Todo Lo Que Quería (James Sirius Potter)

Expreso de Hogwarts

Narra Lizzy.
Estaba en Kings Cross, despidiendome de mis padres, llegamos con tiempo de sobra, así que no teníamos apuro.

-Escríbenos como todos los años.- dijo mi padre.

-Sí, y disfruta mucho, hija. Es tu penúltimo año.

-Ya lo sé.- eso me entristecía. Amaba Hogwarts.

-Y cuídate de los Nargles, recuerda: no te acerques demasiado al muérdago. Aunque creo que valdrá la pena si te acercas con algún chico.- dijo mi madre riendo, y mirando a mi padre.

-¡Ni lo sueñes! No te acerques al muérdago... No te acerques al chico...

-Ya no es una niña Rolf- le dijo mi madre.

-¿Qué quieres decir con eso? Es mi hija...

Dejé de prestarles atención al ver que cruzaban, muy apurados, el andén 9 3/4, la familia de los Weasley. Bueno... Fred Weasley jr., con su madre y su padre, el dueño de Sortilegios Weasley.

Fred iba a Gryffindor, pero estos últimos días salí a caminar y llegué hasta La Madriguera, donde me encontré con Fred, quien me invitó unas galletas de su abuela.

Él me saludó con una sonrisa y yo levanté mi mano. Su padre le dijo algo que hizo que se pusiera colorado como su cabello y mirara a su padre con cara de *¿¡qué mierda dices?!*

Y entonces llegaron los Potter, James Sirius fue directamente a saludar a Fred, dejando a su hermanita con su madre. Albus, su hermano se acercó a Rose, su prima y a Scorpious, el hijo de los Malfoy, quien era su amigo.

Me quedé mirando a Lily, hacía un montón de tiempo que no la veía, recuerdo que tan sólo era una bebé, y se la veía muy nerviosa, creo que era su primer año.

Ella me reconoció y me saludó con una mano, sonriente y yo hice lo mismo. Luego ella se acercó a Hugo, hijo del auror Ron Weasley.

Luego de terminar de despedir a mis padres me subí al tren y encontré mis amigos Chris, Vee y Lewis, todos de Hufflepuff.

¿Dónde está Zack?- pregunté.

-Con su novia. Mua, mua.-dijo Leeis tirandi besos al aire, haciendo reir al resto. Sí, los extrañé.

Cuando el tren se puso en marcha, Lily y Hugo, pasaron por nuestro compartimiento.

-Lizzy.- empezó Lily con timidez.- podemos sentarnos con ustedes, es que no hay más lugar.

-Seguro. - contesté sonriendo y mirando a todos.

Ellos pasaron y se sentaron los dos juntos enfrente mío, al lado de Chris.

-Bueno...- empecé.- ellos son Lily Luna y Hugo.- dije presentandolos a mis amigos.- Lily, Hugo, ellos son Chris, Lewis y Vee, todos de Hufflepuff.- señalando a cada uno.

-Que bien, que hubiese dicho mi abuelo si me sentaba con personas de Slytherin- comento Hugo.

Yo reí ante su comentario, porque era verdad.

-Bien, pero las serpientes ya no están marcadas como personas malas, no como antes. Más ahora que tu hermano, Lily, está ahí. Y su mejor amigo es Scorpious.

Conversamos animadamente todo el viaje. Pasó el carrito de los dulces y como es tradición con todos mis amigos compramos muchos.

-¡Lily! Aquí estás.- dijo un azabache asomando su cabeza por el compartimiento. Atrás suyo estaba Fred.

-Si. ¿recuerdas a Lizzy?- le preguntó Lily señalándome.

-Si.- dijo hechandome una ojeada.- creí que te sentarías con nosotros.

-Pues lo intenté, pero ocupaban todo el compartimiento.

-Como sea, creí que no habías podido subir o algo... Te aconsejo que te vayas poniendo el uniforme, porque luego los baños estarán muy ocupados.

- Tiene razón.- dije, el me volvió a mirar y se fue.

Ya estábamos en la selección de casas y llegó el turno de Lily.

-¡GRYFFINDOR!- gritó el sombrero seleccionador y aquella mesa estalló en aplausos.

Cuando Lily me dirigió la mirada. Yo asentí con la cabeza, sonriendo y haciendo un gesto de aprobación con la mano.

Me había alejado de ellos hace mucho y era como si no los conociera.

Narra J. Sirius.

Mi mamá estaba como loca porque pensó que llegaríamos tarde y no podríamos subirnos al tren. Pero como siempre no fue así.

Llegamos perfectamente. Mi hermanita, iba a cursar su primer año y estaba muy nerviosa, por lo cual me gustaba molestarla.

Atravesamos el andén y fui directamente a Fred. Todavía quedaban tres minutos para despedirnos de nuestros padres.

-Pensé que no llegarías.- me dijo Fred.

-No te pongas como mi madre.-
Juntos dejamos nuestros baúles y volvimos con nuestras familia.

-Ella es Lizzy ¿verdad ma?- escuché que decía Lily, señalando a una pelirroja, que conocía como Lizzy Scarmander. Según recuerdo, Lily era muy pequeña cuando Lizzy se juntaba con nosotros.

-Si es ella. Que raro que te acuerdes.- le contesta mi madre.

-Bien Lily- dije interrumpiéndolas- creo que ya no necesitarás un inodoro de Hogwarts. Pero... Si quieres, mamá, te puedo mandar uno.- mi padre rió.

-Tengo que hablar con tu tío.- fue lo que dijo mi madre.

-Bueno, mamá, papá, les escribiré como siempre. Los... Quiero. Nos vemos en las vacaciones.- mi mamá me dio un beso, y cuidé de que nadie me viera, hubiese sido muy vergonzoso y saludé a mi padre con un abrazo, y me subí al tren.

En el compartimiento, éramos siete personas. Jugamos e hicimos bromas todo el viaje, hasta que me percaté de que había acordado con Lily que se sentara con nosotros. Entonces empecé a buscarla por todo el tren. Fred me acompañaba porque tampoco encontrábamos a Hugo, quien siempre estaba con Lily.

Los encontramos, casi al final, con un grupo de Hufflepuff.

-¡Lily! Aquí estás.- dije entrando abriendo las puertas del compartimiento.

-Sí. ¿recuerdas a Lizzy?- me preguntó Lily señalando a Scarmander. La miré, de cerca su pelo parecía mucho más rojo.

-Si... Creí que te sentarías con nosotros.- volviendo a mi hermana.

-Pues lo intenté, pero ocupaban todo el compartimento.

-Como sea, creí que no habías podido subir o algo... Te aconsejo que te vayas poniendo el uniforme, porque luego los baños estarán muy ocupados.

- Tiene razón.- dijo la voz de Lizzy. La volví a mirar y salí del compartimento.

-Me encontré con Lizzy hace unos días.- me dijo Fred.

Lo miré con cara de no entender.

-Sí, ¿te acuerdas cuando venía a la casa del abuelo? Eramos niños.

-Si... Nunca más supimos nada de ella. Es la guardiana de Hufflepuff ¿no?

-Sí.

-¿Es buena?

-No lo sé, dicen que sí. Pero recuerda que me castigaron junto a ti y no pudimos verla jugar.

Una vez que llegamos comenzó la selección de las casa.

Mi hermana quedó en Gryffindor.

Toda la mesa aplaudió, y Fred y yo gritamos ¡Lily!¡Lily!, y ella se moría de la vergüenza.

Saludó a la mesa de Hufflepuff, en dirección a Lizzy quien respondió al saludo.