Invisible

We found love

·LÍA·

Josh me acompañó hasta la parada del autobús como hacía siempre. Cuando vimos que este se acerbaba, Josh me abrazó y me dio un beso de despedida.

- Hasta luego, preciosa. ¿Depués te recojo y vamos a mi casa?

- ¡Vale, hasta luego! -me depedí sonriendo.

Subí al autobús y rápidamente escuché los gritos de Drake, que me llamaba para que me sentase a su lado.

- Hola, Drake -le abracé a modo de saludo.

- Hola, Lía. ¿Qué tal?

- Bueno, todo lo bien que se puede estar a estas horas de la mañana... Dios, qué sueño tengo...

Él rió.

- Mira la cara de Iris, parece que está loca. No ha dejado de sonreír desde que ha subido al autobús.

Miré a Iris, que estaba una fila más adelante a la derecha, y ví que era cierto. Tenía la sonrisa como grabada en la cara. El autobús se detuvo y subió alguien. Era Kenneth. Nuestras miradas se cruzaron por un momento pero él la desvió hacia Iris. Se sentó con ella y esta le dio un beso. ¿Qué me había perdido?

- ¿HOLAA? ¿QUÉ ESTÁ PASANDO Y POR QUÉ NO SE ME HA INFORMADO? -Drake gritó sorprendido.

Ellos rieron. El trayecto al instituto se me hizo eterno intentando no mirar a Kenneth e Iris y escuchando lo que Drake me contaba sobre no sé qué videojuego.

- Lía... Líaaa.

- ¿Eh? Sí, dime.

- No me estás escuchando.

- Sí, estabas diciendo... -no supe continuar.

- Da igual, déjalo... -ahora me sentía fatal.

- Drake, lo siento mucho... es que... no sé qué me pasa...

- Te lo puedo decir yo, si quieres.

- ¿Eh? -pregunté confundida.

- Te gusta Kenneth -me susurró al oído.

Sentí cómo se me helaba la sangre. No quería que nadie supiese nada.

- No soy el único que se ha dado cuenta de vuestro rollo extraño, Nate también lo intuye.

- ¿Quién habla de mí? -Nate se asomó desde el asiento que estaba detrás del mío.

- Le decía a Lía que sabemos su pequeño secretillo... -le dijo en bajo Drake.

- Por favor, no se lo digáis a nadie... -me temblaba la voz.

- Tranquila, no diremos nada. Lo que no entiendo es... ¿qué haces entonces con Josh?

- No lo sé, ¿vale? Yo... Él se quedó a mi lado en el hospital... Estuvo junto a mí...

- Tranquila -me abrazó. - Nosotros te apoyamos, ¿vale? Te ayudaremos en lo que necesites.

- No creo que podáis ayudarme en esto... yo solita lo he estropeado. Y ahora es tarde -quería llorar en aquel momento.