ―le dijo apenas en un susurro audible. Él despertaba en ella ese lado oscuro y sensual que ella intentaba disimular torpemente. Porque por más que deseara negárselo a sí misma, deseaba que la tocara.

Draco elimino la distancia que los separaba, la tomo por la cintura y ella sintió que sus manos quemaban, puso sus manos sobre el pecho de él para empujarlo, pero fue inútil, él observo sus senos, se veían más grandes que la última vez que los había succionado, recorrió su cuerpo con las manos mientras las ascendía hasta llegar a ellos, los aprisiono en sus manos, a penas y cabían en ellas, sus pezones se endurecieron bajo su mirada, él lo interpreto como una invitación a ser probados, posiciono su boca frente a uno de ellos, con su lengua delineo el contorno de su areola, sintió la presión de las uñas de ella sobre su pecho y lo éxito más, atrapo el pezón entre sus labios y comenzó a succionarlo mientras estrujaba el otro seno. Sabía tan jodidamente exquisita...

Hermione supo que estaba perdida en cuanto sintió las manos de él sobre ella, había sucumbido ante la pasión que solo él sabía despertar de esa forma en su cuerpo, él había prendido una llama furiosa dentro de ella imposible de apagar, su parte más íntima comenzó a humedecerse, el deseo en ella se incrementó, cuando sintió la boca de él sobre su seno, no pudo retener más el gemido que llevaba segundos intentando contener, clavo sus uñas sobre el pecho de él, ese tórax musculoso donde deseaba colocar besos y caricias, llevo sus manos hasta el cuello de él y con una pierna lo abrazo, Draco poso su mano bajo la pierna que esta había levantado y la impulso hacia arriba, Hermione sujeta de su cuello y sostenida por él enredo sus piernas en torno a él, podía sentir el bulto enorme bajo sus nalgas y mirar a Draco perdido en sus senos era muy excitante.

"La regla es, no enamorarse Malfoy" #DramioneawardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora